Cap XVI

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Somos Familia

"La familia es lo más valioso que existe en cada uno de nosotros, el amor de una familia es tan grande como un cielo precioso"

Pasó media luna y Vaegon, Saera, Valarr, Maegon y Aelor nunca le quitaron los ojos encima a Aemond en ningún momento, tanto el público como en privado, ya de por sí antes era difícil acercarse a ella ahora sería casi imposible que ellos lo aprobarán como el compañero de vida de su preciosa hermana y tía, era cierto que todavía era joven, los sentimientos a esa edad pueden cambiar fácilmente, pero quería demostrar que él era el digno hombre para estar junto a la inalcanzable Naekara Targaryen.

Daeron comenzó a pasar más tiempo con Maegon e incluso compartían casi los mismos gustos por algunos de los libros, Aegon y Valarr se convirtieron en compañeros de travesuras y hasta iban a las tabernas de la Ciudad para divertirse "un poco", Aelor ahora se había convertido en el niñero de sus hermanos y primos porque no importaba que tan tranquilos o desastrosos que fueran esos cuatro, siempre se metían en problemas drásticos.

Pronto sería el Decimoctavo Día con el Nombre de Helaena y ella decidió celebrarlo otra vez en Dragonstone por lo que sería una celebración privada solo para la familia, Viserys no tenía las fuerzas para poder ir por lo que Alicent iría por él y Otto la acompañaría, Vaegon no quería ir, pero sus hermanas le insistieron tanto que no tuvo otra opción que aceptar a regañadientes.

Para Maegon y Aelor sería una oportunidad de poder reclamar un dragón y demostrar que son dignos hombres de portar el apellido Targaryen, Saera ya estaba orgullosa de sus hijos y deseaba más que todo su felicidad, pero ellos querían ser los más grandes jinetes de dragones como su familia y antepasados.

{Dragonstone}

Los preparativos ya casi estaban completos y los invitados ya estaban llegando, Naekara, Vaegon, Saera, Valarr, Aegon, Aemond y Daeron iban en lomos de sus respectivos dragones mientras que Maegon, Aelor, Alicent y Otto iban en un barco, los más emocionados por la llegada de su familia de Desembarco del Rey eran Helaena y Daemon aunque no lo pareciera.

Rhaenyra estaba feliz por ver a su familia aunque le daba pesar que su padre no pudiera ir debido a su enfermedad, Daemon no podía esperar más tiempo en abrazar a su adorada tía y eso incluía a Rhaenys, pero antes de poder tan siquiera mover un musculo vieron a sus dos tíos perdidos.

Vaegon al ver a Rhaenys, a Daemon y a Rhaenyra no espero ni un minuto más en abrir su boca, sus difuntos padres y hermanos no pudieron controlar su carácter y su lengua, entonces sus sobrinos tampoco ya que no le llegaban ni a la punta de los talones y eso que solo era su humilde opinión.

Vaegon Targaryen-- Daemon se parece a Alyssa, según los rumores, eres igual de loco que ella.. Rhaenys eres exactamente igual a mi tía Jocelyn y espero que no hayas heredado lo bruto de Aemon... Rhaenyra es igual a Daella, también espero que no seas como ella. — Confesó descaradamente.

Saera Targaryen-- Dioses, por favor demen paciencia porque si me dan fuerzas lo mato. — Susurró con sus dedos masajeando su cien.

Naekara Targaryen-- Por favor, disculpen a mi hermano, él no sabe controlar su lengua en algunas ocasiones.

Daemon Targaryen-- Bueno, ya sé de dónde herederaste esa parte.

Rhaenyra Targaryen-- De todos modos, sean bienvenidos a Dragonstone. — Dijo muy irónica.

Antes de poder emitir otras palabras entre ellos, Helaena venía corriendo a toda velocidad y saltó hacia los brazos de su tía y esta la recibió con muchos besos y mimos, Alicent no podía creer lo que estaba viendo, su propia hija prefería más a Nae que a ella lo cual lo tomo como algo indignate, además de que le rompió más el corazón ya que lo estaba viviendo día a día con sus otros hijos.

La Sangre LlamaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora