☆ Until our next life ☆ {Seo Changbin y tú}

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<< ALICE >>

—¿Ya estás lista, bebé?— le pregunto a Haerin y afirma de buen humor— ¿A donde iremos?— indago divertida esperando su respuesta.

—¡Vamos de compras!— expresa haciendo un bailecito de celebración y rio levemente.

—Perfecto. Entonces no perdamos más tiempo— sentencio encendiendo el auto y reproduciendo nuestra playlist.

—Ah, te tengo una gran noticia— menciono y veo por el retrovisor como ella observaba hacia mi intrigada.

—¿Qué noticia?.

—¡Los tíos Bang y la bebé Soonyoung; ya están en Corea!!— revelo y suelta un pequeño grito lleno de emoción.

—¡¿Así que podré ver a la bebé?!— cuestiona juntando sus manos emocionada y sonrío levemente para asentir— ¡SII!.

—Algunas compras que haremos hoy, serán para la bebé y Norah— indico y hace un sonido de afirmación.

—¿Puedo ayudarte a escoger lo que compraremos?— pregunta inocentemente.

—Por supuesto que sí, cariño— afirmo y escucho como festeja para ella— Cuando acabemos con las compras, pasaremos por papá para ir a casa de los tíos ¿ok?.

—Okey, mamá.

Durante el trayecto, Haerin jugaba con su peluche favorito y yo me mantenía concentrada conduciendo. Pero también pensando en cosas que necesita si o sí Norah para esta nueva etapa de su vida.

De todas las chicas, soy la única que sabe perfectamente como es esta estapa. Y aunque sé que no todas la vivimos de igual manera, tengo el conocimiento necesario para saber que tips darle a Norah, y así no permitir que toda esta faceta sea estresante para ella y Christopher.

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Paseando por las tiendas vimos mucha ropita linda para la bebé. Pero aunque por una parte fuimos a por ropa, también íbamos tras artículos indispensables para los primeros años de la bebé.

Al principio, Haerin me ayudó a elegir y buscar algunas cosas; pero luego se tomó un receso. No fue hasta que escuché como su pancita comenzó a decirme en mil idiomas que estaba hambrienta.

—Pagamos esto y vamos a comer algo, ¿de acuerdo?— indago y asiente silenciosamente para luego continuar dibujando en su cuaderno.

Minutos después salimos de la tienda y nos dirijimos hacia los diferentes puestos de comida que yacían dentro del centro comercial. Pero al llegar, no cabía ni una sola persona más allí.

—Haerin, sé que tienes hambre; pero nos tardaremos en comer si nos quedamos aquí. ¿Te parece si comemos fuera?.

—Puedo aguantar un poco más, mami— asegura y frunzo mis labios. No me gusta que espere mucho para comer. Luego podría tener dolores estomacales.

De camino al auto decidí llamar a Changbin— ¿Amor, podrías comprarnos algo de comer a mi y a Haerin?. Íbamos a comer en el centro comercial, pero habían demasiadas personas.

—Espera...¿no han comido nada desde hace cinco horas?— cuestiona con un tono incrédulo y preocupado.

—Haerin merendó: yo le empaqué unas frutas y galletas — aclaro y puedo imaginar como su semblante se relaja.

—Bien; no te preocupes, cariño. Antes de que lleguen, iré por comida.

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