𝑷𝒓𝒐𝒕𝒂𝒈𝒐𝒏𝒊𝒔𝒕𝒂𝒔: 𝑪𝒉𝒂𝒓𝒍𝒆𝒔 𝒚 𝑯𝒆𝒍𝒆𝒏𝒂.
—¿Si intento decir algo en español haré demasiado el ridículo?
Carlos, sin apartar la vista de la carretera, se rio fuertemente de su compañero. Charles, con gesto inocente, se preguntaba qué era tan gracioso.
—Charles, como digas algo parecido a "jamón icónico" no vuelves a entrar en España.
Charles le hizo el corte de manga a Carlos, entendiendo que se estaba burlando de él, y decidió que la vista que le ofrecía la ventanilla era muy interesante.
Hacía menos de un año que Carlos y él eran compañeros, pero ambos habían encajado a la perfección desde el principio. No solo se veían en el trabajo, sino que solían jugar al padel, salir a cenar con otros amigos y compartir algunos pensamientos que no parecían salir con otras personas. Carlos y Charles se habían hecho amigos. Y ahora se encontraban de camino a casa del español, donde se celebraría una comida familiar dentro de un rato. El GP de España tendría lugar dentro de una semana y Carlos quería que Charles se sintiera como en casa, sabiendo que era una persona muy familiar. Le costó un poco que el monegasco aceptara su oferta, pero Carlos sabía que su compañero le agradecía profundamente la invitación.
—Saben que voy, ¿no? —preguntó Charles al rato.
—Sí hombre sí, que con lo que comes si no aviso nos dejas sin churrasco a todos.
—¿Sin qué?
Carlos llevó una mano al hombro de Charles mientras se reía por lo bajo.
—Saben que vas, tranquilo.
Charles mantuvo una mirada de sospecha sobre el español, pero pronto se encontraron cruzando el portal de una parcela de tamaño considerable en cuyo centro se encontraba una gran casa de piedra, similar a las que Charles había visto de camino. Carlos detuvo el coche y ambos se bajaron. Acto seguido, Charles siguió a su anfitrión: primero por un camino empedrado, luego escaleras arriba, al interior de la casa; y finalmente a una terraza, en la que el olor a asado hizo rugir su estómago. Sin embargo, pronto se vio envuelto en una serie de presentaciones y de abrazos de los que Carlos le había advertido.
—¡Charles, cariño! ¡Bienvenido! —lo saludó la madre del piloto español mientras le cogía la cara para después darle un beso en cada mejilla. Charles solo pudo sonreír agradecido.
Luego conoció a los abuelos y los tíos de Carlos, saludó a su padre y a Caco, al que ya conocía; y le fue asignado un sitio a la mesa. Como buen invitado, obedeció y se sentó entre Carlos y uno de sus tíos. Después de conversar un rato, la comida estuvo lista y todos empezaron a servirse. Charles se estaba sintiendo muy acogido por la familia de Carlos, la cual hablaba de jugar luego un partido de fútbol. Su compañero llamó su atención mientras él dejaba el hueso de una costilla sobre el plato —el sexto, de hecho—.
—¿Cómo vas?
Charles levantó un pulgar en respuesta.
—Todavía me queda hueco para el postre —dijo Charles, haciéndole saber a Carlos que estaba cómodo. El español hizo una cara extraña.
—Ya bueno, si mi hermana no llega pronto, el postre se va a quedar para la cena.
—¿Tu hermana?
Y como si la hubieran invocado, una chica con los mismos ojos oscuros de Carlos y su piel tostada entró como un huracán en la terraza, atrayendo las miradas de todos.
—¡Perdón, perdón, perdón! —exclamó ella dejando su bolso a un lado y acercándose a abrazar a sus padres.
—No me habías dicho que tenías una hermana —le susurró Charles a Carlos mientras los demás recibían a la recién llegada. El español lo miró como si fuera estúpido.
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𝑭𝑨𝑺𝑻 𝑳𝑨𝑷𝑺 || 𝐅𝐨𝐫𝐦𝐮𝐥𝐚 𝟏 𝐒𝐡𝐨𝐫𝐭 𝐒𝐭𝐨𝐫𝐢𝐞𝐬
FanfictionFast Lap: historia relativamente corta en la que el mundo de la Formula 1 sirve como telón de fondo para los distintos romances de sus pilotos. Entenderéis lo de "relativamente corta" más adelante. Lo único que podemos prometeros es que os entret...