Solo te tengo a ti

Capitulo 06.

Nos quedamos todos mirándonos, todos en silencio después de que Iván me reconozca. Miro a mi madre y la veo con los ojos llenos de lagrimas, me da pena porque ha escuchado todo lo que le he contado a Cristian y ahora mismo ni ella sabe que decir cuando siempre tiene algo. En ese momento el padre de Iván da un paso adelante y me mira con mala cara.
- Sabia que tu siempre nos traerías problemas y después de tantos años aun nos los traes.- me mira fijamente.- pienso quitarte a mi nieto como abogado que soy esto no se va a quedar así.
En ese momento si que reaccionó y lo veo todo rojo. No pienso dejar que me quiten a mi hijo y menos aún cuando no es culpa mía que no lo supiera.
- Mira lo primero de todo es que yo nunca os he dado problemas. Y lo segundo es que no vas a quitarme a mi hijo ni en tus sueños.- le dijo furiosamente.- yo le dije a su hijo que estaba embarazada y él me dijo que no quería saber nada de él. Así que no me mire a mí y mire al culpable que se lo escondió. Mire al hombre que no ha querido saber nada de su propio hijo en dos años y medio que tiene ya.
En ese momento si que se quedó callado ya no sabía a quién echara culpa y tenía muy claro que a mi hijo no me lo iba a quitar. Lo he criado yo, he sido yo la que se ha quedado millones de noches en vela porque el lloraba por los dientes, por la varicela por todo.
- Papa déjalo.- dijo en ese momento Iván y se acercó a él.- Jessica tiene toda la razón del mundo, en ese momento de enfado yo le dije que no quería saber nada de él si era verdad. Y resultó que el tonto de todo esto fui yo, me he perdido dos años de ver crecer a mi hijo y ahora no podemos culparla a ella.
- ¿Por qué no me lo contaste hijo?- dijo su padre tranquilamente.
- No lo sé papa, estaba cabreado con el mundo, ¡joder! me estaba divorciando.- empieza a pellizcarse el puente de la nariz, eso solo lo hace cuando esta triste, cuando no sabe qué hacer ni que decir.
- Vale, vamos a tranquilizarnos todos y vamos a bajar al comedor para que nos expliquéis todo esto bien.- dice mi madre ya más tranquila.
En ese momento llegan los niños corriendo y chillando. Todos nos quedamos mirando a Kirian que no para de reír. Y como no yo me pongo a sonreír como una tonta por verlo tan contento. No sé qué va a pasar después de todo esto, no sé si vamos a contarle a mi pequeño que tiene un padre ni como se lo va tomar el. Seguramente se lo tome bien, es un niño y los niños lo único que quieren es amor y muchos mimos. Kirian se acerca a mí corriendo y se lanza a mis brazos. Lo abrazo fuerte y le doy un beso en la nariz, él la arruga como siempre y me sonríe.
- ¿Que pasa mi vida?- le pregunto.
- Pues veras es que el primo y yo queremos que nos pongáis Inazuma.- me sonríe más ampliamente y no puedo evitar soltar una carcajada.
- Mira que sois tremendos enanos.- suelto a mi hijo y los miro.- ¡venga! Tenéis que correr porque si os pillo no os lo pongo.
En ese momento echan los dos a correr y yo voy detrás de ellos más lentamente para no pillarlos, veo como Iván sonríe al pasar por su lado y sigo corriendo para no pararme a pensar que significa eso. Además si los pequeños están entretenidos nosotros podemos hablar más tranquilamente. Llegamos al comedor y los dos se tiran al sofá diciendo que han ganado y que tengo que ponerles la serie. Acabo de ponérselo y me fijo que están todos sentados alrededor de la mesa y como no me tienen que dejar a mí al lado de Iván, yo creo que esto es un chiste y quieren reírse de nosotros. Pero no me queda otra y me acabo sentando todos nos miran fijamente esperando respuestas.
- Haber decirme ¿qué queréis saber?- preguntó tranquilamente mirándolos a todos.
- ¿Cuantos años estuvisteis casados?- pregunta mi padre, que al parecer es el que menos se ha enterado de la historia.
- Papa estuvimos casados 3 años y 1 de noviazgo.- le contesto tranquilamente mirándole a los ojos.
- Y por lo que he escuchado fue cuando te enfadaste con nosotros a los 21 y desapareciste 4 años ¿no?- pregunta Raúl.
- Si Raúl, fue en esos años cuando yo lo conocí y nos casamos y todo eso.- le sonrió.
- ¿Por qué os divorciasteis?- mi madre como no directa al grano. Y como no veo yo a Iván con muchas ganas de contestar a las preguntas sigo contestándolas yo.
- Haber como explico esto...- empiezo a pensar en cómo explicarlo.
- Nos divorciamos porque su hija empezó a trabajar con las policía.- contesta Iván.- para mí no era un problema que ella lo fuera. Bueno si pero no, me molestaba porque al ser médico estoy acostumbrado a ver heridas horribles que les pasan a los policías y no quería eso para ella, mil veces le dije que si era por dinero que no quería que trabajara pero ella decía que por eso no era, que ella lo hacía porque le gustaba. Hasta que llego el día que se quedo embarazada. La primera vez que se quedo embarazada, ella tenía mucho trabajo y no paraba quieta, yo la veía cansada siempre y muy blanca y le dije que se pidiera ya la baja por maternidad, pero ella como no decía que no, que acababa de empezar y no podía pedirla ya. Entonces llego el día en que tuvo un operativo en el que todo salió mal y ella recibió un fuerte golpe que le hizo abortar.- me miro con cara triste como si recordar eso le doliera, pero puedo asegurar que mas me dolía a mi.- y ahí es cuando todo empezó ya a fallar. No nos comunicábamos, vivíamos en la misma casa pero ni nos hablábamos ni nos tocábamos ni hacíamos nada.
- Y en ese momento fue cuando él empezó a serme infiel.- acabo yo. El me mira fijamente como pidiéndome perdón con la mirada, pero la verdad es que me parece a mí que es un poco tarde para pedir perdón.
- Exactamente.- empieza a mirarse las manos y vuelve a levantar la cabeza.- Ahí fue cuando lo eche todo a perder. Me arrepentiré siempre del daño que hice, ella me dio mil oportunidades, mil veces me dijo que dejara de hacer lo que estaba haciendo y yo no le hacía ni caso. Al ser un personaje famoso cada día salía en las noticias con una distinta y ella lo veía y a mí no me importaba el daño que le hacía, quería que sufriera como yo sufrí cuando ella aborto. Ella no pudo aguantar más con eso y yo tampoco y entonces fui yo el imbécil que le pidió el divorcio. Ella me decía que no que podíamos arreglarlo pero yo ya no quería arreglar nada solo quería ir de flor en flor como estaba haciendo. Y cuando firmamos los papeles fue cuando me dijo que estaba embarazada, sabía que era mío que ella no había hecho nada con nadie pero no me lo creía. Os preguntareis como, bueno como no en un ataque de rabia cuando le pedí el divorcio paso lo que tuvo que pasar ninguno puso un remedio y paso. Y bueno esa es nuestra historia.
Todos se nos quedaron mirando con la boca abierta, todos hacían la misma "O" con la boca.

*************************************
Foto multimedia: Padre Ivan (Tomás)
¡Besitos mis chi@s! ^^