Daphne Greengrass y el niño que vivió -COMPLETO-

Capítulo 137: Mansión Malfoy

Capítulo Ciento Treinta y Siete: Manor Malfoy

Grimmauld Place no había estado tan ocupado en meses. La última vez que hubo tanta gente fue cuando la Orden del Fénix todavía la había estado usando como sede. Ahora, sin embargo, Sirius, Remus, mamá y papá vinieron con bastante frecuencia, con visitas ocasionales de Bill, Fred y George.

Sin embargo, la mayor diferencia entre esta época y el quinto año de Daphne fue que esta vez, la Orden del Rayo estaba realmente a cargo de las operaciones. Cuando Daphne explicó inicialmente su plan de llamar a la Orden del Fénix para ayudar, Harry había sido esperanzador pero escéptico, pero Sirius lo había aceptado casi de inmediato, decir que la Orden podría usar un impulso moral para todos y sacar a los prisioneros de la casa de un Mortífago real haría exactamente eso. Las cosas no iban bien en todos los ámbitos, y aunque el plan para atacar a Malfoy Manor era extremadamente arriesgado, el hecho era que había que hacer algo grande para enviar el mensaje de que todavía había personas dispuestas y capaces de resistir a Voldemort.

Sin embargo, dado que Daphne y los demás tenían motivos ocultos además de rescatar a su amigo, estaban coordinando todo, y rápidamente quedó claro que el tiempo de Harry como líder de la Orden del Rayo en Hogwarts y el capitán del equipo de Quidditch le había dado la confianza necesaria para hacer bien el trabajo, hasta tal punto que incluso Sirius y Lupin quedaron impresionados, aunque Harry admitió en privado a sus amigos que al menos la mitad de la confianza que mostró en las reuniones de estrategia era falsa y que estaba extremadamente agradecido por el conocimiento y la habilidad de la Orden de la Phoenix provisto.

Aun así, los planes se estaban uniendo muy bien. Alguien siempre vigilaba la mansión Malfoy, y Daphne había estado practicando su habilidad para sentir magia defensiva, e incluso le había dado algunos intentos de proteger a Malfoy Manor.

Como se esperaba, el obstáculo más difícil de superar sería la mala suerte contra la aparición. Entrar no sería demasiado difícil, ya que los Snatchers fueron vistos ocasionalmente, ya sea por nuevas órdenes o por un prisionero en el que los Death Eaters podrían estar particularmente interesados. Los comedores de la muerte simplemente podían caminar por la puerta levantando los brazos izquierdos.

En consecuencia, el plan para ingresar sería uno que buscara refugio en la audacia: afirmarían haber atrapado al propio Harry Potter. Seguramente, los Mortífagos abrirían la puerta para eso. Por supuesto, los 'Snatchers' en realidad serían miembros de la Orden, y la intención sería someter a los Death Eaters antes de que pudieran llamar al propio Voldemort. Después de eso, sin embargo, las cosas se volverían difíciles. Aparecer de la mansión sería imposible, y tenían que tener en cuenta que podrían venir refuerzos, incluido el propio Voldemort. Además, no estaban seguros de la forma en que estarían los prisioneros, una vez que hubieran sido liberados.

"No hay forma de romper un Jinx Anti-Desaparición?" Ron preguntó.

"Hay formas, pero son difíciles de realizar en el acto", dijo Bill. "Los Jinxes antidesaparición generalmente se colocan de una manera muy compleja y en capas. Fueron diseñados intencionalmente para ser difíciles de disipar. Con el talento de Daphne, podríamos ver qué variación están usando y cómo disiparlo, pero incluso eso llevaría algún tiempo, lo que podríamos no tener. Y cuando cae el mal de ojo, las personas también podrán postularse en, es decir, usted sabe quién tendrá acceso instantáneo a nosotros también, aparte de Snatchers y Death Eaters."

"Podemos colocar un Jinx Anti-Disapparition en algún lugar de un bosque para que pueda practicar?" Daphne preguntó. "Tal vez entonces pueda encontrar la debilidad de la de la mansión lo suficientemente rápido como para que tengamos una salida segura. Después de todo, podría comenzar a trabajar en él en el momento en que hayamos derrotado a los Mortífagos allí."