Capítulo 55. Un encuentro inquietante

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Luego de que Katsu colgara, decidí salir a la terraza a investigar el ruido de antes.

Al abrir la puerta y no ver nada decidí salir hacia el jardín a buscar. Cuando no encontré nada fuera de lo usual me di media vuelta para volver a entrar, pero pegué un salto de susto al ver que había alguien detrás mío y yo no lo había notado...

-T-tú- hablé con la voz un poco temblorosa -¿cómo... ? ¿qué estás haciendo aquí?- retrocedí un poco

-Cuando no volviste a la base, ni intentaste contactarme... Ni una llamada, ni un mensaje... Creí que habías muerto ¿sabes?- habló el chico peli negro frente a mí. Parecía dolido, pero su mera presencia era tan imponente que costaba trabajo mantenerle la mirada

-¿Por qué habría de contactarte?- de pronto recordé vagamente que entre las memorias que había "recuperado" él aparecía junto a la antigua Sayuri -Nosotros ¿nos conocemos?- pregunté inquieta, aún cuando ya conocía la respuesta...

-¿Estás intentando jugar conmigo? Pensé que sabías que no soy alguien de mucha paciencia, Sayuri- respondió de manera amenazante -Aunque... en realidad que hubieras perdido la memoria sería lo más lógico. Después de todo, cuesta creer lo frágil y asustada que te ves en este momento, siendo que nunca antes me habías tenido tanto miedo cómo ahora- habló mientras se acercaba más hacia mi

Sentí un escalofrío al escucharlo y con cada vez más miedo continué retrocediendo hasta que choqué con la pared

-Es una lastima pensar en lo mucho que has cambiado. Realmente me gustabas más cuando trabajábamos juntos... realmente debí haberte detenido de ir a esa misión por tu cuenta- habló con pesar y decepción

-¿D-de q-qué me estás hablando?... - Por un momento mi curiosidad superó mi temor a conocer el pasado de Sayuri. Claro estaba que estaba involucrada con personas peligrosas...

-Hmm ¿debería decirte?- se acercó a mí y me tomó del mentón -Ahora que no eres más que una niña asustada no estoy seguro que valga la pena que sigas con nosotros-

¿En qué demonios estabas metida Sayuri?, pensé aterrada.

-Al menos ¿recuerdas quién soy?- volvió a hablar

-Eres Dabi, de la liga de villanos- respondí -Aunque, por razones que desconocía hasta que apareciste, últimamente apareces mucho en fragmentos de mis recuerdos... -

- Entonces, sí me recuerdas- dijo sonriendo

De pronto, comencé a escuchar a lo lejos que mi hermano me llamaba. Parecía que me estaba buscando. Dabi volteó en dirección hacia donde provenía la voz de Yohan, luciendo fastidiado.

-Bueno, nos veremos luego. Tal vez- dijo antes de irse

Yo solo me quedé ahí parada, intentando procesar lo que acababa de pasar

-¿Por qué no me respondes Sayu?- preguntó mi hermano -Debes ir a... Oye, ¿estás bien?-

-¿Eh? Ah s-sí, ¿por qué no lo estaría?- respondí con una risa nerviosa. A lo que él me miró preocupado

-Estás pálida... -

-Ah sí, bueno... Salí a asomarme al jardín por un ruido extraño... -

-¿Un ruido? ¿Pudiste encontrar lo que era?-

-Sí... Resultó ser una ardilla jaja, pero me asustó un poco, eso es todo- no sabía si debía contarle sobre Dabi. No quería preocuparlo, y lo que era peor, temía lo que pudiera pensar de mí si supiera que alguna vez tuve relación con alguien como él

-Si tu lo dices... - respondió poco convencido

-Bueno, pero ¿para qué me buscabas? hermano- intenté cambiar el tema

-Tu maleta, ¿ya está lista? Nos iremos pronto-

-Ah no, todavía no. Me distraje hablando con katsu... Iré a terminarla ahora- dije antes de correr a terminar de empacar

POV Narradora

Luego de que Sayuri entrara, Yohan se quedó buscando a los alrededores con la mirada. Sabía que la actitud de su hermana era inusual y momentos antes había tenido la impresión de escucharla hablar con alguien más. Luego de aparentemente no encontrar nada volvió a entrar, aún preocupado por lo que podría haber pasado.

Por otro lado, Dabi veía todo desde lejos. Se había quedado escondido detrás del cobertizo mientras esperaba a que Yohan se fuera para él poder volver con sus compañeros


*La imagen del encabezado no me pertenece, derechos a quien corresponda*

Patito con amnesiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora