Presente

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POV GRAHAM

Abrí los ojos despertando a un día excepcionalmente soleado, los rayos bañaban toda la habitación dándole una tonalidad cálida, muy agradable.
sin embargo, ni el sol, ni su calidez ni las tonalidades más agradables del mundo se comparaban con el cuerpo que dormitaba casi sobre el mío.

Joe y yo estábamos cada vez mas juntos, ya casi nunca se iba de casa, me gustaba mucho volver y encontrarlo, y cuándo nuestros horarios no coincidían me sentía absolutamente vacío.

Había sido una noche agitada, y no habíamos dormido mucho, realmente estaba cansado, pero dormir en esa mañana me parecía una perdida de tiempo, quería acariciarlo, sentirlo conmigo, tan tranquilo, tan tierno.

Él abrió los ojos poco después y como siempre me regaló la sonrisa más sencilla y maravillosa de todas.

-buen día-dijo besando mi mejilla

-hola, mi amor

-¿me mirabas?-preguntó apoyando su cabeza en mi hombro

-un poco

-debería haber imaginado que eras un psicópata

-¿si? ¿porque?

-sos lindo, sos rico, sos inteligente, elegante, buen padre...claro que algo malo tenías

-¿sabes que tengo de malo?

él negó con la cabeza y me miró

-el aliento a la mañana-le dije antes de soplar sobre su boca. él se rió y golpeó suavemente mi pecho

-ni siquiera eso, realmente te odio

volvió a acostarse como estaba y yo volví a acariciarlo, era tan sereno todo que parecía un sueño

-Grah, olvidé algo-dijo. para ese momento yo había vuelto a dormitar, pero abrí los ojos de nuevo

-¿que sucede?

-vienen mis padres a visitarme y me gustaría que te conocieran-dijo acariciando mi pecho

Aquéllo fue como un baldazo de agua helada; hacía meses que salíamos y en realidad no sería nada extraño conocer a su familia, pero supongo que entré en pánico en ese momento.

-¿tus padres?

-si, ya sabes, un hombre a quién yo llamo papá y una mujer a quién...

-no puedo

-pero ni siquiera te dije cuando, Graham-dijo levantando la cabeza para mirarme

-no importa, sabes que trabajo mucho y después veo a Simón

-¿no paras a almorzar? es solo un almuerzo

-Joe lo lamento, no tengo tiempo para...

-para mí, no tenés tiempo para mí-dijo, aunque calmado, mientras se levantaba de la cama con una agilidad sorprendente

estaba desnudo pero empezó a vestirse con rapidez, subiendo su ropa interior para luego ponerse los jeans.

-no es así, Joe, quedate...

-¿como es? cuando me pediste que fuera con vos a la fiesta de tus padres ni siquiera lo dudé, pero cuándo yo pido algo...

-estamos yendo demasiado rápido

-cuándo te conviene

-Joe, no te vayas

Estaba enojado como nunca, se vestía tan rápido,con tanta violencia.
se sentó en la cama para ponerse los zapatos; intenté tocarlo pero no me lo permitió.

-creo...-dijo. su voz se quebró en ese punto, al mirarlo noté que lloraba-va a ser mejor que lo dejemos, Grah

-¿porque no tengo tiempo para almorzar con tus padres?

-porque no me querés en tu vida, y no querés estar en la mía, estamos perdiendo el tiempo

-Joe, solo me parece un poco pronto, yo a los padres de Damon...

-Damon-dijo con un tono extraño, como si ese nombre fuese algo dañino en su lengua

-Damon es el papá de Simón

-sé quién es Damon, y realmente lamento no cubrir ni un poco el agujero que te dejó, realmente lo intenté, pero no puedo, nadie puede

-Joe, estás mezclando todo, solo quiero ir más lento

-no te pedí casamiento, mis padres me llamaron para saber como estaba y les dije que feliz, porque estaba saliendo con un tipo genial, uno realmente bueno, ningún idiota, solo quería que vieran lo genial que eras y lo...contento que estaba, no esperaba que te dieran su bendición ni que te los ganes...quería que...-se detuvo a limpiarse las lagrimas y tomar algo de aire-ni siquiera sé que quería. me voy

-Joe, lo siento...

-cuidate

se puso de pie, tomó su campera y se fue de la habitación.

Me levanté y fui detrás suyo, no quería dejarlo ir.
Lo alcance en la sala. estaba listo para irse pero seguia allí, estaba llorando mucho.

-cariño, solo pido esperar un poco, en un tiempo, si todo va bien, vamos a ir a visitarlos ¿de dónde son tus padres? puedo llevarte a dónde sea...

-solo quería-dijo con los ojos mojados pero mucha violencia en la voz-que aceptaras almorzar conmigo y las personas más importantes de mi vida por media hora...

-solo creo que...

-una maldita media hora de tu tiempo

Me quedé en silencio, estaba muy asustado, no quería perderlo pero tampoco arriesgarme a nada, no quería tomar ningún riesgo, me sentía atrapado.

-te amo-dijo entonces

lo miré, él me mantenía la mirada como siempre,pero no era un hombre risueño ni irónico, parecía derrotado.

-no me importa qué no almorcemos con mis padres, solo quiero...no callarme más, Graham, te amo ¿vos me amas?

lo hacía, pero no podía decírselo, sentía una fuerte presión en el pecho, me sudaban las manos y la garganta se me cerraba

-yo...

-¿me amas, Graham?

-deberías...necesitamos espacio y...

-cuidate-dijo y antes de empezar a llorar nuevamente me entregó las llaves que le había hecho, y se fue de casa.