Después de ser derrotado por Naruto, Sasuke regresó a Konoha. Kakashi y Sakura se convierten en los mejores amigos y el Uchiha empieza a tener sentimientos extraños hacia la pelirosa. En la última misión a la que va el original equipo 7, Kakashi es...
Antes de entrar, pensaba que podría dejar pasar aquel encuentro de inmediato. Descubrir que sentía algo por su mejor amigo lo llevo todo al carajo.
Estaba confundida, y maldijo en esos momentos por no haber hecho lo que le dijo Tsunade, sobre romperle los huesos, tal vez así el jutsu se hubiera desprendido más rápido.
-Pero si hubieras hecho eso, no hubieras visto ese lado salvaje de Kakashi – Dijo una Sakura chibi diablito y ella sacudió la cabeza - ¿A quién engañas? no te arrepientes de nada de lo que pasó ahí. Bueno... si de mentirle y aprovecharte, pero no de pasar la noche con él – Dijo otra chibi Sakura vestida de angelito. Sakura miraba de un lado al otro con extrañeza. Apretó fuertemente a su chibi angelito - ¿Qué no debías darme solo un buen consejo?
Las dos chibis la miraron con una sonrisa pícara – Solo somos tu conciencia y no te arrepientes ¿o sí? – Dijeron chocando sus manos.
Sakura soltó a su conciencia y se golpeó la cabeza con un muro un par de veces... pero tenían razón. Se sintió egoísta al no querer perder la sensación del cuerpo cálido de Kakashi.
Por otra parte, él era un profesional, aquello no era algo de relevancia para un shinobi como él, acostumbrado a ese tipo de misiones ... aquello de ninguna manera lo haría sentir culpable y ansioso, tal como ella se sentía. Sin duda le faltaba mucho para ser un buen ninja.
Recordó la cara de espanto del Hatake y lanzó una maldición, hasta así lucía adorable... de repente todo en Kakashi le gustaba.
Ella se dio prisa y saltó de azotea en azotea con la cabeza revuelta.
Kakashi por su parte, salió del lugar todavía vistiéndose y apresuró el paso, volteando a todos lados. Nadie estaba en el largo pasillo hasta que, al salir, vio a Tsunade en la puerta.
– Bienvenido de vuelta hokage sama.
Después de un rato Sakura estaba en casa de Ino tomando un té helado, porque no quería, encima de todo, ir al día siguiente a trabajar ebria. Una vez que lo terminó, se dejó caer de cara sobre la mesa baja de la sala, pegando su frente a la tabla.
– No te ves bien ¿Quieres algo más fuerte?
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-No gracias puerquita.
A Sakura le regresó el recuerdo de Kakashi tomándola de la mano, haciéndola recorrer todo su cuerpo y a su memoria volvió todo lo que le dijo e hizo durante el encuentro, haciéndola tener una sacudida involuntaria que asustó a su amiga.
- ¿Cuándo tienes que ir con Kakashi sensei?
La kunoichi respiró muy hondo y apretó los ojos.
- ¡Ya lo hice con Kakashi y al terminar escapé sin decir nada!
