Burbujas de Jabón

Capitulo 8

Me encontraba tendida en el piso pensando en la fiesta de anoche, que acabó bien, la mejor noche de mi vida y sin duda el comienzo de una nueva Colby Lawson. Es extraño que de un día a otro todo haya cambiado para mí, es fantástico.

Siento como mi corazón late fuertemente cada vez que pienso en aquellas imágenes, que marcarán una nueva etapa de mi horrible vida. Y todo se lo debo a Aldrich, porque él hizo que todo eso fuera real, hizo que saliera de la sombra de los demás.

Admito que me duele la cabeza, es el dolor más fuerte que he sentido, espero.

No me dan ganas de nada, pero sin duda muero por hablar con Joseph de nuevo, es lo que más deseo en este momento, pero tengo que esperar a mañana... Solo 18 horas.

Aldrich me ha confesado que probablemente anoche haya besado a 9 chicas, en la que está incluida Peyton como la primera en la lista, pero al mismo tiempo me hace sentir mal, pues Aldrich se hizo ver como un completo idiota y un infeliz, sin embargo lo noto un poco preocupado por que no recuerda absolutamente nada, y teme a que haya echo algo malo, sí, aún más. Y sinceramente, no me gustaría saberlo.

No es bueno beber, para nada.

Pero no pensé muy bien las cosas y me deje llevar; una margarita se convirtió en 10, y mi "inocencia" se volvió en "delincuencia". Me arrepiento profundamente.

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He quedado con Peyton esta tarde para arreglar algunos asuntos que ella tiene en un banco, ya que desafortunadamente le han cancelado la tarjeta de débito para menores, así que tendremos que ir con algún adulto, claro que iremos con su madre, la bruja.

Es una mujer despreciable, con un carácter por los suelos, arrogante y egocentrica.

Sé que está mal expresarme así de alguien mayor que yo pero simple y sencillamente no la soporto, pues habla mal y agrede a Peyton. Sí, puede ser su madre y la única al mando, pero eso no le da el derecho de agredirla. No la soporto. Algunas personas deberían irse al caño.

Al llegar a aquella sucursal del centro de Tennessee, Aldrich se estaciona en un lugar cerca, a lo que solo tenemos que caminar unos cuantos metros.

Nos bajamos del auto de mi hermano y comenzamos a caminar, pero al dar un mal paso, casi muero, gracias a un tubo que se encontraba a centímetros de mi me pude sostener, pero eso no quita el mal rato ni las burlas de un par de personas. Mierda.

Al salir de aquel lugar con apariencia decente y aroma a capitalismo, nos dirigimos al auto de nuevo, y esta vez la madre de Peyton decidió irse en transporte público, porque la gran bruja no quiere ir en un auto con aroma a jabón y menta, tiene lógica, toca la bañera una vez al mes.

-¿Que sucedió? -dijo Aldrich, mirando y moviendo con el pulgar la pantalla de su móvil.
-Le han cancelado la tarjeta de débito, la  reportaron como robada por error. -miré a Peyton.
-Qué mal. -dijo Aldrich, haciéndole una cara triste a Peyton.

Lo sé, hacen la pareja perfecta. Ella lo miró y le sonrió, para después besarse.

Wow, wow, wow, wow.

-Alto. ¿De qué se trata esto? -pregunté, emocionada y anonadada.
-By, te presento a mi novia, espero no te importe, pero es la chica más hermosa que mis ojos han visto. -la miró y la tomó de la mano.

No se que siento en este momento, si felicidad o preocupación por aquella situación de las chicas besuconas con Aldrich, nunca me atrevería a decírselo a Peyton.

-Y... -sacudo la cabeza sacándome de mis pensamientos-. ¿Cómo pasó? -sonreí.
-Solo pasó -me contesto Peyton, para después besarse.

Esta bien, son perfectos. Desde años he anhelado este momento.