𝐒𝐞𝐱 𝐃𝐨𝐥𝐥 [ +𝟏𝟖 ]

Capítulo 11

Un mes después

Pov Samanan

— Más, Sam — gemía Mon en mi oído, estabamos en la cama, ella debajo de mí, mientras que yo la penetraba con fuerza.

— Lo que digas, amor — le dije, aumentando las embestidas.

— Ahhh, Sam — luego de siete minutos, llegó a su orgasmo, siempre que estaba a punto de llegar, me detenía para que no lo hiciera y, aunque se quejaba, lo hacía para que cuando por fin lo alcanzara, fuese un orgasmo abrasador.

— Ahhh, Mon — llegué a mi orgasmo luego de embestirla cuatro veces más, nunca me canso de esto. Llevamos un mes como conejas, solo no hacemos el amor cuando voy a clases. Caí encima de ella y enterré mi cara en su cuello, sin salirme de ella. — No me sorprendería que estés embarazada — murmuré en la piel de su cuello, ella se erizó un poco y se rio.

— He observado que en las no... Novelas mencionan mucho esa palabra, pero aún no sé qué es — suspiró.

— Es cuando tienes a un bebé en tu vientre — toqué su vientre para enfatizarlo. — Un saludable varón o una hermosa princesa — sonreí, sé que aún no he terminado mi carrera, pero quiero horriblemente un bebé mío y de Mon, aunque no sé si ella pueda darme hijos. Probablemente, no pueda, pero sí quiero un bebé nuestro.

— No me voy a comer a un niño — me empujó un poco, su cara era horror puro.

— No amor — me reí. — Mmm, el líquido blanco que expulso se llama semen, son millones de espermatozoides que navegan en tu interior hasta introducirse en un óvulo y ahí se va formando un bebé. No es que te lo vas a comer — intenté explicarle, volviendo a reír.

— ¿Entonces tendré millones de bebés? — preguntó mi inocente chica, qué lindo se escucha "mi chica".

— No, solo un espermatozoide entra al óvulo, pero si son gemelos, el espermatozoide y el óvulo se parten en dos y, si son mellizos, es que dos espermatozoides entran en dos óvulos distintos — no dejé de acariciar su vientre.

— Ahh, está bien — se veía confundida, sé que no me entendió nada. — ¿Y cómo sabremos si tengo un bebé en mi panza?

— Fácil, ¿Cómo te has sentido en estos días? — tenía esperanzas, yo más o menos sé que algo le ocurre.

— Mmm, estoy muy feliz, hemos salido muchas veces, nos besamos mucho mucho mucho y hacemos el amor mucho más — sonrió radiante.

— ¿Y aparte de eso? — no pude evitar sonreír también.

— Pues me duele la cabeza, los pies se me ponen pesados, me duele el estómago, a veces quiero vomitar y me mareo mucho — frunció el ceño.

— No me importan las probabilidades, claro que estás embarazada — me sentía feliz con la idea, aunque tendría que cuidar de dos niños.

— ¿Cuántos bebes quieres? — Mon parecía entrar en las posibilidades.

— Con los que tú estés de acuerdo — aún no sabe cómo nacen los niños y probablemente después de saberlo solo querrá tener el que viene en camino. — Hola, mi amor, soy mamá Sam — bajé a la altura de su vientre.

— ¿El bebé oye? — preguntó asustada.

— Aún no, pero quiero hablarle todos los días, tú también puedes hacerlo — besé ahí, Mon río un poco y jadeo.