POV Sayuri
Luego de estudiar durante un par de horas yo ya me estaba fastidiando de hacer ejercicios interminables de matemáticas, uno tras otro, mientras que katsu aún se veía muy concentrado en su libreta...
"¿Cómo es que puede seguir tan concentrado?", pensé con algo de envidia, "con razón siempre tiene tan buenas notas", continúe dándole vueltas al asunto, incapaz de seguir haciendo cálculos matemáticos.
Luego de estar un par de minutos pensando en la mortalidad del cangrejo y en lo lindo que se veía mi novio estudiando, Katsu volteó a verme con algo de fastidio.
-¿Se puede saber que tanto me ves, patito?-
-¿Yo? No sé de qué me hablas, katsu... Yo solo sigo haciendo estos ejercicios del mal que me diste para resolver - intenté mentir para evitar que me regañara por distraerme
-Sí, cómo no. Tu forma de verme lo hace muy evidente, tonta. Espero que al menos ya hayas terminado la última hoja que te di- me regañó antes de tomar las hojas de ejercicios que yo estaba haciendo
-Sí... No exactamente... - respondí, resignada a que me volvería a regañar
Al principio no dijo nada, solo hizo una mueca cuando vio que todavía me faltaban cinco ejercicios. Luego se puso a revisar todos los demás y me señaló algunos errores que había tenido en los últimos cálculos que había hecho...
-... Aparte de eso vas bien, aunque todavía no los terminas- comentó mientras me regresaba las hojas
-Ya no quierooo- me queje, apoyando mi cabeza sobre la mesa con flojera -Ya fueron demasiadas matemáticas por hoy... Ni siquiera en la escuela me dan tantos ejercicios para un solo día-
-Tch que dramática eres, no creas que te escaparas tan fácil. Al menos termina los que te faltan y corrige lo que te dije- ordenó mientras yo le hacía una mueca
-No puedooo ya no me queda energía- pronuncie tan dramática como pude y recargue mi cabeza sobre la mesa de nuevo pero ahora sin voltear a verlo. Si me iban a llamar dramática al menos que fuera con motivos.
Lo escuché suspirar y dejar sobre la mesa el lápiz que tenía en la mano
-Patito, voltea a verme un momento- su tono de voz se había vuelto algo serio pero no sonaba como si fuera a regañarme, y confundida sobre sus intenciones me volví a enderezar para voltear a verlo- cierra los ojos- ordenó ahora más serio
-¿Para qué?- pregunté desconfiada
-Solo hazlo tonta- volvió a decir, ahora un poco más fastidiado y con un leve sonrojo en sus mejillas, lo que solo me confundía aún más
Cerré los ojos nerviosa y luego de algunos segundos sentí un beso en la frente, lo que me hizo abrir los ojos de inmediato, encontrando a Katsu a pocos centímetros de mi, echándose para atrás en cuanto me vio abrir los ojos
-¿qué fue...?- intente preguntar, pero las palabras no me salían
-No te hagas ideas raras, solo quiero probar con algo nuevo. Tal vez así finalmente logre que te concentres, tonta-
-Entonces... Si me quejo ¿me darás un beso?- pregunté, intentando sacar ventaja de la situación
-No, este solo fue para que te pongas a estudiar de nuevo- dijo como regañándome por querer flojear un rato
-Hmm no me convences... Es muy poca compensación para todo lo que me vas a hacer trabajar- reclamé haciendo un puchero
-Tch okay, entonces te daré uno por cada problema que termines en la siguiente media hora- sugirió
-¿Es en serio?- pregunté escéptica
Su oferta resultaba complicada por lo largos que eran los problemas que me faltaban por terminar, pero no podía rendirme tan pronto
-Tómalo o déjalo patito- dijo antes de volver a tomar el lápiz y regresar su atención a su libreta
Aún dudando, voltee a ver la hoja de ejercicios frente a mí y luego voltee a verlo de nuevo...
-Más te vale cumplir con tu palabra tonto- dije antes de apresurarme a terminar los ejercicios que me faltan.
POV Bakugo
Sentía que moriría de vergüenza luego de haberle dado un beso sin previo aviso a mi infantil novia, por lo que fue un alivio ver que al menos había cumplido su propósito, viéndola volver a tomar su lápiz para seguir con sus ejercicios de matemáticas.
Desde hacía ya varios meses que ambos habíamos empezado a hacer tarea juntos y tenía muy claro lo mucho que le costaba concentrarse para estudiar.
Alguna vez mientras platicaba con Kirishima le comente al respecto y me sugirió que le diera alguna clase de incentivo para que terminara sus deberes, y mientras él y yo considerábamos qué podría gustarle lo suficiente como para estudiar, Mina intervino en la conversación para sugerir a modo de burla que le diera un beso como recompensa.
En aquel momento, aquello sonaba totalmente ridículo y más como una de sus constantes bromas sobre mi relación con Sayuri, pero ahora que ya estábamos saliendo la idea no sonaba tan descabellada.
Pensaba intentarlo cuando regresáramos a clases, pero luego recordé que probablemente tendría que verla en los dormitorios junto con los otros extras, y definitivamente no dejaría que ellos me vieran haciendo algo tan tonto como eso, así que hice todo lo que pude para convencerla de que estudiáramos juntos una última vez antes de que me yo mudara a los dormitorios.
A pesar de eso, conociéndola estaba seguro de que haría lo que fuera por no estudiar y que aprovecharía cualquier excusa como llegar tarde o haber olvidado sus cuadernos en casa para perder tiempo. En cambio ahí estaba, esperando en la puerta de mi casa antes del mediodía, con su bolsa cubierta de estampas y pequeños muñecos que hacía en su tiempo libre como si se tratara de una niña pequeña.
Sabía que probablemente algo había pasado en su casa como para que prefiriera venir a estudiar antes que estar allá, pero preguntárselo directamente solo la haría sentir incómoda, y esperaba que en algún momento ella se sintiera con la confianza y los ánimos de contármelo. Después de todo, tenía más que claro lo impredecible y duro que podía ser su padre a veces...
"Por suerte al menos le dieron permiso de venir", pensé aliviado mientras la veía entrar a mi recámara.
No había considerado que la última vez que vino a mi casa no había entrado aquí, por lo que resultaba normal que se quedara parada en la puerta viendo todo alrededor antes de pasar y acomodarse en la mesa que había preparado desde antes para que pudiéramos estudiar.
Era curioso pensar en que la última vez que habíamos estudiado juntos había sido antes de nuestros exámenes finales del periodo anterior, antes de que ocurriera lo del campamento y de habernos convertido en una pareja, trayendo un poco de nostalgia al momento mientras sacaba algunos libros para que pudiéramos repasar matemáticas juntos.
Como era de esperar, no le hizo ninguna gracia que empezáramos con una de las materias que más trabajo le costaba, pero me sorprendió que pudiera mantenerse concentrada por casi dos horas completas sin distraerse.
Luego de ese tiempo, su mirada fija en mí solo hizo evidente que ya había alcanzado su límite, lo que significaba que podría poner a prueba lo que esos dos me habían sugerido algunos meses atrás.
Aquello me había costado más de lo que creía, haciendo que casi me arrepintiera en el último segundo, pues no quería que ella pensara mal de mí o que aquello la fuera a poner incómoda.
Sin embargo, para mi suerte, la tonta de Mina parecía haber tenido razón, pues luego de negociar con mi demandante novia parecía que esta nueva táctica daría resultado después de todo. Ahora solo había que esperar y ver si había sido lo suficientemente efectiva para ayudarla a que se animara a estudiar por un rato más...
*La imagen del encabezado no me pertenece, derechos a quien corresponda*
ESTÁS LEYENDO
Patito con amnesia
FanfictionLa historia sigue a una chica originaria de nuestro mundo que al morir reencarna en el cuerpo de Sayuri, una adolescente que vive en el mundo del anime de Boku no Hero Academia, donde poco a poco irá conociendo a algunos de los personajes de la seri...