"En el odio hay Amor" Hiccelsa

Parte 3/Me siento segura contigo/

Narra Elsa.

Pasaron unas semanas...

— ¡Elsa! Esta noche mis padres no estarán. ¿Quieres venir a dormir?— Me preguntó Astrid muy entuciarmada. Yo y ella nos habíamos echo grandes amigas.

— Si, claro. Yo te aviso cualquier cosa — Dije sonriendo.

Por la noche...Entré, estaba Hiccup  acostado en el sillón con el televisor prendido y usando el celular. Él me saludó levantando una mano, yo lo saludé igual y siguió usando su celular.

Astrid me invitó a su habitación. Era muy grande y muy hermosa. Estubimos charlando por un largo rato.

— ¿Que van a querer de cenar? — Preguntó Hiccup asomado de la puerta.

Me reí.

—¿Que? ¿Tu cosinas? — Le pregunté riendo.

Astrid rió.

— Oh, ya van a ver como las sorprendo — Dijo Hiccup y se fué.

— Si, claro — Dijo Astrid riendo.
Un rato después Hiccup nos gritó que ya estaba la cena. Cuando bajamos vimos que eran tallarines. ¿Pero que? Pff.
— ¿Y? — Dijo Hiccup.
Lo miré. Alcé una ceja.
— Lo encargaste. ¿Sierto?
— Sí.  — Me afirmó desepcionado.
Nos reímos.
Luego de cenar nos decidiamos con Astrid que pelicula ver.
—¿De amor? — Dije.
— No, ¿de comedia? — Dijo Astrid.
— Pues hay de amor, comedia, acción, terror... ¿Que vemos? — Le dije.
— Descarten el terror — Dijo Hiccup llendoce.
— ¿Y porqué? — Le preguntamos.
Él se frenó.
— Porque no quiero que vallan llorando a mi habitación por miedo.— Dijo Hiccup.
— ¿Disculpa? ¿Miedo? ¿Nosotras? Claro que no.
— ¿No? Pués pruevenlon. —
— Claro que lo haremos. —
— Como quieran — Dijo y se fué.
¡Uhg!.Con Astrid pucimos una de terror y la vimos.
Al terminar estaba todo apagado. Temblábamos de miedo. Subimos las escualeras lentamente... Arriba también estaba todo apagado. Hasta que apareció algo negro.
— ¡Bu! — Gritó.
Yo y Astrid gritamos de miedo. Hasta que el idiota se sacó la manta de su cabeza. Era el tarado de Hiccup.
— ¡Eres un idiota! — Le grité.
Él rió y se fué a su habitación.
—¡Ahg! — Se quejó Astrid.— Vamos a dormir.
Estabamos en la habitación . Con la luz prendida. Y la puerta abierta... Un rato después alguien entró de golpe.
— Astrid prengunta mama si... — Le interrumpieron nuestros gritos a Hiccup haciendo que él pegara un salto y gritara.
— ¿Por que rayos estan gritando?! — Dijo alterado.
— ¡Deja de hacer eso Hiccup! — Le dijo Astrid.
— ¿Porque? ¿Tienen miedo? — Nos reganó riendo.
— Claro que no. — Le dije cruzando los brazos.
Él rió.
— En fin, mamá me llamó y pregunta si mañana van de la abuela. — Le dijo.
— Dile que sí — Contestó Astrid.
— Claro — dijo Hiccup y se fué.

Unas hora después nos acostamos, apagamos la luz con mucho miedo y tratabamos de dormir. Pero no podíamos.
— Tengo miedo — Admití susurrando.
— Yo también. Quiero a mi hermano. — Dijo Astrid mas asustada que yo.
Reí.
— ¿Y si vamos con él? — Me preguntó.
— ¿Estas loca? Hay de demostrarle que no tenemos miedo. — Le dije.
— Tienes razón. — Me contestó segura.
Aunque lo pensamos por un minuto.
— Vamos — Dijimos las dos asustadas.
Nos asomamos por la puerta  y vimos que no había nadie. Fuimos corriendo a la habitación de Hiccup, él tenía la puerta habierta. Pasamos sin hacer ruido. Ya me había arrepetido de venir con Hiccup. Aunque tenía miedo. Lo admito.
Prendimos la luz y vimos que Hiccup estaba dormido. Él tenía una cama grande y estaba acorrucado en un lado. Se veía tierno.
— Hiccup... — Dijo Astrid susurrandole.
Él despertó.
— ¿Que sucede? — Dijo entre dormido y se voltió a mirarnos con los ojos casi serrados.
— No podemos dormir.  — Le dijo Astrid.
— ¿Porque? — Dijo Hiccup con voz de dormido y apenas habiendo los ojos.
— Tenemos mie... bueno... ya sabes... estamos asustadas — Dijo Astrid.
Él rió dormido.
— ¿Podemos quedarnos aquí? — Le preguntó Astrid.
— ¿Que?! — Le dije a Astrid.
Él volvió a reir.
— Como quieran. — Dijo Hiccup voltiandoce a un lado nuevamente.
¿QUE? No. Me negaba a dormir en una misma cama que Hiccup.
Astrid sonrió y se acostó al lado de su hermano. Yo creí que Hiccup nos sacaría a patadas. Es...  ¡UHG!. Es... un gran hermano...  Sobreprotector.
—Yo no voy a dormir aquí. — Dije quejandome y me voltié cruzando los brazos.
— Cuidado. — Dijo Hiccup.  Me voltié y lo miré. Él estaba con los ojos serrados en un lado de la cama.
— Tal vez la chica de la pelicula aparesca atrás de la puerta.— Terminó.
Gruñi.
— Vamos Elsa, no quiero volver allá solas. — Me suplico Astrid.
— ¡UGH! — Me quejé. — De acuerdo. —
Solo fuí y me acosté al lado de Astrid. No quería pero tampocoquería dormir sola. Supuce que hiba a ser igual pero de algún modo el miedo se fué y comenzé a sentirme segura. ¿Segura con él? ¿Pero que? ... En fin... unos minutos después logre dormirme.
Al otro día me desperté y noté que Astrid estaba al lado mío. Hiccup no estaba. Me levanté, y baje abajo. 
Entonces fuí a la cocina, no había nadie... la puerta de la heladera estaba habierta y de pronto se serró y apareció Hiccup. Grité del susto haciendo que el sobresaltara.
— ¡Deja de hacer eso! —  Me quejé alterada.
—  ¡Tu eres la que esta gritando! — 
—  ¡Porque tu cara me asusta! —  Le regañe.
—  Ami me asustan tus gritos. —  Me regañó.
Lo fulminé con la mirada.
— En fin, dile a Astrid que se levante a desayunar, y cambiencen asi vamos de la abuela.
— ¿Vamos? - Alcé una ceja.
—  Sí, como estabas aquí supuce que irías.—  Me dijo sacando tres tazas.
— ¿A donde? — Pregunté desconcentrada.
—  De la abuela. — Me repitió.
—  Deja de decirle "De la abuela" es tu abuela no la mía.— Le dije.
Se quedó mirandome.
—  Es lo mismo. —  Dijo y siguió haciendo el desayuno.
— ¿Que pasa?—  Preguntó Astrid media dormida.
— Nada hermanita, ya esta el desayuno —  Dijo Hiccup divertido.
Alce una ceja. ¿Porque es tan sobreprotector o tan buen hermano? Cada vez me sorprende mas.
Desayunamos...
—  Vistancen tenemos que ir de la abue...—  Pensó dos minutos —  ¿De nuestra abuela? — Alsó una ceja.
Acentí con la cabeza.
Nos fuimos a cambiar hasta que fuimos de su abuela. Llegamos y era una casa enorme. Estaban los padres de Astrid ya allí. Todos me trataron muy bien. Antes de cenar me quedé viendo unas decoraciones hermosas de su casa hasta que encontré unas fotografías, en una de ellas estaba Astrid, Hiccup y alguien mas aunque no sabia quien era.
—  ¿Quien es ella? — Le pregunté a Hiccup señalando la chica, él se voltió y miro la foto. De pronto su sonrisa pasó de divertido y feliz a triste. No se porque sabía que pregunté algo malo.
— Es mi otra hermana — Dijo rascandoce la nuca.
Alcé una ceja sorprendida.
Él me miro algo triste.
—  Luego te digo, no es el mejor momento para hablar de eso. — Me dijo medio decaido —  Vén, vamos a cenar. — 
Cenamos y vi que Hiccup seguía triste, sabía que algo había pasado con esa chica. ¿Su hermana? ¿Porqué Astrid no me habló de ella? Supongo que es algo personal de familia.