La concubina [ Katsudeku] Omegaverse

Capítulo 12 Festival de la fundacion parte 1

Pido muchos comentarios o si no un gorila les jalara las paltas 🦧
¡LAS PATAS LES DIGO!

Si lo hacen bien como la ultima vez tendrán más actualizaciones de esta bella historia. A si que todo depende de ustedes para que yo me ponga a escribir ✍️

Sin más disfruten su lecturas 📖🙈🌺

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Las burbujas flotaban en el baño por una tina jabonosa y perfumada, pero nada era mejor que el olor natural de el pecoso, ese olor a flores frescas inundaba su nariz. El alfa disfrutando de ese aroma mientras tallaba la delgada espalda de el omega.

Ambos, tanto alfa y omega se bañaban juntos antes de que el sol saliera por completo, después de ciertas travesuras más en la misma tina, pues las manos de su majestad Katsuki recorrían cada centímetro tocando cada hermosa peca. En especial las de sus hombros, que hacían lucir tan sexi a su sirena. Mientras tanto Izuku descansaba en el gran pectoral de el mayor, eran como dos grandes almohadas donde le estaba tomando gusto recostar su cabeza.

El omega suspiraba de lo cómodo que estaba en los brazos de el alfa, por lo cual provocaba que sus feromonas salieran de lo dichoso que se sentía. Estaría más feliz si el mayor dejara salir su olor a vino, pues sabía que lo contenía, pero entendía que si lo hacía pues estaba seguro que entraría en un estado parecido a su celó como ya a sucedido muchas veces apenas el alfa puro deja salir sus feromonas.

Y su cuerpo ya estaba más que plagado de marcas tanto de chupetones como de dientes y a pesar que no hubo penetración sus caderas le dolían. El emperador abusó y huso mucho de sus muslos, sin duda Katsuki tenía un fuerte apetito sexual.

Y el descubrió gracias a su señor que estaba igual o peor. Se había convertido en todo un pervertido, tan solo pensar en el rubio cosas sucias se le venían a la cabeza. Como ahora estaba en la tina sentado en el cenizo Justo tenía el pené flácido de el mayor entre sus sus nalgas y aunque estaba flácido se podía sentir su gran tamaño.

- No te comiences a emocionar sirena tenemos que empezar el día - Dejó un casto beso en el pecoso hombro, pues pudo sentir como el menor comenzaba a mover sus caderas entusiasmado por su falo. Y aunque el quería lo mismo no se la podían vivir follando. ¿Ho si? - Vamos ....- Tomo a Izuku entre sus brazos y lo levantó sacándolo de la tina ya limpio.

Ambos desnudos salieron de el baño y dejó al omega en la cama. Iba a tomar una toalla para secar al peliverde pero algo le llamó la atención.

Sus ojos se posaron en un baúl donde sobresalía un pedazo de tela que portaba el emblema real. Ante eso el alfa sonrió.

- Aun conservas esto - Fue hacia el baúl y tomó la prenda. Era su capa la que le había dado al pecoso la vez que se conocieron y lo cubrió con esta.
La prenda ya no tenía casi nada de su olor pero si mucha de el peliverde.
- A si que jugaste mucho con esto
¿No Deku? - Lo miro pícaro y el omega se coloro hasta las orejas.

- Y-yo....es que el olor de su majestad es muy b-Bueno - Desvió la mirada, le daba vergüenza ver a el alfa a los ojos al descubrir sus travesuras.

-Si te gusta tanto creo que puedo impregnarla de mis feromonas otras vez.

- ¡DE VERDAD! - Chillo de alegria tener una prenda de su señor y con feromonas frescas era un honor.

- Te daré todo lo que tu quieras Deku...- Se acercó a el joven sentado y tomó uno de sus rizos verdes.- Claro que tienes que darme algo a cambio - Sonrió mostrando sus afilados colmillos y sus rubís se fijaron en el pecho pecoso para luego viajar a la parte íntima de el omega. Lo cual Izuku por timidez cerró más sus piernas. Cuando el cenizo lo miraba a si se sentía como un conejito apuntó de ser devorado por un lobo. - A si que ¿Que me darás?