Dilara
-¿Puedes hacer silencio?-
-No, no puedo.-
El llanto de Murad se hizo presente, me acerco y lo tomo en mis brazos ara tratar de volver a dormirlo.
Alex solo se va dando un portazo lo que provoca que el niño en mis brazos llore más que antes.
Había estado discutiendo con Alex por la fiesta de hace dos días, el sospechaba que algo pasó entre Tom y yo.
Y aunque si tenía que sospechar, porque si paso. Nunca lo admitiría en voz alta.
Solo quería volver a Italia lo antes posible y no volver a ver a Tom, no quería que mi corazón siguiera latiendo rápidamente cada vez que lo veía.
Finalmente logro que mi hijo se quede dormido y lo vuelvo a acostar en la cama, en silencio me dirijo a donde siempre dejo mis pinturas y me siento en el suelo bajo la ventana con mi cuaderno de dibujo.
Mi mano temblaba cada vez que intentaba hacer una línea en aquella hoja, de pronto gotas empiezan a caer en la misma hoja y es en ese momento cuando me doy cuenta de que mi límite de tolerancia ya había pasado.
Dejo el cuaderno en el suelo y llevo mis rodillas a mi pecho abrazándome a estas.
La última vez que lloré de esta manera fue cuando me enteré de que Tom había vuelto con Heidi, el recordar aquello me hizo llorar aún más fuerte.
La puerta de mi habitación se abre y rápidamente me limpio las lágrimas, no quería que quien fuera me viera llorar. Aunque sería muy difícil el ocultar mis ojos rojos e hinchados.
-Di...-
Papá no dice nada más y se sienta a mi lado atrayéndome a él para un abrazo, extrañaba este tipo de abrazos por parte de él.
-¿Por qué todo tiene que ser tan difícil?-
-¿Tu y Alex discutieron cierto?-
-¿Por qué todo tiene que ser tan difícil?- vuelvo a preguntar en voz baja, sentía que si hablaba fuerte mi voz saldría entrecortada.
-Es parte de ser adultos.-
-¿Y si nunca quise ser una?-
-En algún momento tenías que crecer y ser adulta.-
-Yo... yo no sé, si puedo seguir con esto.-
-¿A qué te refieres?-
-Tomare a Murad y nos iremos en el primer vuelo con destino a Italia, ya no soporto estar aquí.-
-Di...-
-No soporto verlo y tener que reprimir mis sentimientos, no puedo soportar saber que ellos están juntos de nuevo, no puedo soportar saber que por mis sentimientos estoy destruyendo los de otra persona, no puedo papá...-
-Se que es difícil, pero tienes que enfrentarlo.-
-¿Y si no quiero enfrentarlo?, ¿Y si quiero ser una cobarde?-
-Tú no eres una cobarde, cariño.-
-Si lo soy, porque hui, necesitaba de él y en lugar de ir y hablar las cosas, hui, no le dije dónde. Cada vez que lo veo mi corazón late de forma rápida y siempre trato de huir de él, hui hace días cuando él y yo tuvimos un encuentro. Soy una cobarde.-
Me separó de el para decirle todo eso mirándolo a los ojos, yo tenía razón. Sabía que Tom había sido un cobarde, pero sabía que yo lo había sido también, hui sin darle cara, sin obtener respuestas.
-Solo estabas asustada.-
-Nada debió de ser así.-
-¿Te arrepientes de tu hijo?-
-Nunca, es solo que... no sé qué hacer, solo quiero sacarlo de mi cabeza eh irme es lo mejor. Cuando estuve en Italia nunca pensé en él y así estaba bien.-
Papá no tiene oportunidad de responder porque justo Leni entra a la habitación con su mirada fija en mí. De seguro me veo graciosa en el suelo con el maquillaje todo corrido.
-¿Di?-
-Cuida de Murad, tengo unas cosas que hacer.-
No digo más y me levanto para ir al baño y lavarme la cara, al salir los dos se me quedan viendo, pero no me dicen nada.
Al llegar a la sala veo a Alex sentado en el sofá con su teléfono, se estaba riendo de lo que sea que esté viendo.
...
No sabía si había hecho bien al decirle que viniera, realmente me sentía nerviosa.
No sabía cómo reaccionar al verle enfrente de mí, sabía que tenía que decirle muchas cosas, que tenemos que aclarar muchas cosas.
Cada vez me ponía más nerviosa, no podía dejar de jugar con mis dedos, indicando que mis nervios estaban llegando casi al límite.
Cada vez que la puerta de la cafetería sonaba volteaba a ver si había llegado y nada, no es hasta que ahora la vuelvo a escuchar y al voltear veo como entra con una mirada de superioridad ante todas las personas del lugar.
Intento no poner los ojos en blanco e irme del lugar, sabía que si algo que no me gustará escuchar salía de su boca le daría un golpe en la cara y me iría dignamente.
Pero necesitaba hacer esto, necesitaba cerrar este capito de mi vida antes de volver a Italia. Necesitaba estar en paz con la persona que estaba ahora mismo frente a mi.
-Me sorprendió que me llamarás.-
-No quiero que creas que es porque quiero que seamos amigas. Muy bien sabes porque te llame.-
-Tom...-
Asiento, antes de que hablara la mesera llega a pedir nuestra orden. Cada vez que Heidi tenía oportunidad se me quedaba viendo como si fuera alguien superior a mí.
Solo quería acabar con esto lo antes posible, tomar a mi hijo e irme lo antes posible.
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𝖠𝗆𝖻𝗋𝗈𝗌𝗂𝖺 𝗏𝗈𝗅²「𝒕𝒐𝒎 𝒌𝒂𝒖𝒍𝒊𝒕𝒛 」
Fanfiction𝐴𝑉² ٭ │𝒂𝒎𝒃𝒓𝒐𝒔𝒊́𝒂 𝒗𝒐𝒍² ❝¿A qué me aferro tanto... a tus ojos que no me miran, o a tu corazón que no es mío? -Yo aún te amo- -Yo solo volví por mi madre, cuando ella esté mejor me regresaré a Italia junto a mi familia- -El o ella se qu...