𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟐.
Al día siguiente, Nix y Claire se dirigieron al instituto juntas, compartiendo risas y chismes en el camino. Claire notó que Nix parecía inquieta, y cuando finalmente tuvieron un momento a solas, Nix le contó sobre la perturbadora sensación en el callejón la noche anterior.
—Fue extraño, Claire. Sentía que alguien me observaba, pero no vi a nadie. Tal vez solo sean nervios, pero no puedo quitármelo de la cabeza.
Claire asintió, preocupada por su amiga.
—Quizás deberíamos ser más cautelosas en el futuro, Nix. Mantente alerta y asegúrate de no caminar sola por la noche.
Después de clases, Nix y Claire se dirigieron a trabajar en la cafetería como de costumbre. La cafetería estaba llena de clientes que buscaban su dosis de cafeína y una pausa en sus agitadas vidas. Nix se esforzó por mantener una sonrisa amigable mientras tomaba pedidos y preparaba deliciosas bebidas.
Sin embargo, la sensación de ser observada la acompañaba como una sombra inquieta. Cada cliente que entraba y salía de la cafetería parecía ser un potencial sospechoso. Cada conversación que escuchaba, cada risa que resonaba en las paredes, solo alimentaban su inquietud. Cada sombra en el local parecía esconder un secreto, y cada mirada que cruzaba con desconocidos la ponía aún más en guardia.
Y entonces, entró él. Un hombre de cabello castaño y ojos verdes, traía una bufanda bastante peculiar y destacaba entre la multitud de clientes. Parecía ser un cliente común, pero algo en su mirada y su presencia la hizo sentir incómoda. Nix había aprendido a confiar en sus instintos, y en ese momento, sus alarmas internas sonaban.
Claire notó la tensión en el rostro de Nix mientras atendía al hombre y se le acercó en un momento de pausa.
—¿Estás bien, Nix? ¿Qué pasa con ese tipo?
Nix le susurró en voz baja para que el hombre no pudiera escuchar.
—No sé, Claire, algo en él me hace sentir incómoda. Parece un cliente normal, pero no sé por qué no confío en él.
Claire frunció el ceño, preocupada por su amiga.
—No te preocupes demasiado, Nix. Tal vez solo es tu imaginación. Pero mantente alerta, solo por si acaso.
A medida que avanzaba la tarde, Nix continuó sirviendo a los clientes, manteniendo una distancia respetuosa del hombre de cabello castaño y ojos verdes. Aunque él parecía comportarse como cualquier otro cliente, Nix no podía quitarse la sensación de que algo estaba fuera de lugar.
Finalmente, cuando la tarde se desvaneció en una noche lluviosa, Nix y Claire cerraron el local y se prepararon para regresar a casa. La oscuridad y la lluvia intensificaron la sensación de inquietud de Nix mientras caminaban por el callejón.
Ella no podía evitar pensar en el hombre de cabello castaño y ojos verdes. ¿Quién era él realmente? ¿Por qué había sentido esa inquietante sensación en su presencia? Mientras avanzaban por el callejón oscuro, las dudas y preocupaciones la atormentaban, y la lluvia parecía llevar consigo un misterio aún más profundo y oscuro que la rodeaba.
De repente, cuando Nix y Claire estaban a mitad de camino en aquella noche lúgubre, una ráfaga de viento helado hizo que Nix sintiera un escalofrío recorrer su espalda, como si las manos frías de la muerte la acariciaran. Inmediatamente, su instinto la llevó a voltear la cabeza, y en medio de la penumbra, sus ojos se encontraron con los de un hombre que permanecía parado en las sombras, observándola con una intensidad inquietante. La oscuridad velaba su rostro, pero la mirada de aquel desconocido logró enviar escalofríos por su espina dorsal, congelándola en su lugar como un insecto atrapado en la telaraña de un depredador acechante.
Claire notó la reacción de su amiga y se detuvo a su lado, preocupada por la transformación repentina en la actitud de Nix.
—¿Estás bien, Nix? ¿Qué pasa?
Nix, sin apartar la mirada del enigmático hombre en la sombra, respondió con voz temblorosa:
—Claire, ¿ves a ese hombre allí? Estaba en el callejón anoche, y siento que nos sigue.
Claire frunció el ceño y miró en la dirección que señalaba Nix, pero el hombre ya no estaba allí. La lluvia caía con más fuerza, ocultando cualquier rastro de aquel extraño en la penumbra de la noche.
—No veo a nadie, Nix. Debe ser tu imaginación jugándote otra mala pasada.
A pesar de las palabras tranquilizadoras de Claire, Nix tragó saliva, sintiendo que algo no estaba del todo bien. Aun así, decidió seguir caminando junto a su amiga, esperando que la inquietante sensación de ser observada se desvaneciera gradualmente. Sin embargo, la incertidumbre persistió en el corazón de Nix mientras se alejaban de aquel callejón oscuro y enigmático.
Lo que Nix no sabía en ese momento era que aquel hombre, oculto en las sombras, había encontrado un interés inquietante en ella. Sus ojos la seguían con determinación, y la oscuridad de la noche ocultaba sus intenciones y secretos más oscuros. Un nuevo capítulo de misterio y peligro se estaba tejiendo en la vida de Nix, y ella estaba a punto de descubrir que las sombras escondían mucho más de lo que jamás habría imaginado.
Y entonces, la voz del hombre extraño resonó en su cabeza, como un susurro gélido que le heló la sangre.
—Nix, deberías alejarte de Liu. Ahora formas parte de mi juego, y jamás te dejaré ir.
Aquellas palabras resonaron en lo más profundo de su mente, como una advertencia siniestra que anunciaba un destino incierto. Nix no podía comprender quién era aquel hombre ni cómo sabía sobre su relación con Liu, pero el tono de su voz era inconfundible: estaba atrapada en una trama oscura y peligrosa de la que no podía escapar. El juego macabro había comenzado, y Nix estaba en el centro de una pesadilla que amenazaba con consumirla por completo.
𝗜𝗡𝗙𝗜𝗟𝗧𝗥𝗔𝗗𝗢 𝗘𝗡 𝗟𝗔𝗦 𝗦𝗢𝗠𝗕𝗥𝗔𝗦
╰───────────✧──────────────╮
ESTÁS LEYENDO
Infiltrado en las sombras ➝ Jeff The Killer [Creepypastas]
De TodoSumérgete en un mundo oscuro donde Jeff The Killer es el protagonista. Acompaña a este astuto asesino cuya obsesión por una misteriosa joven lo lleva a tejer una trama de intrigas y secretos. En esta cautivadora historia de pasión y peligro, descub...