☆ Until our next life ☆ {Seo Changbin y tú}

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<< ALICE >>

Las acciones de Changbin, en su mayoría, siempre están de la mano con sentimientos cálidos.

A pesar de que llegó tarde, se despertó temprano para prepararme el desayuno antes irme al evento.

"Qué mejor que un desayuno preparado por tu tierno y amoroso esposo para que vayas con la mejor energía al escenario."

—Ve con cuidado, yo llevaré a Haerin a la escuela. Mucho éxito a ti y a las chicas. Te amo— cita besando mi frente y luego dejando un lento beso sobre mis labios.

Changbin es esa persona que no sabías que necesitabas, hasta que llega a tu vida. Te envuelve en sus brazos y te dice que todo estará bien, que siempre te cuidará y protegerá. Así es él.

Su mentalidad positiva y lista para resolver cualquier problema, me resulta cautivadora. Un hombre que tenga la capacidad para resolver cualquier problema, altercado o malentendido; es algo grandioso.

....

—Buenos días, ¿descansaron y comieron bien?— le pregunto a todo el equipo al ingresar al estudio.

—Todo perfectamente en orden, fue una gran idea ensayar temprano ayer; nos dió tiempo de poder llegar a nuestros hogares y relajarnos un poco antes de las presentaciones — responde amablemente la líder del grupo de bailarinas.

—Me alegra escuchar eso— admito haciendo una leve inclinación para ir hacia el camerino con las chicas.

Al ingresar, veo a Kei llorando por lo bajo, y Minchae junto a Seojin; intentando calmarla.

—¿Qué ocurre?— interrogo acercándome hacia ella. Pero ninguna responde — Pregunté algo — repito más demandante y suspiran.

—Kei dice que su vestuario le aprieta y que eso le incomoda —explica Seojin brevemente.

—¡ES PORQUÉ COMÍ DE MÁS!— exclama Kei llorando más fuerte— ¡COMÍ MUCHOS CARBOIDRATOS AYER EN LA NOCHE POR LOS NERVIOS!. ¡PERDÓN!— se disculpa abrazándome por la cintura con fuerza.

—No pasa nada, Kei, tranquila — acaricio su cabello lentamente — No hay nada de malo, es normal que estés nerviosa. Resolveremos esto y listo. Solo respira, no quiero que salgas al escenario con tus ojos rojos— consuelo con un tono de voz suave y veo como asiente limpiando rápidamente sus lágrimas.

—¿Qué haremos entonces?— pregunta Minchae y relamo mis labios pensando en alguna alternativa.

—Déjenmen eso a mi, ustedes vayan a que las preparen — pido y asienten obedientes.

Salgo del camerino y busco al staff a cargo de nuestro vestuario. Al divisar al equipo, me acerco dispuesta a explicarle la situación.

—Disculpen, una de mis chicas ha tenido problemas con su vestuario, ¿tienen algunos de repuesto? — pregunto rezando por obtener una respuesta afirmativa.

—Por supuesto. Acompáñeme, por favor — pide la jefa del equipo y la sigo hacia los vestidores— ¿Qué ocurrió exactamente?, ¿el vestuario se rompió?.

—Amaneció un poco hinchada debido a que ayer comió carboidratos gracias a los nervios — explico brevemente y hace un sonido de entender.

—¿Fue Kei, verdad?— pregunta, y en su voz distingo un tono burlesco.

—Correcto, ¿cómo lo supo?— interrogo viendo su perfil fijamente.

—Esta mañana la vimos muy hinchada, parecía una papa. Me veía venir esto— suelta una risita y siento como mis dedos comienzan a hormiguear por las pizcas de enojo que comenzaban a crearse dentro de mi— Si continua teniendo estos "ataques de nervios", terminará como un elefante ¿no crees?.