Capitulo 8: Libertad y promesas.

240 27 33
                                    

—Bueno…¿Has dormido bien?—dijo Taylor al ver mis ojeras y mis ojos rojos.

—Si.—mentí.

Después de la borrachera de ayer no me acuerdo de nada, se que llegamos a la azotea, Niall empezó a hacer preguntas y unos instantes después vomité…espera, ¿Estuve luego con Louis? Tengo como un recuerdo borroso, espero no haber dicho nada raro…

—¿Bebiste alcohol?

—¡¿Que?!—respondí nervioso.—Claro que no.

—Harry todo lo que me cuentes aquí nunca saldrá, ya sabes que estoy aquí para ayudarte.

Bueno en ese caso no pasaría nada si se lo contara, ¿no?

—Ayer…

—¿Sí?

—Me fui con los amigos de Louis a la azotea y jugamos a un juego con una botella que Niall consiguió y…

—Dejame adivinar, no te acuerdas de nada más.—dijo sonriendo.

—No…—susurré.

—Bueno, ¿qué tal lo pasaste ayer?

—Bien, muy bien.

—¿Louis habla más contigo entonces?

—Si.—dije poniendo una sonrisa tonta.

¿Por qué demonios estaba sonriendo? Ya llevo una semana entera pensando demasiado en…

"¿Él?"

Si, en Louis y no se porqué.

—Eso está muy bien Harry, muy bien.

La sesión terminó, la verdad que últimamente se me estaba pasando muy rápido el tiempo con Taylor, me gustaba hablar con ella, siempre me da consejos en vez de ordenes o cosas que tengo que hacer si o si. Aunque sabía que antes o después tenía que abrirme más a hablar sobre mi padre y todo lo que pasó, o mejor dicho, todo lo que recuerdo. Tenía miedo pero tenía que enfrentarme a ello. Cuanto antes mejor.

—Hasta mañana Harry.—dijo cerrando la puerta de la consulta con una sonrisa de lado a lado.

Después me fuí hacia la sala para que me dieran la medicación. Al final del pasillo Niall y Louis estaban hablando. Él parecía preocupado, nunca le había visto así.

—¿Estás seguro de que dijo eso anoche?—preguntó Louis.

—Si, ¿acaso ibas tan borracho como para no acordarte?

—Niall, esto es muy grave, debería hablar con él…

—Él te importa mucho, ¿verdad?

—Yo…él es mi amigo, si tu hubieras dicho eso también estaría muy preocupado. Él no es una excepción.

Niall le sonrió hasta que me acerqué a ellos.

—Hola.—saludé.

Los dos se callaron al instante. Creo que estaban hablando de mi y no era la primera vez que pasaba.

—Bueno, yo me voy que tengo cosas que hacer.

Louis suspiró mientras Niall salía por la puerta

—¿Podemos hablar?—preguntó Louis nervioso.

Él llevaba un gorro azul, destaba mucho con sus ojos. Esos ojos celestes eran tan profundos, no podía dejar de mirarlos, era como si me hipnotizara con la mirada. El tiempo se detenía cuando le miraba o simplemente cuando estaba con él. Louis era un amigo… especial, nunca me había sentido así con nadie antes.

182 díasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora