Parte 22/Celoso.

846 78 15
                                    

·Perdón por tardar en publicar partes de este libro·

Narra Elsa.

Hiccup habló un largo rato con la chica, un largo rato de verdad.

Me sentía de alguna forma algo incómoda y molesta. No se porqué rogaba que se valla ya.

- Ahora vuelvo.- Dije.

Hiccup me miró y la chica le siguió hablando por lo que volvió a mirarla.

Fuí al baño y me miré al espejo.

¿Que me pasaba? ¿Porqué estaba tan molesta?

Salí de allí y no encontré a Hiccup. Mierda. Yo ya quiero irme de aquí.

Alguien me tomó del brazo.

Era ese chico. ¡Mierda! ¿Tenía que ser ese chico?

- Hola preciosa.- Sonrió.

- Hola.- Le dije sonriendo.

¿Sonriendo? Sonriendo. ¿Me interesa que sea enemigo se Hiccup?

No.

Me invitó a bailar y yo acentí.

Su nombre, era Pitch. El enemigo de Hiccup. El que me saca de mi amargada noche.

Al rato después me encontré con la cabellera castaña de Hiccup.

- ¿Podemos irnos? - Preguntó en un tono molesto acercandoce a mi oido ignorando que Pitch estaba ahí.

- Ahora no...- Rogé sonriente.

Quería pasarla bien, bailando con Pitch.

O poniendo celoso a Hiccup.

Ya no sé que hago.

- Ya vámonos.- volvió a decir.

- ¿Que? ¿Acaso esa chica te dejó por otro? - Le regañé - ¡Yo no quiero irme! -

Hiccup se molestó.

¿Pude haber dicho algo mas estúpido? Paresco la celosa del año.

- Dejala estar conmigo, Hiccup. Y vé con tu amiga.- Dijo Pitch.

Bueno, no quería que se fuera solo quería...

¿¡Como rayos lo voy a poner celoso con su estúpido enemigo?!

Hiccup por poco no lo desnucó de un puñetazo, ya que noté como cerró sus manos con fuerza.

- ¡Vuelvete tu sola! ¡Yo me largo! - Gritó caminando para la gran puerta de salida.

¿Feliz Elsa? Lograste poner celoso a Hiccup.

¡Claro que no! En primer lugar, le pedí ser su amiga y ahora le estoy dando celos todo porque yo tengo celos.

¡No! Él se divirtía, entonces yo también. La pasé toda la noche con Pitch.

[...]

Cuando volví al hotel, no sentí ruido alguno, me dispuce a hacerme un café.

Me fijé en el cuarto de Astrid. Dormía tranquilamente.

Me propuce a abrir el cuarto de Hiccup, no estaba.

¿NO ESTABA? ¿QUE? ¿A DONDE RAYOS SE FUÉ?

Justo en ese momento entró el buscado.

- ¿En donde estabas? - Pregunté susurrando para que Astrid no se levantara.

- ¿Importa? -

No, no importa.

Okey si importa.

"En el odio hay Amor" HiccelsaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora