Vuelve A Mi ~Chaesoo / Jenlisa~

Capítulo 14

Hola! 

La mañana había llegado, la cálida luz del sol ya comenzaba a filtrarse por doquiera y el bullicio de los pajarillos sonaba al tiempo que el sol se asomaba, los transeúntes comenzaban abarrotar las calles de la ciudad, una mezcla de olores entre pan recién horneado y desechos de las fábricas cargaban el ambiente de Londres, carruajes con productos se dirigían al mercado, el silbido del tren indicaba su partida y los chirridos de los rieles anunciaba la llegada de otro, cada cual se dedicaba a lo suyo como siempre había sido.

En un carruaje con rumbo a este alborotado entorno, iba Lady Jennie acompañada de la Sra. Wood, encargada de la cocina, y una doncella de nombre Yeri, la más joven de los empleados, se dirigían a realizar las compras de frescos productos para preparar los distintos platillos que la castaña quería probar durante la semana, normalmente para una aristócrata estas acciones no formaban parte de sus actividades de día a día, era la servidumbre la que tenía la obligación de llevarlas a cabo sin embargo, esta era una de las favoritas de la joven Kim, le parecía emocionante andar a tempranas horas por las calles de la ciudad, cuando todo parecía tan fresco y el sol no era tan abrumador, por este lapso de tiempo los aristócratas no formaban parte de este mundo matutino ya que generalmente era la clase media y trabajadora la que iba y venía por las alborotadas calles y eso le agradaba a la castaña pues no tenía que lidiar con gente pretenciosa que no dudaría en horrorizarse por las acciones de la joven.

A pesar de haber sido educada y criada como una aristócrata, Lady Jennie actuaba como si no hubiera tenido este tipo de privilegio, desde pequeña siempre aborreció ese mundo, ese en el que tenía que seguir muchas reglas, normas y etiquetas, en el que se le prohibía soñar y se le exigía obediencia, y que además imponía un estándar con el que era muy difícil de lidiar y desde luego abusivo para una mujer, por lo tanto su pasatiempo favorito era desafiar y oponerse a todo lo que se le había enseñado en su adolescencia y ahora que vivía con Lisa no había nadie que le impidiera hacerlo, o eso es lo que creía.

Con un vestido sencillo y un par de botas de campo Lady Jennie miraba por la ventana del coche, sus ojos vagaban por todo el paisaje que podía ver a través del cristal, sin embargo su mente no estaba ahí, sus pensamientos volvían a los acontecimientos recientes, esos que involucraban a su queridísima prima y a la rubia que tenía por esposa que además era mejor amiga de su Lisa, tenía muchas preguntas, una de ellas cuestionaba la razón de por qué Rosé trató de besar a la pelirroja, a pesar de que lo habló con esta última el día anterior, en su mente aún seguía vagando esa pregunta, no podía borrar de sus memorias aquella escena y el sentimiento repugnante volvía ligeramente a tocar su corazón -¿Por qué Rosé se comportó de esa forma?¿Qué quería probar?¿Realmente lo hubiera hecho?¿Podría ser que...? No, Lisa me ha dicho que son como hermanas, ella no la quiere de esa forma, pero qué hay de Rosé ¿Será posible? No lo creo, pero - sus pensamientos fueron interrumpidos por la Sra. Wood quien pedía su atención tocando ligeramente su brazo.

—¿Señora?— volvió a decir la mujer, en su tono de voz podía escucharse ligeramente algo parecido a la preocupación o tal vez era solo curiosidad disfrazada, puesto que llamar a su señora tres veces y no obtener respuesta sin duda había despertado una de esas dos emociones.

Con un ligero movimiento de cabeza y varios pestañeos Jennie trató de borrar aquellos pensamientos intrusivos para mirar a la mujer mayor quien fruncía el ceño ligeramente.