IV

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Habían sido días demasiado difíciles, más que todo para Kyungsoo que sentía que jamás en su vida volvería a querer tener un hijo debido al dolor que inundaba cada parte de su cuerpo luego de la cesárea.

—¡Lo conseguimos! —Gritó emocionado Chanyeol, correteando por toda la sala frente a los ojos cansados de Kyungsoo y su pequeño hijo recién nacido Jongdae que dormía plácidamente en los brazos del menor.

—¿Qué conseguimos, amor? —Preguntó con una leve sonrisa. Estaba cansado, adolorido, un poco de mal humor, pero jamás se atrevería a culpar a su novio. Al chico que decidió abandonar todo para estar con él a pesar de las críticas de las personas.

Chanyeol cubrió su boca, se acercó hasta el menor para dar por fin un beso en sus labios. La sensación cálida, tierna y suave provocó que el corazón de Kyungsoo se acelerará.

—Conseguí un buen trabajo que se acomodara a las clases de la universidad. Y hablando de universidad... Bueno amor, conseguí una beca.

Kyungsoo parpadeo, abrió su boca y con cuidado de no soltar al pequeño Jongdae acarició el rostro de su novio. Las marcas negras bajo los ojos de Chanyeol eran profundas, él sabía lo difícil que debía ser para su novio el estar trabajando, estudiando, soportando los llantos del bebe.

—Estoy tan orgulloso de ti, Yeol. Sabía que lo conseguirías. —Chanyeol beso nuevamente los rosados labios de Kyungsoo, luego negó lentamente.

—No lo conseguí yo solo, lo hicimos los tres. Debe ser duro para ti cuidar a nuestro hijo solo, quisiera permanecer aquí a tu lado cada momento. Me esfuerzo porque sé que en poco tiempo podremos ser una bonita familia con un grandioso auto, una gran casa... Un lindo hijo que sea educado y bien portado. —Kyungsoo mordió su labio y asintió, Chanyeol lograba siempre calmar sus dudas con el amor inquebrantable que le demostraba por medio de acciones y palabras.

—Confío en lo que me dices, siempre tienes razón Yeol. —Kyungsoo agachó su cabeza mirando a su pequeño hijo, luego volvió a mirar los ojos cansados de su novio, sonrió cuando una idea se cruzó por su cabeza. —Mi vida.

—Dime. —Respondió inmediatamente Chanyeol con voz tranquila.

—¿Puedes llevar al bebe a la cuna? No despertará en un buen rato, sabes que tiene el sueño pesado. Solo ve y dejalo, luego ven aquí que te voy a consentir.

Chanyeol asintió totalmente feliz, entre sus fuertes brazos acuno al pequeño llevándolo hasta la diminuta habitación. Kyungsoo suspiro, tomando de una caja las sábanas que había logrado sacar de su casa antes de huir con su novio.

Con pasos lentos y movimientos bien pensados estiró las sábanas en el suelo, tomó un par de sillas altas colocándolas de espalda para tomar una gruesa cobija que la cubría.

—¿Es un fuerte? —Preguntó Chanyeol qué arrastró los pies abrazando con dulzura a Kyungsoo.

—¡Somos unos niños aún! —Se defendió Kyungsoo cuando sintió el aliento ocasionado por la risa de su novio despeinar su cabello. —Mejor vamos a acostarnos debajo, ¿o no quieres?

Chanyeol no respondió, con cuidado ayudó a su novio a acostarse en el suelo, los dos con sonrisas miraban como los mickey mouse de la sabana parecían brillar debido a la lámpara que iluminaba el cuarto.

Kyungsoo se removió en el suelo, pasando su pierna sobre el cuerpo de Chanyeol sus labios se dirigieron al cuello del alto. La manera de relajar a su novio era con pequeños besos, caricias y mimos tiernos.

Lo habían hecho desde hace tanto tiempo, cuando el padre de Chanyeol lo lastimó por rechazar la cita con una chica que le agradaba y prefirió irse con él al cine, y también cuando su madre  vendió su guitarra sólo para castigarlo por ser 'desobediente'.

—Chanyeol, te amo mucho y quiero que sepas que no importa como hemos llegado hasta aquí o lo que nos depare el futuro, siempre te amaré por la bella persona que eres. Inteligente, dedicado, tierno, soñador, entregado, algo pervertido. —Los dos rieron en voz baja. —Siempre te amaré, y agradeceré haberte elegido.

Chanyeol miró a su novio, el rostro de Kyungsoo estaba aún un poco inflamado debido a la intravenosa de la intervención. Aún así lucia maravilloso a sus ojos, un bello chico que le traía calma, felicidad y le daba color a su mundo.

—Te amo mucho Soosie, y perdón por no haber revisado la calidad del condón. —Chanyeol cerró los ojos y suspiro, él ama con el alma a su hijo, pero sabe que es el producto de un descuido.

—No pienses mucho, igualmente vivir una vida bajo el yugo de mis padres no sería mejor a tenerte a mi lado. Nuestro hijo llegó lucho antes de lo planeado, pero igual era mi deseo tener un bebe tuyo. ¡Seremos verdaderos padres!

Chanyeol giro su cuerpo, atrajo en un abrazo a su novio para empezar a dar pequeños besos en su frente. Estaba cansado, pero conocía esa forma de respirar del menor.

—¿Enserio puedo?— preguntó Chanyeol.

—Sí, le pregunté al médico ayer. Esta bien. —Kyungsoo jadeo cuando la mano de su novio le apretó el trasero. —Solo relájate.


Sehun y Lay se miraron, luego a sus dos hermanos que sólo suspiraron.

—¿Qué es eso? —Señaló Sehun, sus colmillos recién estaban creciendo dándole una apariencia tierna. Jongdae apretó las mejillas de su hermano y susurro.

—Papá y mamá están dentro del fuerte de sábanas.

—¿No podemos entrar? —Preguntó Baekhyun y Jongdae negó.

—Es el momento que tienen para ser unos niños. —Elevó sus hombros sin comprender muy bien lo que había salido de su propia boca, lo cierto es que antes los había visto haciendo lo mismo.

Su mamá siempre se ponía feliz, como si un bello recuerdo le inundara el pecho mientras su papá llegaba con sábanas acolchadas, almohadas de diferentes tamaños y algunos peluches.

Kyungsoo se asomó por un pequeñín agujero, su cabello oscuro totalmente revuelto y con su mano llamó a sus hijos.

—Vengan, papi y mami quieren mostrarles algo.

Los pequeños se miraron entre ellos, gatearon entre las grandes almohadas entrando al fuerte, era mucho más amplio de lo que se veía por fuera y ahora tomaba sentido que los adultos estuviesen dedicados a hacer eso desde días.

Chanyeol estaba sentado con las rodilla frente a su cuerpo, invitó a sus hijos a que se recostaran cerca de él, haciendo lo mismo en un instante. Kyungsoo se acurrucó sobre él pecho de su esposo, las luces se apagaron y en la sabana superior las estrellas con pegatina brillaron.

—¡Wow que lindo! —Susurraron los pequeños.

—Cuando sean más grandes, ustedes crearán su propio fuerte con la persona que aman. —Explicó Kyungsoo.

—Pero eso solo lo pueden hacer una sola vez, un fuerte de sábanas es algo importante que se hace con quien deseen pasar el resto de sus vidas.

Chanyeol finalizó a lo que sus hijos respondieron con un sonoro "sí".

Kyungsoo acarició el rostro del mayor, aprovechando la oscuridad del sitio para darle un beso cargado de cariño al hombre más importante en su vida. Chanyeol no dudo en corresponder, pues cualquier lugar se volvía su hogar mientras Kyungsoo estuviese con él.

Good Parents || ChanSoo [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora