Red and black | Daryl Dixon

#34 ¿Conflicto o trato?

Me parecía raro toda esta situación. Tendremos un encuentro con el gobernador, cosa que hizo que mis alarmas saltaran al instante

No me fiaba una mierda de ese tío. Tendríamos que andar con mucho cuidado, aún que Andrea fuera quien lo organizó

Decidimos que la mejor opción era que Daryl, Hershel y yo acompañáramos a Rick. Decidí confiar en Michonne para que controlara a Merle, ella era una mujer fuerte e inteligente. Podría contra él sin problema

Y sobre todo necesitaba que mantuviera a Glenn quieto

La prisión no me preocupaba mucho, estaba en buenas manos

Lo que si me preocupaba más era que Hershel insistiera en venir. Es un hombre sabio y confío en su cabeza

Pero el gobernador era un tipo errático, no quería que el anciano saliera lastimado. Por ello decidí quedarme con él cuando llegamos al lugar

Era como un gran granero con grandes silos al lado. Estaba todo mejor cuidado de lo que esperaba, aún que la oxidación en los enormes barriles era notoria

—Tener cuidado, avisadme si necesitáis ayuda— le dije a Daryl tomándole de las mejillas para besarlo

Él sonrió, para rodear mi cintura y estrecharme contra él, profundizando el beso

—Lo mismo te digo zanahoria. Regresaremos rápido, no te preocupes

Revisarían la zona por si acaso era una trampa. Yo esperaría con Hershel por si acaso hay una emboscada, que no pillen al anciano solo

Rick y él comenzaron a inspectonar, saliendo de nuestra vista. Mientras tanto me apoyé en la puerta trasera del coche en el que vinieron Rick y Hershel

El hombre llevaba un rifle y yo mantenía mi mano en la cartuchera que mantenía guardada mi revolver

—¿Estás nerviosa?— preguntó mientras miraba alrededor

—¿Tu no? Vamos a reunirnos con un psicópata armado hasta los dientes y con un ejército. Demasiado relajada estoy

—Aun que me preocupe, creo que Rick puede llegar a algo con ese hombre. Aún que no sea la alianza de nuestros grupos

Espero que Hershel tenga razón. Esta situación me ponía los pelos de punta

Quería entrar ahí y arrancarle la cabeza a ese dejenerado. Pero debía calmarme, lo sé

Tras varios minutos decidí montar en el asiento del piloto cuando vi a Daryl acercarse con calma

Arranqué y lentamente dejé el coche al lado del gran granero

—Ya está dentro. Se ha reunido con Rick— informó Daryl cuando bajé la ventanilla de mi puerta

Ya no había vuelta atrás. Y lo que más saltaba mis alarmas era que vino solo

—No veo ningún coche— comentó el anciano mirando la carretera

—Esto no me gusta— dijo Daryl, estaba tan inquieto como yo —No apagues el motor

—No tenía pensado hacerlo— sonreí

Pero rápidamente fruncí el ceño y mis oídos se agudizaron cuando escuchamos las ruedas de un vehículo aproximándose

—Alguien viene

Salí del coche rápidamente desenfundando mi revolver, apuntando al coche que se había adentrado dentro del recinto

Frenó frente a nosotros, el conductor era un hombre, del asiento del copiloto salió Andrea y de atrás un hombre con gafas

Estaba claro que ese último no era un soldado. Parecía el típico sabelotodo