Humanidad

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Dudo que alguien me trate en serio o que por un momento valore un suspiro de mi existencia, si soy otro más del montón que entre tanta multitud no se nota ni en su apariencia. Han jugado conmigo demasiado en el amor y en una ocasión que creía que sería mejor, se fue por una distancia,ahora a los kilómetros le guardo rencor. Abrí los ojos ante un mundo ilógico y lleno de inmundicia en las calles, habita dentro de las personas la avaricia y yo tan conformista deseando un mundo con más amor y menos política. Creo que el alma de mis padres cayeron en el planeta equivocado o tal vez fueron enviados por un castigo de sus pasados, el hecho es que nací en el lugar equivocado. No estoy loco ni sufro ninguna enfermedad mental pero de este mundo no creo ser, aquí no lloran y ven normal la desnutrición infantil y el abuso del poder, aquí ven sencillo odiar y cuestionable llegar a amar y aunque lo entiendo porque he amado a los seres de este planeta y me ha salido más doloroso que el odio y sus cadenas. ¿Será que aquí amar es la destrucción y odiar y las guerras es la salvación? Idolatran a un Dios y no adoran a su espíritu interior, es complicado que la realidad sea creíble sólo cuando la dice la televisión y es complicado, que la voz de un pueblo opacado sean diretes de un grupo de inadaptados sociales en busca de una revelación. He visto mucho en poco tiempo y ya no pertenezco a este hueco, estaba en el océano flotando y cerré mis ojos y respiré profundo y sentí esa luz que viene del fondo y la marea me arrastró a la orilla y me levanté mareado buscando un poco de sombra con la lucidez de lo que no he conseguido todavía. Tengo demasiados pensamientos que no cupieran en treinta libros y detesto cuando pasa esto que mis escritos no son los requeridos para una editora esclava de un sistema social que nos ha vendido que la voz de la verdad es delito. Unos halagos por mi persona no he recibido pero he visto cómo han dado halagos a aquel que ha discriminado en una canción a una persona por no tener la plata para que la sociedad te defina como alguien rico. Carajo yo soy un maldito digo las cosas como son no me importa si eres presidente o el mismo jesuscristo, me niego a seguir las leyes de los reyes que nos manipulan como bueyes para hacer lo que nos imponen y no acepto un arcoíris de dos colores cuando un paisaje tiene millones. Soy y seré otro más que ande en la calle sin nada de saldo para llamar a su mamá y otro más que verá a la humanidad igual, los días pasan y los años pasarán y lo único que cambiará será las arrugas de mis manos y las huellas de estas líneas serán borradas por el desconocimiento de algunos bastardos que anhelan ser como el tipo que mató a cincuenta chamos que ahora llaman capo. Preferirán consumir drogas antes que coger un libro en la mano y la sociedad civilizada es y será siempre una utopía porque vivimos en una sábana donde no hay ni manadas para cuidarse de la noche fría.

Gritos de los 17 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora