End Amar duele

Afrodisiaco

— Señorita Camila, nosotros vigilaremos aquí dice Fernando —

— No, nadie los puede interrumpir, además nadie sabe lo que pasó esta noche, dice Camila en forma de amenazante y mirando a todos —

— Todos dicen sí, al mismo tiempo —

— Perfecto, ahora quiero que me conecten a las cámaras de seguridad, tiene que ser borrado todo rastro —

— Ahora mismo dice Frenando —

— Vamos, que la acción ya va a empezar —

Todos salen de la habitación, Camila se va con los guardaespaldas de Mateo y Jair va a dejar a Lulú a su departamento.

Mientras en la habitación 999 Stefany se encontraba parada, las luces estaban apagadas y solo estaba un poco de luz porque alumbraba la luna, Mateo ve a la mujer parada y se acerca lentamente, los dos se miran fijamente, pero no pueden reconocerse y solo ven sus ojos, el hombre se acerca a la mujer lentamente y la toma él olfatea su exquisito olor que hace que se vuelva loco. El hombre siente como su temperatura corporal sube y su excitación también, sin más la besó con desespero, la mujer disfruta cada beso que el hombre le da, pero estos van tomando más fuerza, el hombre siente tanta atracción por la mujer que tiene en sus brazos que ya no aguanta más, este le lanza a la cama y se sube encima de ella, su desesperación es tanta que rompe el vestido que traía puesta, dejándola desnuda, el hombre empieza a recorrer con su boca por todo su cuerpo, besa su cuello sigue bajando hasta que llega a sus senos y los devora.

Stefany esta tan excitada con cada toque del hombre le llevaba a tocar el cielo y el infierno al mismo tiempo, Mateo baja hasta su zona íntima y le da placer con su boca.

— Hazme tuya....... no me...... tortures así.... Dice ella —

—- Quiero disfrutar de ti un poco más, dice él chupando uno de sus senos —

— Te quiero dentro......... de mí........ Dice ella muy excitada —

— Di que eres mía le susurra al oído mientras lame su lóbulo de la oreja —

— Ay haz me..... Tuya —

Mateo se deshace de su ropa dejando a la vista su excelente y exquisito cuerpo, a pesar de que está oscuro, ella puede ver con la luz de la luna los músculos del hombre, la mujer no se contiene y empieza a recorrer con sus manos cada centímetro del cuerpo del hombre.

—- Haces que me excite más, dice Mateo mientras con su mano introduce en su zona íntima, abre sus dedos de una manera brusca —

— ah..... ahah ha....., te quiero dentro de..... Mi dice ella sin poder contenerse más —

Mateo se deshace de su bóxer, abre mis piernas y me embiste, con cada una de ellas sentía tanto placer que nunca había experimentado, le pedía que no parara, quería que lo hiciera más duro.

La cama se movía con cada embestida, sus cuerpos se unían en uno solo, ella clavaba sus uñas en la espalda del hombre, sus gemidos y gruñidos se hicieron presentes en la habitación, la madrugada se hizo presente y fue cuando el hombre paró, su resistencia era tanto quería seguir, pero se dio cuenta de que la mujer a su lado estaba cansada.

A la mañana siguiente, Stefany se levanta por la luz de los rayos del sol que entran a la habitación.

— Donde estoy se pregunta a ella misma —, mientras mira a su alrededor, ella se da cuenta de que alguien está a su lado, Stefany mira a su lado y ve a Mateo durmiendo profundamente, ella mira debajo de la colcha y se da cuenta de que está sin ropa, que sucedió anoche, ella empieza a recordar todo lo que sucedió la noche anterior, su cara está roja al recordar como le pedía a Mateo que no parara y le pedía que le diera más duro. Stefany desecha esos pensamientos de su mente y se intenta levantar sin hacer ruido, pero su entrepierna la siente hinchada y le duele.

Ella despacio coge su ropa y se viste lo más rápido que puede, —- mi ropa dice ella al verla toda destrozada — no le queda de otra que tomar la chaqueta de Mateo y cubrirse su cuerpo, ella se acerca despacio a la almohada y le deja un recado que dice.

Gracias por tu servicio gigoló, pero deberías mejorar tus habilidades para satisfacer a tus clientas, ella deja la nota y 100 dólares a lado, Stefany se ríe entre ella.

Stefany sale sin más del hotel, se sube a un taxi y se marcha del lugar.

Mientras Mateo acababa de despertarse, él se levanta y busca a la mujer con la que durmió anoche, pero no la encuentra por ninguna parte, ve que en la almohada hay una nota este después de leerla la arruga y frunce el ceño. — Maldita mujer como que debería mejorar mis habilidades —