Capítulo 40

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Fuera de la ventana de piso a techo pues había una hermosa atardecer, la luz roja anaranjada brillaba a través del vidrio entrando a la tienda, dándoles a ellos dos un halo cálido.

La tienda se llenó del dulce olor a crema, pero Gojo Satoru sentía que ninguno de ellos era tan bueno como el olor que la rodeaba a ella.

Después de que su cerebro estuvo congelado por un período de tiempo, Gojo Satoru finalmente se encontró a sí mismo.

Recordaba infinitamente esa suavidad que se había dejado tras un sólo toque.

Ser besado tomando la iniciativa por la persona que te gusta, obviamente debería ser un asunto que hace a la gente muy feliz, pero él ahora mismo no podía pensar en el motivo.

No había necesidad de que ella haga esto, y también no parecía que a ella le importó mucho.

Gojo Satoru no podía entender el estado mental de Makima.

Cuando se acababan de conocerse, ella obviamente tomó la iniciativa de ponerse en contacto con él íntimamente, en cambio después de cierta conversación, se volvió distante nuevamente. Ayer, de repente le llamó "Satoru", y luego volvió a cambiar, ahora encima podía fingir ser su novia con calma.

¿En qué realmente estaría pensando Makima?

Y lo que ella acababa de hacer fue completamente diferente a lo que podría hacer alguien a quien no le agrada. ¿Qué significó "no debería pasar nada si nos damos un beso"?

¿Ella es tan casual con los demás de la misma manera?

Era como si él fuera el único que le habían engañado todo el tiempo.

Cómo le ve ella exactamente desde dentro de su corazón, él no tiene ni idea.

Si fuera cierto lo que dijo Ieiri Shoko, que Makima sabía todo, sólo que nunca le había expuesto, en ese caso él probablemente tampoco estaría enojado.

Él sabía, que ella sólo quería que las cosas fueran menos incómodas entre ellos.

Makima, que estaba sentada frente a él, todavía tenía esa apariencia de que no le importaba. Su cabello era rojo anaranjado bajo la puesta de sol, se sostuvo sus gafas de sol en sus blancas delicadas y delgadas manos, hasta se las puso en el puente de su nariz, y luego se las quitó con una cara de desconcierto.

Ella murmuró en susurros: -Es todo negro......-

Pero Gojo Satoru aun así la escuchó.

Gojo Satoru tomó las gafas de sol de su mano, parpadeó con los ojos que estaban casi cegados por la luz del atardecer de sol, los volvió a poner sobre el puente de la nariz y explicó: -Mis gafas de sol son casi completamente negras, poniéndolos son casi como antifaz en los ojos.-

Incluso si no iba a ver, aún así podía "ver" el flujo de Juryoku en el alrededor, además usar estos "Seis ojos" para ver las cosas consume mucha energía, por lo que Gojo Satoru generalmente usaba una antifaz o unas gafas del sol negras opacas.

Makima asintió con complicidad, después de todo, era un hombre que caminaba por la calle con una antifaz en los ojos, por lo que no era sorprendente que sus gafas de sol fueran así.

-Viéndolo así, Satoru es de verdad muy poderoso.-

Satoru.

Incluso si esto no es lo que ella realmente piensa, él está extremadamente ansioso que este período de tiempo durase para siempre, quiere escuchar a ella llamándole diez veces, cien veces, mil veces.

Él más de una vez sintió que tenía dentro de la garganta muy seca.

En el pasado, el señorito Gojo nunca podía llegar a pensar que no pudiera obtener algo, pero ahora él sólo piensa en cómo podría llegar a obtenerlo.

Makima san no quiere ser Jujutsushi | Gojo Satoru x Makima |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora