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Era bien temprano por la mañana cuando Kokichi había decidido madrugar para ir al patio de entrenamiento para relajarse antes de que oficialmente empezara su día, hoy por fin empezaba su primer entrenamiento presencial. Aunque físicamente no lo demostrara, se encontraba bastante emocionado por aprender a pelear cuerpo a cuerpo. El chico se sentó en las gradas después de estirarse un poco, mirando el cielo matutino con un par de nubes en él, el fresco viento acariciaba su rostro con delicadeza y había tanto silencio que de vez en cuando podía escuchar a los pájaros cantar. Suspiró, de verdad era un escenario tranquilizador, uno al que podría acostumbrarse fácilmente.
— Veo que madrugaste — escuchó una voz familiar acercarse, el chico giró su cabeza en dirección al dueño de esa voz. Noritoshi se acercaba a él con paso tranquilo y su uniforme deportivo — ¿Qué haces aquí tan temprano? — preguntó amablemente una vez estuvo a su lado, Kokichi miró de nuevo al cielo, tratando de encontrarle forma a la nube que estaba pasando.
— Quise venir a apreciar el cielo un rato, es muy lindo — musitó, Noritoshi levantó las cejas un poco sorprendido por su respuesta, más no hizo ningún comentario y solo tomó asiento a su lado, imitándolo y mirando el cielo también. Para él en realidad el cielo no tenía nada de especial, pero empatizando con su compañero, entendía que tal vez para él era algo increíble de ver — ¿Y tu qué? ¿Es tu turno de vigilarme? — preguntó Kokichi mirándolo de reojo, con una voz calmada, sin una pizca de hostilidad en ella salvo solo curiosidad.
— En realidad todos te vigilamos al mismo tiempo — confesó honesto — Pero esta vez no es el caso, solo vine a calentar antes de empezar a entrenar, Utahime-sensei nos pidió que fuéramos suaves contigo hasta que te adaptes a nuestro ritmo de pelea — Kokichi asintió y murmuró un "Ya veo..." — Lo bueno es que eres alguien que aprende rápido, pronto nos alcanzarás — intentó alentarlo a su manera, Kokichi no dijo nada casi ignorándolo. El chico de las coletas se mordió la lengua, no sabiendo si su comentario le incomodaba o no, e incluso tenía una duda que rondaba por su mente desde hacía varios días, pero no sabía cómo formularla y tenía miedo de ofender a su compañero de alguna u otra forma.
— Suéltalo.
— ¿Eh? — preguntó Noritoshi confundido.
— Pasé mucho tiempo observándolos a través de una pantalla, quisiera o no, aprendí sus mañas — Kokichi señaló la pierna de su compañero — Empiezas a mover la pierna inquieto cuando tienes dudas — el chico bajó la mirada y efectivamente la estaba moviendo. Carraspeo un poco, tratando de encontrar las palabras adecuadas para formular su pregunta, sin querer sonar grosero o hiriente.
— Pues verás, ahora que tu...estas aquí — empezó lentamente — ¿Hay algo que deseas hacer? — Kokichi guardó silencio unos instantes, digiriendo la pregunta y analizándola, el chico mantuvo su mirada en el cielo azul. Por unos momentos Noritoshi creyó que no iba a contestar a su pregunta y no quería insistir, él comprendía si la pregunta le incomodaba. Sin embargo, el pelinegro decidió hablar por fin.
— Quiero ser feliz y aprovechar mi vida al máximo, así sea con pequeños detalles como tomar el sol o salir a caminar, ya con ello siento que estoy viviendo mi mejor momento — confesó suave — Quiero pasar más tiempo con ustedes, y también hay... hay alguien con quien quiero estar — pronunció recordando a la peliazul de sus sueños, Noritoshi lo miró con una sonrisa.
— ¿Ah, si? ¿Puedo adivinar quién es? — Kokichi apoyó su codo sobre su rodilla y posó su cara en su mano, dándole una mirada despreocupada, rozando el desinterés.
— Puedes intentarlo si quieres, aunque no lo adivinarás — dijo encogiéndose de hombros.
— Es Miwa — los ojos de Kokichi se abrieron de par en par, su rostro tornándose visiblemente rojo, sorprendido.
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Dream || Mechamiwa
Romance❝- Bueno, no me importa incluso si eres un dulce mentiroso -❞ ❝- Bueno, no me importa porque te haré creer -❞ ❝Sueño cuando me miras de esa manera, siento que eres mía. Un sueño que me hace querer volver a dormir. Un sueño tan lindo, ese eres tú❞ ...