Diecisiete: Decisiones

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El aire entrando por la ventana golpea su rostro, la cortina se balancea de arriba a abajo, la luz del atardecer da a su cara volviendo todo así más sereno, ella mantiene los ojos cerrados mientras sus dedos pasan de una cuerda a otra tratando de acallar los gritos y borrar los rayones que en ese momento su mente poseía. Tenía tanto tiempo sin sentirse así.

It's your young voice that's keeping me holding on—se escuchó aquella voz a lo lejos acompañada de una guitarra—To my dull life, to my dull life. And it's yo...

—Sabía que te encontraría aquí, aunque Gabriel no pudo negarme dar una pista—habló serenamente entrando al salón, interrumpiendo el melodioso canto del contrario por completo—¿Otra vez tocando esa vieja guitarra?

—No es vieja, sólo es vintage—le responde áspera dejándola a un lado. Desvía la mirada observando el cielo con tonalidades naranjas y rojizas.

—Debes sentirte realmente terrible entonces. Tú eres de guitarra eléctrica, no de acústica.—continúa el chico llegando a su lado.

Jamie no puede evitar sentirse un poco incómodo a su lado. La última vez que habían hablado no había terminado tan genial como hubiese deseado. La relación que ambos mantuvieron por meses la consideraba un ramé, donde lo caótico predominaba en su totalidad.
Y aún así, Zack no había cambiado en nada, su vida parecía haber continuado normalmente, aunque esta vez, no con Molly a su lado.

—¿Cómo está?—preguntó—Hablo de Gabriel.

—Preocupado, claro. Aún así, insistí en hablar contigo primero.

—¿Qué haces aquí?

—¿Acaso no puedo ver como te encuentras? Ser amable no va a matarte eh.

—Y-yo, lamentó haber salido corriendo así—dijo la peli rosa inaudible—Sé que debía enfrentar aquel problema con ese tonto, pero yo...

—Entiendo, no necesitas explicarme nada. Menos mal que Min apareció a tiempo—le calmo Zack soltando una leve risa—No siempre vas a poder ser fuerte o siquiera pretender que lo eres, además, te humillo frente a todos, me hubiese preocupado más que no huyeras.

—Pero tiene razón. Me veo como una chica, pero biológicamente no soy una. Jamás seré una.

—Ey, Jamie...

—Estoy cansada de sentirme así—susurro con cansancio—¿Por qué está mal todo lo que hago? No estoy...enfermo. Yo no pedí ser así, ¿Qué de malo tiene amar a alguien?

—¿Te imaginas cómo se siente Yoongi en este momento?—le respondió el otro tomándole por sorpresa, cambiando completamente el rumbo de la conversación—Es decir, tú descubriste cómo te sentías hace tiempo, incluso yo, pero él, ¡Él no tenía ni puta idea!—exclamo levantando un tanto la voz—Quizá siempre vivió oprimiendo aquel sentimiento sólo para alcanzar las tan altas expectativas que todos ponían sobre sus hombros.

—Sólo complacía a los demás, ni siquiera era capaz de..

—Pero por primera vez se sintió liberado ¿No?—interrumpió sonriendo—Y eso fue cuando te conoció. Dime una cosa, ¿Por qué te acercaste a él?

—Yo, no, no lo sé, quizá-

—No te acercaste porque es guapo, o inteligente, mucho menos porque juega béisbol, odias esas características por culpa mía—continúo riendo divertido—Pero...¿Entonces?

Insistió obligando a la otra a rodar los ojos.

—Park, ¿Por qué?

—¡Porqué...se veía tan desorientado como yo!—exclamó finalmente derrotada antes de que Zack siguiera insistiendo con lo mismo—Cuándo lo observe entrar esa tarde en detención, sabía que el miedo le acompañaba, siempre queriendo aparentar ser algo que no es por terror a lo que los demás dijeran.

I Kissed I Girl? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora