Capitulo 0

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Ahí estaba esa exquisita criatura adornando su palacio. Durmiendo inocentemente en el césped. Piel lechosa como la nieve bañada en pecas que podía ver en esos hombros descubiertos. Esa piel se veía tan suave, sus manos cosquilleaban por tocar tan perfecta piel. Esos rizos verdes se perdían entre la hierba de el mismo color, que brillaba con brillo propio. Esa cara de ángel y hoyuelos pecosos y labios tan apetecibles que hacían pasar su lengua por los suyos propios.

Si, aquí estaba otra vez contemplando tan bello ser, aprovechado las pequeñas oportunidades para toparse
"Casualmente" con el Omega 15 años menor que el. No solo eso, este chico formaba parte de las concubinas de su hijo. El ya tenía su propio Harem, pero aún así deseaba para el este Omega. No sabía si era por su juventud o belleza sin igual. Pero desde que lo vio en medio de la noche nadando en un estanque de su palacio no pudo dejar de pensar en el. Era como droga para el y su alfa.

De repente esos grandes y hermosos ojos verdes se abrieron a percibir su presencia y miraron a su dirección.

- Majestad - Ahí estaba esa voz melodiosa y aterciopelada, el pequeño se incorporó acomodando su fino vestido verde pastel dejando ver un poco sus delgados tobillos el cual el alfa puro ronroneo por tal vista.
- Lo siento me quede dormido.- Acomodo un rizo detrás de su oreja de forma tímida.

- Eres libre de pasear todo lo que quieras, ya te lo dije - Había sido tanto los encuentros entre ellos que él pecoso tenía un poco de confianza con el cenizo. A pesar de la fama que tenía el mayor de ser un despiadado, con el era amable. Siempre tenían agradables conversaciones y el emperador pedía su compañía.

- Se lo agradesco mucho... es solo que este lugar es tan hermoso y pacífico que me quede dormido ....- El alfa extendió su mano para ayudar al Omega a pararse. Ese simple y corto tacto hizo regocijar al emperador.
- Muchas gracias su majestad- Agradeció por la ayuda dada, retirando suavemente sus manos de las contrarias.

- Tus manos son tan suaves - Tomo nuevamente las pequeñas manos de el menor. Jugando con sus dedos.

- S-supongo que es porque nunca e echo un trabajo doméstico. - Eso era cierto, como hijo de una buena familia Izuku jamas tuvo que trabajar, solo concentrase en sus estudios. A los Omega de buena familia y cercana a la corona se le permitía aprender a leer, escribir, por lo menos lo esencial.
También podían aprender a dibujar, tocar un instrumento, todo para aumentar su valía. Para así más alfas estuvieran interesados.

Izuku Hitoshi fue recomendado por pertenecer a una prestigiosa familia para ser un concubino, solo los hijos y hijas de familias distinguidas se le permitía tal honor. Ya que podían uno de ellos cargar con el futuro heredero.

- Tan perfectas y finas - Llevo una mano del menor a su nariz para oler tan delicioso aroma a flores después de una lluvia. Levantó su vista para mirar al pequeño y dejar un beso en sus delgados nudillos. Acto que hizo ruborizar hasta las orejas al Omega.

- M-mi emperador....yo....- El cenizo cayó con su mano, esos jugosos labios. Tomó esa pequeña cintura y lo atrajo hacia el pegándolo a sus músculos. El peliverde por auto reflejo poso su mano en el gran pectoral de su majestad. - Yo...no debería....-Pero antes de que siguiera sus labios rojos fueron reclamados por en emperador.

Comenzando un beso fogoso lleno de ruido. Donde la boca de el Omega era atacada y poseída con habilidad por el cenizo. El beso le arrebataba el aire y hacía sus pies temblar perdiendo fuerzas. Con solo un beso sintió un cosquilleo en su vientre e invocando a su Omega interno que solo pedía ser tomado por ese gran y poderoso alfa.
(Cachorros quiero sus cachorros) Escuchó decir.

Con ese simple tacto ya lo tenía echo un desastre pues no era por nada pero el alfa ya tenía sus años de experiencia y sabía donde y cómo tocar a un Omega para provocarlo. Además ayudaba mucho que el emperador a pesar de ser mayor, los años solo hacían mejorarlo.

La gran mano de el alfa bajó a su pomposo trasero apretándolo con saña y sacando gemidos al menor. Que solo se aferraba con fuerza al de ojos rubís.

- ¡Ahh~! Mi...señor ...-Solo podía retorcerse en sus brazos y era algo que le encantaba a Katsuki importándole poco si el Omega era un concubino de su hijo. O si el ya tenía a su emperatriz.

- Quiero que te preparen para mi esta noche Izuku, a partir de ahora serás mi concubina - Soltó sus labios ya hinchados para no decir si no ordenar.
Ya están arto de tener tan bello ser y no hacerlo suyo ya después se encargaría de su hijo.

- P-pero mi señor ..yo.

- Nada, soy el emperador y lo que yo diga es ley. - Nuevamente unió sus labios devorándolos con hambre.
- Te espero esta noche Deku - Susurró en su oído rompiendo el beso.

Izuku cayó al suelo. Simplemente no se podía sostener, el alfa con solo un beso le robo toda la fuerza. Se llevó las manos a su cara tratando de controlarse pues estaba seguro que si no lo hacia podía entrar en celo.

Trato de decirse a sí mismo que esto era una mala idea. Después de todo era una concubina de el príncipe Karem. El futuro emperador, y si se hacía su favorito y le daba un hijo podía convertirse en emperatriz. Aunque debía admitir que el alfa menor no le atraía nada, no se comparaba con lo imponente de su padre y el gran líder que el era. Que lastima que el actual emperador no tuviera un hijo digno.

Ahí fue cuando una idea se le cruzó en la cabeza. Karem no era digno de el título como emperador, no, siquiera era alfa puro. Y eso Katsuki lo sabía, que pasaría si el cenizo tuviera otra oportunidad, qué tal si tuviera otro hijo con otro Omega fértil y Virgen capas de darle un cachorro que fuera un alfa puro. ¡Que tal si fuera el!

Eso opacaría por demás a la actual emperatriz, ya que está se presume que quedó estéril. Si le daba al alfa lo que tanto quería dejaría aún lado a la actual emperatriz y si le daba un hijo, un cachorro alfa puro el sería el próximo emperador y el se convertiría en emperatriz.

Después de todo esa era su plan desde el inicio. Le gustaba más la idea de ser el Omega del actual emperador, aunque es verdad que sería más desafiante, pero el con sus encantos tendría a ese fuerte alfa a su merced.
Y si movía bien sus cartas sería la próxima emperatriz desplazando tanto a madre como hijo de él tituló.

Lo tendría todo, cumpliría si promesa, tendría riquezas, un importante título, y un apuesto emperador que complacería con gusto en la cama. Conocía los males que aquejaban al emperador con respecto a este tema y el estaría dispuesto a ayudarlo.

Estaba decidido dejaría aún lado al príncipe e iría por su padre. Después de todo Katsuki era mejor en todos los sentidos y se sabía mover mucho mejor, le atraía de sobre manera tanto el como su Omega. ¿Como sería estar con ese hombre? Se mojaba de tan solo pensarlo.

Si, definitivamente se convertiría en la nueva emperatriz de el emperador.
Y todo quien le estorbaba lo quitaría de su camino.


O si nueva historia.!!!
No se cual es mi fanatismo por hacer un Izuku malote.
Jaja.

Esta será una versión de mi historia que tengo en mi
One Shorts
( La nueva emperatriz)
Como pueden ver algunas cosas serán cambiadas y otras no. Lo que si no se cambiará son las personalidades de Izuku y Katsuki. Ya que me gustaron mucho.

Aquí veremos cómo es el camino de nuestro peliverde para subir al trono. Ya que tendrá más dificultades.

Espero y les guste.

Nos leemos 👀luego 👋

La concubina [ Katsudeku] Omegaverse Donde viven las historias. Descúbrelo ahora