Dolor de Madre

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9 eran los días que ya habían transcurrido. El primer pueblo al que fueron les causó decepción pues nadie sabía sobre las personas que secuestraban a los albinos.

Estaban atando a sus caballos, este nuevo pueblo era un poco más grande que el anterior; algo a destacar es que este tenia un gran mercado.

-vayamos a buscar información en el mercado- sugirió Lina mientras sacaba unas monedas de la alforja en la silla de sadiq.

- es una buena idea, es más probable que los mercaderes sepan algo- comento Nadia en lo que aseguraba el nudo de la cuerda con la que amarraba a su caballo con el fin de que no se fuera o que se lo robaran

Los tres caminaron al mercado y se separaron en busca de aquella preciada información.

Halim preguntaba y buscaba personas que parecieran sospechosos hasta que en el centro del mercado vio a una mujer ya adulta de tez clara, y al lado de ella un joven alto y de tez morena; ambos se encontraban sosteniendo el cartel de una niña, sin embargo ninguna de las personas que pasaban por ahí les hacía caso.

Decidió acercarse a esos dos y ver si tenían algo de información o incluso si podía ayudarlos.

- hola! Oye disculpa haz visto a esta pequeña??- pregunto la mujer con desesperacion al ver que Halim se acercaba.

- lo siento mucho señora... no la he visto... de hecho yo también estoy buscando a alguien - comento el pelirojo viendo como la mujer bajaba la mirada con tristeza.

- es mi pequeña... tiene tan solo 6 añitos se la llevaron unos hombres pensando que era albina... pero mi bebe no lo es - sollozo la mujer mientras el chico que la acompañaba le daba palmaditas en el hombro.

- espere... dijo que se la llevaron por que pensaron que era albina?... escuche, estoy buscando a mi amigo, el es albino y se lo llevaron... una amiga, mi hermana y yo iremos a rescatarlo - dijo Halim captando toda la Atención de la señora.

- t...tu puedes t..traer a..mi léa? - lloro esperanzada.

-puedo hacerlo... pero necesito que me cuente todo lo que sepa - pidió el pelirojo en un tono calmado.

- ella no estaba ese día... yo te dire todo lo que se... y te ayudare a rescatar a esas personas- comento el chico que había estado callado hasta ahora.

- enserió? Muchísimas gracias, soy Halim - se presento amablemente.

-soy Nadeem y ella es Cala - se presento el chico

-no saben como me alegra poder encontrar al fin una pista - comento Halim aliviado relajando su postura.

- será mejor que vayamos a mi casa, ahí Nadeem y yo tenemos toda la información que hemos logrado recabar - sugirió la de tez clara mientras limpiaba los restos de lágrimas que había en sus mejillas.

- claro - accedió Halim sin más problemas, dejaría que su hermana y Lina siguieran buscando pistas mientras el conseguía información.

Caminaron por el pueblo hasta llegar a una casa un poco pequeña pero acogedora, entraron por la puerta principal y fueron a la cocina donde se sentaron a la mesa mientras Cala les preparaba un té.

- aqui tienen chicos, lamento no poder hacerles algo de comer pero no he surtido mi alacena- se lamento algo apenada mientras dejaba el té en la mesa.

- no se preocupe - hablaron al unísono Halim y Nadeem sacandole una risita a Cala quien tomó asiento junto a ellos.

- bien empezemos, estuve investigando mucho, hace un par de años en una de mis búsquedas encontré a un espía de esa organización - explicó Nadeem seriamente.

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