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Las clases terminaron rápido para el gusto de Felix, quien ya llevaba una carga más, su profesor de Biología no había ido y tenía que entregar su ensayo, el aún verlo en su mochila le generaba inconformidad, pero lo reconfortante es que podría revisarlo y corregir lo que estuviese mal.
Guardo sus cosas en la mochila y se dispuso a esperar a sus amigos, quienes aún no terminaban, saco su celular y reviso la hora, era temprano así que podría esperarlos y luego ir a la biblioteca.
— ¿Que revisas eh? ¿Acaso ya tengo cuñis? — El curioso Omega se paró a su lado tratando de ver el celular que fue apagado y guardado antes de que pudiera siquiera ver la hora.
— La única forma en la que Felix consiga Omega es que sea estudiosa y se la pase en la biblioteca, aunque sería el encuentro menos romántico. — Kim frunció el ceño al pensar eso.
— Ey, sigo aquí. — Dijo y empezó a caminar fuera del salón.
Obviamente no le molestaban esas bromas, las venía escuchando hace tiempo, pero esa vez se sintió diferente, aparte de sentirse extrañamente culpable por haber pensado en el Alfa que conoció en la biblioteca en lugar de la linda Omega que aveces lo veía estudiar.
No lo pensó mucho y se quedó con la idea de que solo se acordó de el por la mención de la biblioteca, no por otra razón.
Salió de sus pensamientos cuando un brazo paso por su cuello y una mano lo despeinó.
— Ya, no te enojes, mejor vamos por un café, ¿Si?
— Tengo que es—
— No, hoy no, ya estudiaste lo suficiente, hoy mereces un descanso. — Intervino Han.
— Me encantaría la idea, pero los exámenes serán pronto. — Suspiro y sonrió a medias.
Cuando tenía ocho soñaba con poder salir con sus amigos, ir al cine, jugar videojuegos y ir a fiestas, como los adolescentes que veía cuando estaba en primaria, aquellos que estaban en el edificio de enfrente, pero ahora que era un adolescente no podía ni salir al cine, mucho menor ir a fiestas, y de invitar a sus amigos en casa no se podía hablar, su madre no lo permitiría, diría que eso solo es una distracción.
— Han, plan B.
Felix frunció el ceño, no entendía a qué se referían hasta que fue literalmente empujado a la salida del edificio, y del campus, obviamente puso resistencia, pero eran dos contra uno, aunque su amigo era Beta parecía un Alfa en cuanto a fuerza y aunque Han fuera Omega tenia la suficiente fuerza para ganarle unas vencidas a alfas y betas y el aún siendo Alfa no era tan de hacer ejercicio, tampoco es como si tuviera tiempo para eso, pero estaba bien con su abdomen plano.
Llegó un punto en el que Omega y Beta dejaron de empujar al rubio solo tomándolo del brazo por si intentaba huir, aunque estaban felices de poder ayudar al Alfa a descansar, aunque fuera un rato del estudio.
— ¿Porque hace tanto frío? Dios, minimo me hubieran dejado traer un suéter. — Se quejo mientras un escalofrío recorría su espalda, sabía que el otoño estaba dando su gran llegada, pero aún así le parecía excesivo el frío que hacía.
— Exageras, estamos a 13°C grados, es un clima perfecto. — El menor sonrió dejando que la brisa golpeara su rostro, alzando algunos mechones castaños.
— Entiendelo Han, el pobre no sale de casa, ¿No vez lo pálido que está? Le falta más vitamina d. — Kim tomo las mejillas del pecoso para moverlo de un lado a otro, el menor de todos río al ver el ceño fruncido del Alfa.
Lee se separó del Beta para quejarse, obviamente salía de casa, tampoco es que fuera antisocial, solo le daba prioridad a sus estudios.
Mientras el trio reía al otro lado de la calle dos chicos iban pensado en que hacer o decir, estaban a dos cuadras de su destino y uno ya tenía los nervios a flor de pie.
— Jeongin.
— JeongIn.
— ¡Yang JeongIn!
— ¿¡Que!?
— Casi chocas con el poste, dios, fíjate por dónde vas. — El peli rosa señalo el poste de concreto que seguro le hubiera dejado un moretón en la frente.
— Lo siento, pero en serio, estoy preocupado por MinHo. — Admitió soltando un pesado suspiro
Le preocupaba que el mayor estuviera enfermo de algo grave, o que su nueva parte le asustara, aún para el que podía controlar su lobo era aterrador el como avances casi era dominado por el, no queria imaginar a su Hyung que no tenía la mínima experiencia sobre eso, sabía que Lee no era fácil de asustar ni un cachorro frágil pero nunca estaba de más querer cuidarlo.
Agradecía que HyunJin fuera con él, de lo contrario ya hubiera sido atropellado o golpeado por un poste.
— Vamos, no quiero ser responsable de una marca en tu frente.
El beta se burló y empezó a caminar siendo seguido por el Alfa que dejó escapar una risita.
Durante el resto del camino presto más atención, ignorando un terroso olor que llegaba a su nariz de la nada, siendo más fuerte algunas veces.
Quiso atribuirlo a que era su imaginación, y así lo dejo, después de todo, no era normal el pensar que el olor de otro Alfa era bueno, tal vez llamativo, pero creer que te gusta es algo totalmente diferente, menos el querer seguirlo con la esperanza de ver a su portador.
— Jeongin, ¿Es aquí? — El mencionado salió de sus pensamientos para alzar la mirada y ver la casa, asintiendo al ver qué si era la casa de MinHo, el beta tocó la puerta un par de veces y espero a que abrieran.
— Recuerda, RyuMi es algo especial, no mires su cuello, y si lo haces que no sea por mucho tiempo, y evita preguntar, apenas te conoce así que se incomodará, y tambi—
— Hablas como si mi madre fuera la cosa más temible del mundo. — Lee frunció el ceño viendo al menor.
— Cuando se enoja da miedo, y lo sabes perfectamente MinHo... ¡MinHo!
El mencionado soltó una carcajada, su menor no se había dado cuenta de su presencia y eso le causaba gracia. El Alfa no lo pensó mucho y se acercó a revisar a su amigo, agradeciendo que ya no tuviera fiebre, aparte se veía bastante bien, solo había algo raro que no pudo notar, ni siquiera cuando el mayor los invito a pasar, llevándolos a la sala, tampoco cuando paso el rato explicando que había pasado anoche.
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