Narra Elsa.
Pasaron unas semanas y decidimos salir con las chicas a una fiesta.
Nos divertimos un largo rato.
A Anna la invitó a bailar Hiro. Ella hiso para atrás pero yo la empujé y se fué con él.
A Astrid la invitó el mismo chico de antes y a Mer la invitó Jack.
Yo y Punzi nos quedamos bailando.
- Hola preciosa. - Le dijo alguien a Punzi.
- Hola. - Le respondió algo sonrojada.
- ¿Como te llamas? - Le preguntó.
- Rapunzel. -
- Hermoso nombre, yo me llamo Flynn. ¿Te gustaría bailar conmigo? - - Me encantaría Flynn pero lo siento estoy con mo amiga y no la voy a dejar sola. - Dijo, justo cuando le hiba a decir que se valla con él.
- Flynn ¿Viste a Hiro? - Dijo Hiccup mirando para todas partes hasta que vió a Hiro con Anna y sonrió.
- Olvidalo. - Miró a Flynn.
- ¿Se conocen? - Preguntó Punzi.
- Claro, Hiccup iba a mi escuela con su hermana. - Le respondió Flynn.
Hiccup me miró, yo lo miré y él torció la cabeza. Yo le alcé las cejas y me reí.
- Punzi ve a bailar no te preocupes por mí, ustedes vallan. -
- ¿Segura? - Me preguntó.
Acentí con la cabeza.
- No te preocupes, yo cuido de que Elsa no haga nada malo. - Dijo Hiccup regañandome.
- Si...Me imagino. - Me reí
Punzi rió.
- Bueno pero no se encadenen de vuelta. - Nos regaño riendo y se fué.
- ¿Que es lo malo que puedo hacer? - Le pregunté.
- No sé, la última vez tomaste demaciado. - Me regaño riendo.
- Si, por tu culpa. - Me cruzé de brazos y me reí.
Él me miró.
- ¿Bailas? - Me preguntó.
- Claro. - Le sonreí.
Nos divertimos un largo rato, la pasaba muy bien con Hiccup.
Un ratito después me dijo que ya venía y yo lo esperé.
- Hola preciosa. - Me dijo Hans acercandoce a mí.
- ¿Que quieres? - Me enojé. Pude notar que estaba completamente ebrio.
- ¿Sabias que eres hermosa? - Me dijo y se acercó mucho a mí.
- ¡Alejate! - Le grité.
- ¿Que pasa? - Dijo Hiccup y cuando yo miré hacia él Hans se encimó a mí y me besó.
- ¡Largate! - Le grité y lo empujé.
- ¿O que? - Me dijo desafiantemente ebrio acercandoce nuevamente sin casi poder hablar.
- Mejor ya vete Hans. - Le dijo Hiccup y se interpuso.
Hans levantó la mirada mariado.
- Ah... - Se rió. - Tu eres el niño malo. - Se echó a reir como loco.
Hiccup se enfadó e intentó ir hacia él pero yo lo detube.
- Déjalo, vamonos. - Le dije mientras él miraba enojado a Hans y lo llevé hasta afuera.
(...)
- Yo me voy a casa. - Le dije.
- Vamos, te acompaño. - Me sonrió.
- De acuerdo. - Le respondí sonriendo.
Cuando llegamos a mi casa lo invité a pasar.
- ¿No hay nadie? - Me susurró.
- No, no hay nadie. - Le susurré y me reí.
- ¿Te gustan los pochoclos? - Le pregunté.
- Mmmm... - Dijo.
- Salados...- Dijimos al mismo tiempo y nos reímos.
- Ven. - Fuimos a la cosina, preparé todo y comenzé a hacer los pochoclos.
- Ahora vuelvo. - Le dije mientras caminaba. - Cuida esto. -
- ¿Que? ¿Yo y una olla con fuego? ¿Estas loca? - Me dijo y yo me reí.
- Solo son dos minutos. - Me fuí hasta arriba.
Narra Hiccup.
Bueno... Solo es una olla, no creo que pase nada malo. Nunca cocine en mi vida ni hice algo como esto, no tengo ni idea de como hacer de comer y menos pochoclos.
Me asusté al sentir una exploción. Miré para todos lados y no había nada cuando se sintió otra exploción, la cuál se escuchaba dentro de la olla.
Me aserqué y le quité la tapa de curioso. Al ver que no había nada la hiba a tapar nuevamente cuando algo que explotó me golpió la cara. Me quejé y tiré la tapa al suelo. ¿Que rayos? ¡Estas cosas explotan!
- ¡Elsa! - Grité y me asusté al ver como comenzaron a explotar y volar para todas partes los pochoclos. Me tiré al piso para agarrar la tapa.
Narra Elsa.
Bajé hasta abajo al sentir un grito de Hiccup. Cuando entré a la cosina lo vi tirado al suelo, él alsó la tapa y tapó la olla.
- ¿¡Porque destapaste la olla!? - Le dije confundida con ganas de reir.
- Bueno...- Me dijo levantandoce. - Te dije que no te fueras. Sucede que estas cosas explotan...- Me dijo alterado y yo me eché a reír.
- ¡Pues si! - Le regañe riendo.
- No fue para nada gracioso. - Se cruzó de brazos.
- Sí, si lo fué. - Dije riendo.
- Bueno sí, pero no es mi culpa que no sepa hacer esto. - Dijo riendo.
Cuando terminé de hacer los pochoclos. Claro que los hice yo... Nos sentamos en el sillón, prendimos la televisión y mirábamos mientras comíamos.
- Eres muy mal cosinero. - Le regañe recordando y riendo.
- Y tu eres mala. - Se quejó y yo me reí.
Un rato después...
- Ya tengo que irme. - Me dijo.
- De acuerdo...-
Nos paramos antes de salir afuera porque él se echo a reir.
- ¿De que te ries? - Le pregunté sonriendo.
- Tengo algo en tu contra. - Me dijo con una sonrisa malvada. - Eres mala actora. -
Cruzé los brazos.
- Bueno pero al menos tus amigos se lo creyeron ¿No? - Dije riendo.
- No... - Me regaño.
- Si, si se lo creyeron. Además yo terminé contigo ¿Porque no me creerían? - Le regañe.
El se rió satastico.
- Graciosa. - Me sonrió satasticamente. - Aunque yo tendría que haber terminado contigo. -
- ¿Que? - Le alsé las cejas.
- Que yo tenía que terminar contigo. - Rió.
- Si claro, como digas Chef. - Le regañe enojada.
- Como digas actora. - Me regaño.
- Mal cocinero. - Hice una mueca.
- Mal actriz. - Se rió.
- Inútil. - Me enojé.
- Inútil. - Me devolvió.
- Te odio. - Me acerqué enojada.
- Y yo a tí. - Se acercó sonriendo.
- ¡Yo te odio más! - Le dije y me acerqué mas de lo que pretendía.
Él miró mis labios y yo los sullos. Me puse muy nerviosa y mi respiración se aceleró.
Entonces ambos nos acercamos rápidamente y nos comenzamos a besar como si los dos lo deseáramos.
Me agarró de la cintura atrallendome mas a él y yo rodeé mis brazos en su cuello, y comenzé a acariciarle el cabello atralléndolo mas a mi. No podía creer lo que estaba haciendo, aunque esta vez no estaba ebria ni él... ni yo.
Pero aún así ninguno de los dos detuvo el beso, era un beso muy apacionado, como si todo dependiera de ello. De alguna forma no quería que terminara, saboreaba aquellos labios de él que posiblemente había besado millones de veces aquella noche que no recuerdo.
Hiccup caminó hacia atrás sin dejar de besarme hasta que chocamos contra la puerta, rodeé mis piernas en su cadera y él comenzó a besar mi cuello. Luego subió sus labios a los mios y nos besamos de nuevo muy apacionadamente.
No sabía lo que estaba haciendo y creo que ni él lo sabía, por eso tenía que parar, estaba muy confundida.
- Esto esta mal... - Dije con sus labios acariciando los mios.
- Si... - Me dijo... Habrí los ojos y su rostro era mas confundido que el mio.
Él se alejo un poco de mí y se rascó la nuca.
- Hiccup...- Le dije y me miró. - ¿Podemos ser amigos? - Le dije aunque me dolió decirlo. Pero me sentía muy confundida al igual que él.
- De acuerdo. - Me dijo con un rostro muy confundido.
Se generó un silencio enorme por un rato.
- Creo que ya tengo que irme.- Dijo.
- Bueno... -
- Adiós Elsa. - Me saludó, abrió la puerta y se fué.
¿Habria echo bien? Yo no estoy segura de nada, y me siento muy confundida.
Subí hasta mi habitación y me recosté en la cama. Tenía millones de cosas en las que pensar aunque un rato después me quedé dormida.
Había olvidado lo tarde que era. Solo supuce que lo mejor era ser su amiga.
ESTÁS LEYENDO
"En el odio hay Amor" Hiccelsa
RomansaEs otro año en la escuela...Algunas cosas cambian Elsa, Cariñosa con algunos, no es tímida, no cree en el amor, y un poco rebelde con algunos. Hiccup, rebelde, popular, no cree en el amor, gracioso y es cariñoso con algunos.