..Como un esclavo..

VIII

Me parece que aun recuerdos algunos dias antes de todo aquello, pero solo son cosas, cuando esa noche mi reina me pidio limpiar aquel desastre no pense q me demoraria tanto, cuando llegue a su cuarto pude ver solo una mancha de sangre enorme en la alfombra, admito q no es facíl de sacar, por mucho q lo intentara se me hizo dificíl, muchas veces miraba la puerta de roble, con miedo a que ella entrara y no viera mi progreso.

Ante todo eso me preguntaba donde se encontraba del cadaver de aquel esclavo, y me pregunte si mi señora también comia mounstros, pero descarte eso de inmediato al recordar el enorme repudio que sentia ella del asunto sobre todo lo que le rodeara, incluyendome.

Quizas no se me haria raro si algún dia viera su reflejo y se odiace, aunque pensandolo por un momento me rei y pense "Vaya persona mas egocentrica!". Era claro que esa mujer se adoraba, descubri muy recientemente sus sadicos deseos de ser reina y poner a todo el mundo de cabeza en un sin fin de muerte apasionada provocada por sus manos tan finas.

Era claro que era una locura pensar que ella fuera la hermana mayor del asunto, pero tengo entendido que su familia no confia mucho en ella, estuve aprendiendo de ella, claro que en tontal silencio, recordar mi mano y esa mancha de sangre que cubria el paño era desastrozo. Me habia quedado con el pañuelo de esa princesa tan hermosa, si Frisk.

Se que es malo para mi haberme enamorado de una persona de tan alto rango, pero aveces me gustaba imaginar que todo ese cariño que le sentia era de cierta manera correpondido, todo por mis ilusiones vagas de pensar en ella de una manera totalmente sentimental, sus sonrisas y su presencia, me hacia sentir especial, me gustaba pensar de igual manera que se vestia para mi.

Mientras aun seguia restregando aquella alfombra con algo de cansancio, pensaba en toda estas cosas, habia durado un tiempo en el que no pensaba en otra cosa que sobrevivir, mi hermano y la princesa Frisk. Tres cosas sin duda esenciales para mi..

Mi señora llego de inmediato a la habitación donde me encontraba y allí en la penumbra me miro desde su altura, se veia mas que grande en ese momento, se agacho y miro el mantel por un tiempo, algo aterrado (con justas razones) segui limpiando con algo mas de esfuerzo. Ella me volteo a mirar mientras golpeaba mi craneo delicadamente con su dedo indice, todas estas acciones con sinonimos de torpesa. Segui, pero un poco mas tenso que antes, ya que al sentir sus dedos rozarme por primera vez acompañados con aquellos golpecitos se me hizo de lo mas aterrador.

-. Aveces eres muy gallina.

Menciono susurrando sin dejar de mirarme, luego miro la mancha de sangre en el suelo.

-. Es muy dificil quitar la sangre?

Pregunto, no dije nada solo segui limpiando en silencio sin desviar la mirada a la mujer aterradora que se encontraba al lado mio. En un pequeño lapso me dio una palmada fuerte en la nuca haciendo que la mirara presipitado.

-. No me diras nada?

Me dijo, le mire de reojo por un momento, viendo su pelo desaliniado y ella ya bañada oliendo a flores, a lo que supuse de inmediato que era su jabon, se encontraba en toalla, agachada mirandome con ese mismo mirar rojizo.

-. Si lo es.

Volvi a mi lavor como era normal, pero ella no dejo de golpearme con su fino dedo, acciones tan inofensivas por parte de ella me hacian sentir algo confuso, segui limpiando sin dejar atras mi miedo. Suspiro y luego se levanto tan pronto como se me hizo gracioso, me senti nuevamente aterrado.

-. Dejalo así, busca mi ropa Sans.

Me llamo nuevamente por mi nombre, al escucharlo se me hacia incomodo por parte de ella, esas palabras resonaban en mi cabeza, me levante y alce mi mirar al mismo tiempo, mire sus curvas ahora pronunciadas, dejo caer la toalla y pude ver su desnudo cuerpo, grandes cenos, hermosas caderas y una cintura fenomenal. Me quede de pie.

-.Mi pijama para dormir.

Asenti, y me devolvi hacia la puerta donde dejo su pijama, me dio señales de que me fuera y me  fui.