𝖠𝗆𝖻𝗋𝗈𝗌𝗂𝖺 𝗏𝗈𝗅²「𝒕𝒐𝒎 𝒌𝒂𝒖𝒍𝒊𝒕𝒛 」

⁰³

Dilara

Se suponía que vendría para ayudar a mamá con su recuperación, pero en vez de eso estoy en mi antigua habitación dibujando.

No podía dejar de sentir nostalgia al ver que todo seguía igual a cuando me fui, incluso mi área de dibujo seguía justo abajo de la ventana.

No sabía exactamente lo que estaba dibujando solo que eran líneas al azar, lavaba casi media hora sentada allí en el suelo con mis manos llenas de grafito por el lápiz.

-Aún recuerdo cuando tenías 7 años y llegaste emocionada de la escuela para mostrarme tu dibujo, cuando lo vi supe que tenías talento.- dejo todo de lado para ver a mamá sentarse en mi cama.

-¿Cómo te sientes?-

-Eso debería de yo preguntártelo a ti.- con su mano palmea el lugar a su lado, sin protestas me siento con ella.

-Estoy bien, si a eso te refieres a estar lejos de mi hijo, hermana y novio.-

-Lo lamento.- la miro y veo sus ojos llorosos.

-No fue tu culpa, solo no me sentía lista para volver.- me recuesto con mi cabeza en sus piernas.

-Te voy a preguntar algo y quiero que me respondas con la verdad.- me pongo en posición de que pueda verle la cara. -¿Aún sientes algo por el?-

No sabía he responder a eso, al principio me odiaba por creer que fui solo una tonta chica enamorada, pero con el tiempo mi corazón se fue endureciendo respecto a ese tema, y ahora el volver a verlo hizo que mi corazón volviera a latir rápidamente. Pero no sabía si era por la emoción de verlo o algo más.

-No sé mamá, todo es tan complicado...-

-Aún eres joven, y me dijiste que las cosas con Alex van bien.-

-Él es muy lindo tanto conmigo como con Murad. Pero no se siente igual.-

Levanto la cabeza de sus piernas par ahora apoyarla en su hombro, mis ojos se llenan de lágrimas al sentirme mal por no saber lo que realmente siento por una persona que ah echo tanto por mí.

-Tal vez en el fondo aún amas a Tom.-

-¿Tu me odias mami?- mi voz sale tan bajita y rota, me daba miedo su respuesta.

-¿Por qué odiaría a mi niña?-

-Por lo que hice con Tom cuando era adolescente.-

-Eras una adolescente tu misma lo dijiste, todos nos enamorados a esa edad y no fue tu culpa enamorarte del.-

-¿Y papá?-

-Tu padre nunca podría odiarte, él te ama a pesar de todo.-

-Te amo.- le digo cuando me separó de ella viéndola a la cara.

-Yo también, pero te amaría más si me horneas algo.-

-¿Qué tal unos brownies?- ella asiente como niña pequeña.

Le doy un beso en su cabeza antes de irme de la habitación, mientras bajaba la escalera iba viendo mi teléfono si es que recibía algún mensaje de Leni o Alex, pero nada.

Al llegar al final de las escaleras escucho risas y voces, mis nervios aumentan cada vez que me acerco más a la sala. Al llegar veo a papá y los chicos sentados con cervezas en sus manos riendo y conversando entre ellos.

-¿Papá?- los cuatro voltean a verme.

Siento la mirada de todos en mí, pero la que más efecto tiene es la de Tom. Solo lo ignoro y me concentro en papá quien se acerca hasta quedar frente a mí.