Cap. 2

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Al asomarse por la ventana de su cuarto que daba al exterior, se percató que el dueño de esos agresivos golpes que atentaban con tirar su puerta principal abajo, era ni más ni menos que su tan apreciado amigo Katsuki, al verlo, se apresuró y bajó corriendo las escaleras llevándose por delante algunos muebles, más que por emoción, por no colmar su paciencia y empezar el día con un grito del cenizo.

Al abrir la puerta aún sorprendido se encontró con su amigo de cara y trató de preguntar a qué se debía su presencia sin agobiar demasiado al contrario.

- Kacchan, ¿qué haces aquí ? - Dijo izuku aún asimilando la presencia del otro tan temprano en su casa.

- Deku, idiota, nuestros padres están de negocios, por lo que la vieja bruja me obligó a hacer de niñera - Dijo katsuki con irritación.

Las madres de Izuku y Katsuki eran amigas de secundaria y permanecieron muy unidas desde entonces, ya que, decidieron emprender juntas y formar una empresa tecnológica que se volvió muy importante en el país y que debido a ello constantemente estaban viajando de un lugar a otro, eso explica porqué Izuku y Katsuki tienen una relación tan cercana, se conocen desde literalmente la cuna, de ahí esos motes, el de Izuku era un apodo cariñoso hacia el cenizo debido a lo mucho que lo apreciaba, por otro lado, Katsuki solo pretendía ofender al pecoso con su mote, cosa que no consiguió porque Izuku ya era feliz con tan solo saber que su amigo le había puesto un apodo, un mote que lo distinguía del resto de sus compañeros, al final el cenizo se terminó acostumbrando y ya llamaba así al contrario casi involuntariamente.

- Es verdad - respondió Izuku un tanto apenado porque su amigo estaba allí por obligación.

A veces, deseaba que todo volviera a ser como cuando iban a primaria, Katsuki y él se la pasaban jugando todo el día, iban a la casa del otro (por voluntad propia) e incluso hacían fiestas de pijamas, pero, de un momento para otro, todo cambió, ese día, ese día que tanto odia, el día que por un motivo desconocido su amigo lo alejó y se volvió distante, grosero y no quería verse involucrado con él...-

Un sonido fuerte perecido al de una alarma lo despertó de su transe, pero, su sonrisa se borró de la cara al darse cuenta que era una alarma sísmica, rápidamente, ambos entraron a la casa y encendieron el televisor, un comunicado de emergencia se estaba retransmitiendo y los adolescentes escucharon con atención.

- Japón está cayendo, ciudadanos japoneses, un trágico accidente se ha producido en un aeropuerto, aún se desconoce la causa, pero, se cree que un virus se está propagando, los infectados se vuelven agresivos y actúan de manera salvaje; desgarran, aruñan, muerden... A los ciudadanos no infectados se les están rescatando para transportarles a un refugio seguro, por favor mantengan la calma y no salgan de sus casas. Fin de la transmisión. -

-Esto es una puta locura, ¿¡en serio piensan que me tragaré una mierda como esta!? - dijo Bakugo irritado por haberles hecho perder su preciado tiempo.

- kacchan, es una retransmisión de alerta, no creo que sea una simple broma - Dijo Izuku todavía saliendo del shock.

- Mierda deku, ¿Enserio te crees esta asquerosa broma? Si que eres un inútil, mira pequeña mierda, saldré y te mostraré que todo es mentira - Dijo bakugo con una expresión molesta aunque un tanto orgullosa.

- Kacchan, no lo hagas, no es seguro - Izuku se incorporó de un brinco y se dirigió a la cocina con la intención de buscar algo afilado.

Conocía a su amigo y sabía que no le escucharía por lo que tomó el cuchillo más cercano y le siguió.

Katsuki salió a la entrada y un fuerte olor inundó sus fosas nasales, las calles estaban llenas de gente herida atacándose mutuamente y otros que parecían estar muertos, al parecer no era el único idiota que había salido a demostrar que todo era una simple broma, pero, un fuerte agarre le indicó que era bastante real.

Permanece a mi ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora