Una taza de té por la tarde.

Rosas

Jajaja pues yo pienso que si Kara y Lena hubieran terminado en una relación en la serie serían cómo estás viejitas, fastidiado a todo el mundo con su perfecto amor 😍

Además así de mayores como están aquí tengo muchas más confianza de describirlas a ellas como sexualmente activas porque ya no les importa mucho de lo que nos preocupa a los jóvenes, solo viven el momento, sin más, que lo disfruten.

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Kara despierta sintiendo su cuerpo relajado, la cama de Lena es de una calidad muy superior.

Hoy es lunes y como Lucy les dijo, los resultados están desde el sábado, sin embargo, a la doctora le tocaban sus días libres así que la pareja decidió esperar a que ella volviera para la interpretación, pues fue quien las revisó.

-Buenos días amor- susurra en el oído de su novia que duerme a su lado.

La señora Luthor sonríe para después estirarse debajo de las cobijas.

La señora Zorel le da un beso en la mejilla, ese es su breve saludo antes de caminar al baño por sus dientes, no le faltan muchos aún solo los colmillos superiores. Esta es su nueva rutina en estos días, mientras ella usa el baño, Lena ordena el desayuno para ambas, después intercambian, Kara pone la mesa en lo que su amada se prepara para el dia. Listas las dos, esperan con tranquilidad en el desayunador teniendo charlas ligeras hasta que entra el chef con su comida.

La rubia podría acostumbrarse a esto, es una buena vida.

Desayunan, luego la señora Zorel reposa en su silla viendo entre tanto a la señora Luthor leyendo el periódico, solo verla ahí, le alegra la mañana, aunque no puede evitar preguntarse ciertas cosas dadas sus conversaciones recientes en la terraza.

-¿Oye estás emocionada por que hoy nos dan los resultados?

-¡Oh sí! No tienes idea de la cantidad de cosas en las que he pensado- dice la señora Luthor con una sonrisa pícara, incluso deja el periódico sobre la mesa-. Estoy indecisa, sobre quien de nosotros comerá primero, espero ser yo- afirma entrecerrando los ojos, al tiempo que su boca hace un puchero coqueto.

Zorel, se lame los labios dejando salir una risa corta y profunda, sin embargo, hay algunas cosas en su mente.

Tiene que ver con el hecho de lo invasivo que podría ser el dildo para su amada, que tuvo problemas durante el sexo en su juventud pero ella quiere hacerla sentir bien y aunque de momento no hagan nada con el, no quiere evitar el tema, eventualmente llegarán ahí si quieren experimentar, así que habrá que tratarlo para no toparse de frente con eso en el futuro.

-Lena, sé que te incomoda mucho la penetración y si no quieres hacerlo nunca, estoy bien con eso. No quiero que pienses que estés obligada a hacerlo, sin embargo, si lo quieres intentar en algún momento, creo que tú y yo debemos empezar a trabajar sobre eso, independientemente de lo que nos digan hoy.

La sonrisa de la señora Luthor se desvanece en ese instante, poco a poco se va retrayendo en sí misma hasta que vuelve a mirar a la rubia, que ve una gran claridad en sus ojos.

-Quiero hacerlo, quiero hacerlo contigo, no quiero que nada se interponga entre nosotros, ni mi pasado, ni lo que tuve que pasar- se sincera Lena-. Quiero entregarme por completo a ti Kara.

La rubia se siente honrada por lo que amada está entregándole, así que ahora que han terminado su desayuno, la toma de la mano llevándola nuevamente a la cama.

-Avisame si quieres que me detenga- es lo único que le dice.

Puede sentir como la señora Luthor se tensa conforme se acuestan en la clásica posición del misionero, la señora Zorel sube sobre ella con cuidado, tienen poca ropa, solo su pijama, hace tiempo que perdieron el interés en la ropa interior. Sus piernas tiemblan mientras las abre, Kara se instala intentando no ponerla más nerviosa. Una vez que está sobre ella, Luthor la abraza enterrando sus uñas en su espalda asustada por revivir amargos temores en esa misma posición, pero ahora no tiene porque tener miedo, su novia a diferencia de los demás, no va a lastimarla.