Giro total de una vida adolescente (Gay)

18. Cita doble

Boquiabierto, pasmado, traumado. Realmente no sé como reaccionar al ver lo que ocurre. En serio no se si alegrarme o simplemente tomarlo negativamente. No se cuánto tiempo valla a tomarme para que mi mente procese esto con calma.

De repente Martín separa a Wiliam de sus labios, lo mira fijamente, lo piensa y lo besa nuevamente.
Miro a Ben y él esta sonriendo tan sorprendido como yo.

-Okay, okay. ¿Qué carajo pasa aquí?. -Digo sorprendido. -No comprendo. Ustedes..... Mierda.
-¿No lo comprendes, Adam? Todo pasa por algo. -Me dice Ben con una linda sonrisa. Yo sigo impactado y con un gesto de confusión.
-Supongo que...... pues si.

De repente entra un medico algo apuesto de unos 28 años y se acerca a Martín.
-Cómo estás, Martín? -Le dice amablemente. -Verdad que te sientes bien?.
-Si, doctor, de maravilla. -Responde él
-Eso está bien, porque ya te podemos dar de alta. Hoy te vas a casa.
-Eso me alegra. -Dice Martín.

Entran los padres y se acercan a él.
-Recomiendo que valla al psicólogo, no queremos que algo como esto vuelva a pasar; él necesita en serio aprender a aceptarse. Es muy común en jovenes. -Dice el doctor a Martín y a sus padres.
-Se lo agradecemos mucho, doctor. -Responde ls madre de Martín.

Apenas vengo a percatarme de que la chica de la otra camilla estaba sentada.
-Wooow Martín, parece que te vas a casa. -Dice la chica con una gran y rara sonrisa de repente.
-Claro que si, Cassie. ¿No es genial? -Responde Martín.
-Si, es muy woow. Solo no te olvides de mí. -su sonrisa desaparece de repente.
-Nunca lo haría, Cassie. Prométeme tú que te cuidarás y comerás. Esto no es justo para tí.
-Haré lo posible. -Dice la chica con una linda sonsrisa. -Ahora sal de aquí y disfruta del mundo y de tu linda vida.
-Si que lo haré. -Afirma Martín mientras se para de la cama y le da un cálido beso a Cassie en la frente.

Ben me toma del brazo y salimos de la sala. Luego nos sentamos en la sala de espera a esperar que por fin salga Martín.
-Por ahora todo se ve muy bonito ¿No? -Me pregunta Ben con una linda sonrisa.
-Si. La verdad nunca imaginé esto.

Al rededor de unos 5 minutos se sienta Wiliam con nosotros.
-Martín dice que necesita hablar con sus padres sobre esto. Algo me dice que les contará sobre su sexualidad. No se si yo llegaré a importarle.
-¿De que hablas? Ese beso dijo muchas cosas. Solo conózcanse y dejen que todo pase. -Le dijo Ben a Wiliam.
-Si, es cierto. Creo que es mejor que nos vallamos y dejemos a Martín procesar todo esto. Necesita pensar y tomar las cosas con calma. -Dijo Wiliam.
-Es cierto. Hay que hablarle después. Cuando todo esté en calma. -Les digo a ambos.

Nos paramos del lugar y nos vamos Ben y yo a su casa después de despedirnos de Wiliam.

En el camino pienso muchas cosas que le hago saber a Ben.
-Viste esa chica que estaba en la habitación con Martín? -Le pregunto.
-Si, era muy delgada y tenía marcas de cortadas. -Responde desconcertado.
-Ella me preocupa, se ve que tiene muchos problemas. Ella definitivamente no esta bien. -Le digo algo triste pensando en esa chica. -Pero bueno, lo que importa es que nosotros lo estamos. Te amo.
-Y yo a ti. -Responde él.

Al llegar, Ben y yo entramos a la casa y vamos a su cuarto. Él me mira con una sonrisa curiosa.
-¿Qué ocurre? -Digo riendo.
De repente Ben me besa y me arroja a la cama, se lanza encima de mí y tira de mi cabello. Siento su erección contra la mía.
Es claro que este tipo quiere sexo conmigo y después de que las cosas están mejor que nunca, no estaría mal.

Empujo a Ben hacia un lado y me arrojo encima de él.
Me quito la camisa y lo beso. Él me quita el pantalón, se para de la cama y se quita toda su ropa. Luego se lanza encima de mí y me besa mientras tira de mi cabello. Comienzo a sentir su pene acercándose a mi ano y haciendo presión. Yo abro las piernas y él comienza a entrar en mí. Gimo, fuerte.

Ben está demasiado caliente, alza mis piernas y empieza a penetrarme muy rápido y con mucha fuerza. Me duele un poco, pero me encanta.
-Joder, más, más adentro. -Le pido a Ben y él cada vez me penetra con más fuerza mientras yo me masturbo.
Comienzo a sentir ganas de eyacular y me dejo venir en mi abdomen mientras gimo con mucho placer. Ben no para de penetrarme, al contrario; me da con más fuerza y comienza a dar unos gemidos de placer mientras él se deja venir dentro de mí. Él me besa y se queda encima mío respirando con mucho cansancio.

Se para y me toma del brazo, yo me río.
-¿A donde me llevas? -Le digo riendo y me doy cuenta de que me lleva a la ducha.
Abre la llave y deja caer el agua sobre nosotros. Me abraza y me besa, luego enjabona mi cuerpo y yo me siento algo intimidado. Actúa como si yo le encantara tanto que hace cada segundo tan especial que se le hacen cortos los momentos conmigo.

Nos duchamos y ya se empieza a hacer de noche.
Suena el teléfono de Ben y es Wiliam.
-Hola. -Contesta Ben el teléfono. -Oh claro, si. Los veo allá.
-¿Qué dijo? -Pregunto yo.
-Era Wiliam quiere vernos con Martín en el Pool Bar.
-Oh, genial.

Llamo a mi casa y le digo a mi hermana que llegaré un poco tarde, Ben y yo nos arreglamos y nos vamos al Pool Bar.

Al entrar están los dos ahí sentados. A quién engaño se ven hermosos.
Ben y yo estamos bien y los dos que solían acosarme terminaron juntos; esto suena gracioso pero no dejo de pensar que esto me hace sentir la perra más deseada de Little Rock.

Nos sentamos en la mesa y ellos piden unas cervezas. Yo enciendo un cigarrillo y nos pasamos una noche de risas y besos. Martín y Wiliam se ven muy felices estando juntos pero les falta mucho por vivir y conocerse.