𝑽𝑶𝑺- 𝑹𝒖𝒔𝒉𝒆𝒓𝒌𝒊𝒏𝒈

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NARRADOR

Maia salió del baño con un buzo y un joggin de Thomas puesto, él la esperaba en el otro lado de la puerta de y correspondió al abrazo cuando ella se lanzó hacia sus brazos

—perdón... no tenía a nadie más—se disculpó la rubia

—ya te dije que no dudes en llamarme cuando pasen estas cosas Mai, no quiero que te pase algo y quedarme pensando que pude
ayudarte.—él acarició su cabello—No me lo perdonaría

—gracias por todo Thomi—Thomas bufó cansado de que le agradeciera por todo—ya sé que no te gusta pero... bueno da igual, te la bancas que no te vas a morir por eso

Thomas soltó una pequeña risa y tomó delicadamente el mentón de Maia analizando su rostro, tenía un círculo rojo inflamado cerca de su labio justo en la zona donde se encontraba partido y medio sangrando. Rusher pasó su dedo por la zona inflamada y Maia hizo una mueca de dolor

—vení vamos a curar eso

Él la tomó de la mano delicadamente y la llevó hasta el sofá del living, Maia prendió la tele mientras Thomas fue por el botiquín y abrió la aplicación de Spotify encontrandose con el perfil del morocho. Sonrió al ver que tenía guardada su playlist y le dio al "play",  Everything I Wanted comenzó a reproducirse y se acomodó en el sofá de piernas cruzadas como un indio

—no sé mucho de medicina pero creo que podré con esto—rió Thomas sentandose a su lado y dejando la pequeña caja encima de la mesita

—hay que limpiar la herida y aplicarle bálsamo cicatrizante nada más—explicó Maia, Thomas la miró con el ceño fruncido—hacía skate con mi hermano, teníamos que llevar al menos un botiquín en la mochila por si acaso

—eso es mejor idea de la que tenía yo pensada—él rió mientras vertía el líquido en el algodón

—¿qué pensaste vos cabeza loca?

—que eras tremenda bardera de pequeña—Maia le pegó suavemento en el brazo y los dos soltaron una riza

Thomas acercó el algodón con cuidado y lo posó encima del corte, Maia hizo una mueca y apretó su rodilla cuando sintió como escocía este

—ya está princesita—se burló Thomas aplicando el bálsamo cicatrizante

—¿a quien le decís vos princesita? Pelotudo

—pará, te pongo un mote cariñoso y te enfadas, no hay quien entienda a las pibas—siguió burlándose

Maia agarró un cogín y se lo lanzó en cambio Thomas lo esquivó levantándose yendo a guardar el botiquín, ella se levantó y caminó hasta la encimera de la cocina donde había dejado su celular

Era inservible, la pantalla estaba rota a pequeños trozos y ya ni encendía, no supo ni como logró llamar a Thomas. Esta vez la pelea había sido más intensa que otras veces y se sabía solo con ver su camiseta rasgada por las mangas y el cuello

—no te preocupes por el celular—habló Thomas posicionandose a su lado—el Duko tiene como tres Samsung que no usa y le van regalando, te da uno sin problema—rodeó los hombros de la rubia con su brazo izquierdo y le sonrió, Maia giró la cabeza hacia él