The Song;JJK

T R E S

Kim Jiwoo estaba en su habitación, mirando el álbum de BTS que había comprado. Era el mismo álbum que había visto a Jungkook en la tienda de discos. Era el mismo álbum que tenía la tarjeta de Jungkook. Era el mismo álbum que le había dado la oportunidad de ir al fanmeeting.

Sí, Jiwoo había sido una de las afortunadas que habían ganado el sorteo para asistir al fanmeeting de BTS. Había recibido un mensaje de texto con la confirmación y la invitación. Había saltado de alegría y había gritado de emoción. Había llamado a su mejor amiga y le había contado la noticia.

- ¡No puede ser! - había dicho su amiga, incrédula. - ¡Vas a ir al fanmeeting de BTS! ¡Vas a conocer a Jungkook!

- Sí, sí, sí - había dicho Jiwoo, eufórica. - ¡No me lo creo! ¡Es un sueño hecho realidad!

- ¿Y qué vas a hacer? - había preguntado su amiga, curiosa.

- No lo sé, no lo sé, no lo sé - había dicho Jiwoo, nerviosa.

- ¿Y qué vas a decirle? - había insistido su amiga, impaciente.

- No lo sé, no lo sé, no lo sé - había repetido Jiwoo, angustiada.

Jiwoo no sabía qué hacer ni qué decir. Estaba feliz y asustada a la vez. Estaba ilusionada y nerviosa a la vez. Estaba emocionada y ansiosa a la vez.

Porque iba a ver a Jungkook.

Porque iba a ver al chico que le gustaba.

Porque iba a ver al chico que había visto en la tienda de discos.

Jiwoo recordó lo que había pasado ese día. Recordó cómo había visto a Jungkook y se había enamorado de él. Recordó cómo Lee Sooyoung se había acercado a él y le había molestado. Recordó cómo ella se había quedado sin hablarle y se había arrepentido.

Jiwoo se preguntó si Jungkook se acordaría de ella. Se preguntó si Jungkook la reconocería. Se preguntó si Jungkook le hablaría.

Y se ilusionó con la idea.

Pero también se asustó con la idea.

Porque no sabía cómo reaccionaría Jungkook. Porque no sabía cómo se sentiría Jungkook. Porque no sabía cómo le iría a Jiwoo.

Y se preocupó por la idea.

- Jiwoo, ¿estás lista? - escuchó la voz de su madre desde el salón.

- Sí, mamá, ya voy - respondió Jiwoo, saliendo de su habitación.

Jiwoo cogió el álbum de BTS y lo guardó en su mochila. Se puso una chaqueta y unas zapatillas. Se miró al espejo y se arregló el pelo y el maquillaje.

Estaba lista para ir al fanmeeting.

Estaba lista para ver a Jungkook.

Estaba lista para vivir una sorpresa.

Jeon Jungkook estaba en el backstage del Olympic Gymnastics Arena, esperando a que empezara el fanmeeting. Estaba rodeado de sus compañeros y amigos, los otros seis miembros de BTS: Jin, Suga, J-Hope, RM, Jimin y V. Estaban todos vestidos con ropa casual y cómoda, pero también con estilo y elegancia. Estaban todos sonrientes y animados, pero también nerviosos y expectantes.

- ¿Están listos, chicos? - preguntó Jin, el líder y el mayor del grupo.

- ¡Sí, estamos listos! - respondieron los demás, al unísono.

- ¿Están emocionados, chicos? - preguntó J-Hope, el bailarín principal y el más alegre del grupo.

- ¡Sí, estamos emocionados! - repitieron los demás, con entusiasmo.

- ¿Están preparados, chicos? - preguntó RM, el rapero principal y el más inteligente del grupo.

- ¡Sí, estamos preparados! - afirmaron los demás, con confianza.

Jungkook también respondió a las preguntas de sus hyungs, pero sin mucha convicción. Estaba distraído y pensativo. Estaba impaciente y ansioso.

Porque iba a ver a la chica.

Porque iba a ver a la chica que le gustaba.

Porque iba a ver a la chica que había visto en la tienda de discos.

Jungkook recordó lo que había pasado ese día. Recordó cómo había visto a la chica y se había interesado por ella. Recordó cómo Lee Sooyoung se había interpuesto entre ellos y lo había acosado. Recordó cómo él había dejado a la chica y se había arrepentido.

Jungkook se preguntó si la chica estaría allí. Se preguntó si la chica lo esperaría. Se preguntó si la chica lo reconocería.

Y se ilusionó con la idea.

Pero también se asustó con la idea.

Porque no sabía cómo reaccionaría la chica. Porque no sabía cómo se sentiría la chica. Porque no sabía cómo le iría a Jungkook.

Y se preocupó por la idea.

- Jungkook, ¿estás bien? - escuchó la voz de Jimin, su mejor amigo y el vocalista principal del grupo.

- Sí, estoy bien - mintió Jungkook.

- ¿Seguro? - insistió Jimin, preocupado.

- Sí, seguro - afirmó Jungkook.

- ¿No estás nervioso? - preguntó Jimin, comprensivo.

- No, no estoy nervioso - negó Jungkook.

- ¿No estás cansado? - inquirió Jimin, atento.

- No, no estoy cansado - rechazó Jungkook.

- ¿No estás aburrido? - bromeó Jimin, divertido.

- No, no estoy aburrido - sonrió Jungkook.

Jungkook agradeció el gesto de Jimin, que siempre estaba pendiente de él y lo hacía reír. Jimin era su mejor amigo, su hermano, su alma gemela. Jimin era el único que sabía lo que le pasaba a Jungkook. Jimin era el único que conocía su secreto.

Jungkook le había contado a Jimin lo que había pasado en la tienda de discos. Le había contado cómo había visto a la chica y cómo le había gustado. Le había contado cómo había conseguido la lista de los fans y cómo había buscado a la chica.

Jungkook le había mostrado a Jimin la foto de la chica que había encontrado en internet. Era una foto de su perfil de Instagram, donde se llamaba @jiwoo97. En la foto, aparecía sonriendo con un filtro de corazones. Tenía el pelo castaño y los ojos grandes. Tenía una expresión dulce y tierna.

Jungkook le había dicho a Jimin el nombre de la chica: Kim Jiwoo. Era una estudiante de secundaria que vivía en Seúl. Era una fan de BTS desde hacía años. Era una soñadora que quería ser idol.

Jungkook le había confesado a Jimin lo que sentía por la chica: amor. Era un amor sincero y puro. Era un amor inocente e intenso. Era un amor imposible y real.

Jimin le había escuchado a Jungkook con atención y cariño. Le había dado su opinión y su consejo. Le había dado su apoyo y su confianza.

Jimin le había dicho a Jungkook que siguiera su corazón y que fuera honesto con sus sentimientos. Le había dicho que no tuviera miedo y que fuera valiente con sus acciones. Le había dicho que no se rindiera y que fuera feliz con sus sueños.

Jimin le había prometido a Jungkook que lo ayudaría y que lo protegería. Le había prometido que lo acompañaría y que lo animaría. Le había prometido que sería su cómplice y su aliado.

Jimin era el mejor amigo de Jungkook.

Y Jungkook era el mejor amigo de Jimin.

- Chicos, es hora de salir - anunció V, el vocalista principal y el más carismático del grupo.

- ¡Vamos, vamos! - exclamó Suga, el rapero principal y el más perezoso del grupo.

Los siete chicos se levantaron y se dirigieron al escenario. Se pusieron los micrófonos y se ajustaron los auriculares. Se miraron entre ellos y se dieron ánimos.

Estaban listos para empezar el fanmeeting.