End Amar duele

Estoy condenado a morir

— Buenas noches, joven amo dice Fernando —

— ¿Cómo está ella? —

— No ha comido nada ni tampoco ha querido salir de su habitación —

— Saldrá cuando tenga hambre —

— Pero señor....... — Fernando no dice más al ver la mirada oscura de su amo.

— Tiene la información de los que les atacaron —

— Es la misma persona que hemos estado buscando todos estos años —

— Te has vuelto inservible en estos años que no puedes encontrar a esa persona, dice Mateo furioso —

— Perdóneme, señor, por mi incompetencia dice Fernando agachando la cabeza —

— Quiero respuestas es lo único que dice y se va —

Al día siguiente Stefany no volvió a comer nada, así estuvo por cinco días consecutivos, Mateo estaba harto de los gritos de ella y su comportamiento.

Stefany estaba acostada en su cama cuando ve que se abre la puerta.

— Vas a seguir sin comer, se escucha una voz profunda —

Ella no dice nada y Mateo se acerca, a ella la tomó del brazo y la levanta — Tienes que comer —

— Suéltame, dice ella intentando soltarse de su agarre —

— Te dije que tienes que comer, dice él molestó —

— No quiero comer, prefiero morir —

— Eres una mujer estúpida —

— Tú eres...... —-

— Cállate, esas personas que mataron a tu padre quieren verte muerta y tú te das por vencida tan pronto qué débil eres —-

Stefany no aguanta más y empieza a llorar, Mateo solo mira como llora, pero en su corazón se siente abatido al verla llorar.

—- Vamos, tienes que comer, dice en tono más delicado —

Stefany se sienta y empieza a comer, ella se terminó toda la comida.

Por otro lado, en el país A se encontraba la familia Mancini, todos habían regresado después del entierro de Eduardo.

— Padre, no voy a descansar hasta encontrar a mi hija, dice Valentina —

— Stefany está bien, además es mejor que esté con el señor Fiore, él es la única persona que puede proteger a Stefany —

— De qué hablas padre —

—- A Stefany le quieren muerta, el bebé que perdió hace cinco años no fue un accidente, fue provocado —

— ¡Qué dices, padre! —

— Todo estaba planeado, el bebé que venía en camino iba a hacer el heredero de la familia Fiore, el hombre con el que se va a casar Stefany es el mismo hombre del que ella estuvo enamorada en su adolescencia —

Valentina no puede creer, que el hombre del que tanto estaba protegiendo a su hija sea el hombre del que su hija está enamorada.

— Ahora que ya sabes su identidad, no hay por qué preocuparse —

— Pero ese amor fue hace cinco años —

— Lo sé, pero dicen que donde hubo fuego cenizas quedan —

En los suburbios del país A se encontraba bebiendo una copa de vino Pablo.

— Señor que sigue, dice uno de sus subordinados —

— Hay que esperar una nueva orden, ahora no hay que hacer nada con la muerte de Eduardo, todos nos están buscando —

— Señor, por qué usted trabaja para Ca.... — No termina de decir por qué Pablo dice — Cállate, nadie puede saber quien está detrás de esto —

—  Pero el señor Fiore lo está buscando cuando lo encuentre, no creo que le deje ir fácilmente —

— Yo ya estoy condenado a morir, es lo único que dice Pablo —

Stefany cuando terminó de comer se estaba dirigiendo a su dormitorio, pero escuchó una voz de una mujer.

— Cariño por qué no me has venido a visitar, dice Andrea —

— Estaba ocupado, pero que bueno que vengas estoy estresado, dice Mateo mientras toma la mano de la mujer y se dirige a su cuarto —

Stefany se quedó parada en el pasillo hasta que escucho como cerró la puerta, la mujer sentía una punzada en su corazón, quería salir corriendo, pero sabe que no llegaría muy lejos, ella entra a su habitación, se siente devastada, por una parte, está la muerte de su padre y por otra la persona que tanta ama parece que ya la olvido, Stefany se dirige al baño toma su cepillo dental y se provoca el vómito.

Stefany ha sufrido estos cinco años de bulimia no se siente cómoda con su cuerpo, después de que vio a Andrea, ella cree que su cuerpo no es hermoso cada vez que se mira en el espejo se ve gorda y prefiere comer todo lo que encuentre y vomitar después es su forma de relajarse y olvidarse de su problema, Stefany tenía unos chocolates en la mano que se comía compulsivamente cuando se los terminó volvió al baño y vómito, además de que su mente le atormentaba con los ruidos que más bien eran gemidos de Mateo y Andrea, Stefany se sentía fatal así que seguía comiendo compulsivamente y luego vomitaba.

Al día siguiente ella se levanta y baja a desayunar, pero ve en la mesa vio a Andrea sentada junto a Mateo. Andrea le estaba dando de comer a Mateo.

— Hola, ya me dijo Mateo que tú estás aquí porque tu familia le debe mucho dinero y piensas pagar esa deuda trabajando para él, me llamo Andrea, dice ella dándole la mano —

— Hola, me llamo Stefany dice ella correspondiendo a su saludo —

— Siéntate a desayunar, está delicioso el desayuno —

Stefany se sienta y ve como Andrea sigue alimentando a Mateo, también ve como Mateo le sonríe. Stefany siente que se le van a salir lágrimas, pero intenta ser fuerte, cuando cree que ya no puede más se levanta de la mesa y dice — Señor Fiore, me permite salir, quiero visitar la tumba, de mi padre —