A ti que estás roto por dentro, que caminas por la vida con una armadura invisible, protegiendo un corazón que ha sido herido tantas veces que ya ha olvidado cómo sanar. A ti, que enfrentas cada día con una valentía que pocos entienden, ocultando bajo una sonrisa forzada las cicatrices que aún sangran en lo más profundo de tu ser. A ti, que has aprendido a vivir con el peso de tus miedos y tus inseguridades, escondiéndolos detrás de palabras cuidadas y gestos calculados, para que nadie vea cuán frágil te sientes por dentro.
Escribo estas palabras para mí misma, para encontrar un refugio en medio del caos que inunda mi mente. Escribo no para atraer a alguien de regreso a mi vida, sino para recuperar a la persona que solía ser antes de que la tormenta interna me arrastrara a la deriva. Hace tiempo que me perdí en el laberinto de mis propios pensamientos y emociones, y en cada palabra que escribo, busco el camino de regreso a mi esencia, a quien fui antes de que las heridas comenzaran a acumularse sin suturar.
A ti, que como yo, te escondes tras una máscara de fortaleza, quiero decirte que no estás solo. Todos llevamos heridas que ocultamos por miedo a mostrar nuestra vulnerabilidad. Pero es en la escritura, en el acto de volcar nuestras emociones en palabras, donde podemos empezar a deshacer los nudos que nos atan. Escribo para liberar los demonios que han echado raíces en mi alma, esos que me mantienen prisionera de mis propios miedos. Y al hacerlo, encuentro un rayo de esperanza, una chispa de luz en medio de la oscuridad.
El proceso de escribir se convierte en un viaje hacia dentro, una exploración de las partes de mí misma que he descuidado o reprimido. Cada palabra es un paso hacia la comprensión, hacia la aceptación de que está bien estar roto, que está bien sentirse frágil. No hay necesidad de ocultar nuestras cicatrices, porque son testigos de nuestra lucha, de nuestra capacidad para seguir adelante a pesar del dolor. Es en la honestidad con nosotros mismos donde encontramos la verdadera fuerza, la que no se basa en aparentar, sino en reconocer nuestras debilidades y trabajar en sanarlas.
Así, en este acto de escribir, encuentro mi camino de regreso a casa, a un lugar dentro de mí que es más auténtico y verdadero. No importa cuánto tiempo haya estado perdida, sé que puedo encontrarme nuevamente, y que cada herida, cada cicatriz, es parte de mi historia, una historia que merece ser contada, no para otros, sino para mí misma. Porque al final, escribir es mi manera de sanar, de cerrar esas heridas abiertas, y de recordar que, aunque frágil por fuera, hay una fortaleza dentro de mí que nada ni nadie puede destruir.
Gracias por haberte quedado conmigo. Tal vez, solo tal vez, mis escritos puedan ayudarte a quererte un poco más, a valorarte de manera más profunda y a enfrentar tus pesadillas en lugar de ocultarte de ellas.
—Campos Chriss
ESTÁS LEYENDO
𝐅𝐫𝐚𝐠𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨𝐬 𝐃𝐞𝐥 𝐀𝐥𝐦𝐚
Poetry𝐋𝐨𝐬 𝐟𝐫𝐚𝐠𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐮𝐧 𝐚𝐥𝐦𝐚 𝐫𝐨𝐭𝐚 𝐬𝐨𝐧 𝐮𝐧 𝐚𝐫𝐭𝐞 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐨 𝐦𝐮𝐜𝐡𝐨𝐬 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐞𝐧 𝐚𝐩𝐫𝐞𝐜𝐢𝐚𝐫. NO AL PLAGIO ❌ LETRAS INSPIRADAS EN MI VIDA, SI ALGUIEN CREE QUE ES PARECIDO A OTRO LIBRO PORFAVOR EVITATE LOS MAL...