dirty mounth

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-Eres una bocaza!

-cállate! No lo soy!

-si lo eres, incluso dices patas en ves de pies! Son piees!

-no ala vxrga, son patas.

-ahg! Que son pies! No eres un animal!

-pero me dices pato! Quién te entiende!

-pero- nooo! Ashh, cállate ya!

-cállame aver!

-n-no solo, ahg, silencio!

Una de sus muchas peleas diarias donde la pobre yoshi terminaba frustrada y mariana riéndose de ella.

-de que te ríes?!

-de nadaaa

-mmm, más te vale..

-si no que?

-yo, eh, te voy a pegar.

-¿quién?

-yo

-te preguntó.

-ayyy, a veces me caes tan mal!

-¿segura?

-si, maldita respondona! Groser-

Las grandes manos de la mayor se posaron en las mejillas de la contraria uniendo sus labios con los de ella formando un suave y brusco beso ala vez, la más chica había intentado quitarse recibiendo una mordida de parte de la otra, así no tuvo más que corresponder muy "forzadamente"

-también te odio.

-t-tu...

-¿yoooo? ¿yo que aveeeer? Nada, nadaaa, shh, callese la boca.

Ni siquiera pudo emitir algún sonido o queja, seguía en shock por lo ocurrido y su rostro rojo lo daba a conocer.

-bueno yoshi, nos vemos después ehh

-no! a-a donde chingados crees que vas?! Vuelve aquí tonta!

-ey! Lenguaje, grosera vulgar, no no, a ti te hace falta una buena clase de modales.

-pero yo!-

-tú nada, ven aquí, yo te voy a enseñar y cerrar la boca.

Y nuevamente sus labios chocaban con los de ella, se movían de forma lenta y suave deleitandose del suave sabor a fresas del labial de la pequeña, parecía tan adictivo que no quería separarse.

Si no hubiera sido por yoshi, ella pudo haber seguido.

-y-ya basta! No hagas eso!

-y sigues alzando la voz, mmm, no no no, aún no aprendes.

Está vez era un beso más brusco, o como mariana pensaba "educativo." Para que ella aprendiera a no responder.

-¿ya?

-...

-muy bien! Ya no las groserias para ti, ni alzarme la voz, a menos que quieras otra clase de modales o la nesecites.

-eres una grosera...

-pero así te gustaaaa

-ya, cállate...

La pobre chica de ojos gatunos desviaba su vista de ella para evitar mirarla y que se diera cuenta de lo muy avergonzada que estaba.

¿Y como habíamos llegado a este punto?, sencillo, por aquella vez donde se conocieron por una graciosa pelea de mariana con un bus.

-uhm, no creo que sea lo mejor maldecir tanto y de esa forma, podrías solo, presentar una queja y ya...

-para que? Si les vale verga si les digo o no, de todas formas van a ignorarme los pendejos de mierda.

-y-yaa, oye, no seas tan...grosera

-¿que?

-es que!, ay ,dices muchas groserias...

-tú no?

-no...

-cositaaa!

Y así, yoshi se animó a pedirle su número, no creyendo que aquella chica sería una completa bocaza para ella, y se daría la tarea de adecuarla, y pasar tiempo con ella discretamente, obvio.

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