Daniel y yo nos tiramos toda la noche en la comisaría, lo hicimos con cuidado y sin que nadie pudiese vernos, no quiero que tenga problemas con la familia, porque directamente no quiero que se enteren de todo lo que está pasando con Daniel. Nos está ayudando con todo lo que puede y con todo lo que sabe, he conseguido con el inspector hacer como un trueque, ya que Daniel no tenía nada que ver allí he conseguido que no le caigan cargos si él nos ayuda con todo. Ivan me ha llamado unas cuantas veces a lo largo de la noche pero no tengo ni tiempo para cogérselo, me encantaría decirle donde estoy pero entre que eso, y entre que también tengo al jefe pegado al culo toda la noche, no puedo, así que... Sé que estará asustado, le he dicho que solo iba a salir un rato y al final ese rato se ha hecho bastante tarde.
- Jessica, podéis ya marcharos a casa si queréis. –me dice mi jefe- Estamos enviando a agentes para que vigilen a la ex mujer de Daniel, por si acaso, no quiero que les pase nada, también he enviado a gente para que vigile la casa de tus padres y también a la tuya.
- De mi casa puedo ocuparme yo. –le dijo mirándolo.
- Sé que puedes ocuparte tu, pero entonces la que no va a descansar nunca serás tú.
- Tienes razón. –me quedo un rato pensando- Pero hay también otra cosa.
- Dime.
- Cuando acabemos con este caso me voy.
- Espera, ¿Cómo?
- Dejo este trabajo, tengo un hijo al que quiero ver crecer, y estoy empezando una relación que ya acabo una vez en su tiempo por querer ser policía, no quiero que vuelva a pasar.
- ¿Me lo estás diciendo enserio Jessica?
- Si comisario, sabes que he ejercido perfectamente mi trabajo, y pienso que ya es hora de que piense en mi hijo, quiero poder verlo crecer, y desde hace un tiempo sabes que los casos se han vuelto un poco más peligrosos.
- Sé que es cierto y por eso mismo no quiero que te vayas, eres una de las mejores agentes que tengo y la verdad que sustituirte va a ser muy difícil...
- Lo siento comisario, pero ya le dije en su día que para mí este trabajo no iba a ser eterno.- le dije dándole un sonrisa a medias, se que ahora mismo no es el mejor momento para irme, pero en el fondo tengo razón, en sus días cuando entre en la comisaria se lo dije que eterno esto no iba a ser, y mi hijo va por encima de todo, además no quiero que las cosas vuelvan a salir mal Ivan.
- De acuerdo Jessica, cuando acabe este caso hablaremos mejor las cosas, ahora lo mejor es que te vayas a descansar, aun que Daniel lo mejor que él se quede aquí con nosotros estará más vigilado.- asentí con la cabeza y me despedí con un movimiento de mano.
Necesitaba llegar ya a mi casa, estoy lo bastante cansada y además de seguro que Ivan estará preocupado por mí, tendría que haberlo llamado conforme salí de la comisaria, pero la verdad es que lo único que quería era llegar rápidamente a mi casa, antes solo quería ir corriendo a casa porque tenía a mi bebe allí que sabía que se pondría contento al verme, pero ahora sé que ya no solo me espera él en casa, sino también un hombre que después de tanto tiempo aun sigo amando y aun sigue el amándome. Jamás pensé que volvería a sentirme así otra vez, tan llena, tan feliz, antes solo necesitaba a mi bebe, a mi familia y a la comisaría, eso era lo único que conseguía llenarme, ¿Pero ahora? Me vuelvo a sentir como aquella chica que en su momento se enamoro de un hombre, ese sentimiento ha vuelto a mí. Jamás pensé que tendría otra oportunidad con él, y esta vez lo único que quiero es hacerlo todo bien, ahora el también sabe toda la verdad de mi, por mi parte ya no hay mentiras y quiero pensar que por la suya tampoco. Cuando por fin llego a la verga de mi casa me invade un sentimiento de felicidad impresionante, así que entro lo más rápido posible aparcando el coche en el garaje, casi no me da tiempo a salir del coche cuando veo a un preocupado Ivan venir hacía mi abrazándome fuertemente.
- Dios mi vida, no sabes lo preocupado que estaba, me dijiste que no tardarías mucho y mira las horas que son.- me dice mirándome de cerca. Veo como en su frente se forman unas arrugas a causa de la preocupación.
- Lo siento cariño, la verdad es que las cosas se han liado mucho en la comisaria... -no me deja ni acabar la frase porque me tapa la boca con la mano.
- Un segundo Jess.-me dice mirándome fijamente- Me estás diciendo que ¿llevas todo el día en la comisaria cuando los médicos dijeron que tenias que estar en casa reposando?
- Ups...-le miro fijamente a la cara, me da a mí que ahora sí que está totalmente enfadado, y en verdad con razón, bueno con razón tampoco porque lo único que he hecho ha sido proteger a su hermano a toda costa, que ahora pensando en eso me parece a mí que se lo tengo que contar...- Cariño tenemos que hablar de una cosa bastante importante que ha pasado hoy.
- Empieza.-me dice mirándome fijamente con una cara un poco más preocupada de lo que ya estaba, no quiero hacerle daño con lo que le voy a contar pero prefiero que se entere hoy por mí que mañana por cualquiera de mis compañeros.
- Ven vamos a la habitación y te lo cuento todo mejor.-lo llevo hasta allí y le obligo a sentarse en la cama mientras yo me quedo de pie enfrente de él contándole todo lo que ha ocurrido, hay momentos en los que está sorprendido, pero en casi todo momento está enfadado, se que lo que le estoy contando no es un plato de buen gusto, pero él necesita saberlo, aunque hay momento en los que me he arrepentido, sobre todo cuando se ha levantado de la cama corriendo hacia la puerta diciendo que se iba hacía la comisaria porque el mismo se iba a encargar de matar a su hermano.- Escúchame mi vida, cálmate por favor, Kirian está durmiendo y no quiero que se levante y te vea así.
- Tienes razón, tienes razón, pero mañana nadie me libra de matarlo como que mi nombre es Ivan.-dice sentándose en la cama apoyando los codos en las rodillas y dejando caer su cabeza encima de las manos. Se lo veía derrotado, sé que esto es muy duro para él, y verlo así me está destrozando a mi por dentro. Me acerco quitándole las manos de ahí y sentándome encima suya a horcajadas, le levanto la cabeza haciendo que me mire directamente a los ojos.
- Mi vida se que ahora es demasiado difícil de entender, pero dame tiempo, te prometo que nada de esto se sabrá, haré todo lo imposible, además...-le digo sonriendo- No te he contado lo bueno que me ha pasado.
- ¿Pero es posible que haya algo bueno Jessica?-dice agachando la cabeza de nuevo, pero yo se la vuelvo a levantar y acerco mi boca a la suya hasta solamente rozarnos los labios y le hablo en un susurro.
- He hablado con el comisario, conforme acabe este operativo me retiro, aremos la vida que siempre hemos querido, podremos estar con nuestro hijo los dos juntos sin tener que preocuparte cada vez que salga de casa porque me tengo que ir a un operativo o cosas así, conforme tu hermano este libre y bien será nuestro momento.-y en ese momento no hace falta ni que le bese yo porque el mismo lo hace, ataca mi boca con fuerza metiendo la lengua hasta casi la campanilla, y cuando no me doy cuenta noto como ya me tiene tumbada encima de la cama con el encima de mí quitándome la camisa...
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Hola queridos lectoras y lectores, se que hace tiempo que no he subido, y lo siento por ello, pero entre el trabajo y motivos personales la verdad es que no he tenido tiempo ya que era levantarme trabajar y cuando volvía directamente a la cama, y diréis bueno ¿y los fines de semana que? Bueno pues la verdad es que esos días estaba taaaaaaaaaaaaaan cansada que me levantaba a las tantas y luego solo quería estar con mis amigos y pasármelo bien ya que no los veía durante toda la semana, además también han pasado las navidades y todo eso y la verdad es que en mi familia son muy tradicionales y siempre estaba para arriba y para abajo porque cada uno vive en un punta. Intentare subir más de seguido, pero tampoco puedo prometer nada porque no se el tiempo que voy a tener.
Bueno y muuuuuchas gracias quería daros también a los que leen mi historia y son tan pacientes.
Con muuuuucho amor y muchos besos..
J.
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Solo te tengo a ti
RomanceEl mundo de una policía que encontró el amor cuando menos se lo esperaba, pero siempre ocurren cosas que llegan a hacer que nada pueda salir como desean. Después de tres años sin estar juntos, un día el destino los vuelve a unir aunque uno de ellos...