Freddy Fazbear's pizza

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Sabía que era un día exelente para buscar algún trabajo por ahí que sea correcto.
Apenas mandé mi solicitud a una pizzería dónde solo tengo que ver las cámaras de seguridad, pero también limpieza del lugar y otras cosas.
Tengo apenas 18 años y soy mujer, mi nombre es Charlie.
Apenas estoy intentando hacer ciertas cosas.
Miré por la ventana y una camioneta amarilla llegó justo enfrente de mi casa, entonces bajó un señor vestido de azul marino con unos pantalones color morado con líneas amarillas y una gorra naranja.
Entonces metió un sobre al buzón y se fue sin darse cuenta de que lo estaba observando.
Abrí la puerta y bajé las escaleras hasta llegar al pequeño pasillo y abrir la puerta de madera.
Abrí el portón del patio y abrí el buzón.
Era un sobre color amarillo con una etiqueta 🏷️ que decía Freddy's pizza, lo abrí y decía algo simple y bueno para mí.

Tu solicitud fue aceptada, se te informa que mañana debes estar en la pizzería a las 5:00pm para las preguntas que se te aran en el lugar.

Gracias.

Para Charlie.

Me quedé demasiado feliz y entré rápido a la casa antes de que la nieve siguiera congelado mis pies.
Dejé el sobre en la mesa y abrí el refrigerador para sacar una botella de vino y servirla en una copa.
Me senté en el sillón para tomar de la copa que sostenía de la mano y mirar el sobre, agarré un bolígrafo y firmé los papeles para el trabajo.
Al terminar metí los papeles en una carpeta, me acomodé en el sillón y miré asía la ventana con una sonrisa y con una copa en la mano.
Entonces me levanté y puse música para que toda la casa no se sintiera tan sola.

Abeces hay que disfrutar la vida de la forma en la que nos queramos sentir felices.

Entonces giré en círculos y miré a todos lados buscando algo adecuado para el trabajo.
Entonces miré una playera naranja y unos pantalones negros que quedaban genial al punto de vista de lo que se me pide.
Me fuí a mi abitacion dónde cerré la puerta con llave y me quité la ropa, mi cuerpo se reflejaba por la sombra y la luz del sol reflejando mi piel blanca y mi cuerpo delgado de una mujer.
Entonces me puse la ropa, primero la playera y me quedaba muy bien.
Después mi pantalón que la verdad era algo apretado pero quedaba excelente.
Al ponerme ambas cosas miré abajo de la cama y ahí estaban unos tenis rojos que apenas y me acuerdo de cuando los compré, fue hace demasiado tiempo, fue cuando salí con mi madre a salir de compras.
Pero la vida fue lo más corto que pude tener.
No hasta saber que mi madre ya no estaba a mi lado.
Entonces una lágrima salió y recorrió mi mejilla y todo por recordar aquellos días en los que era feliz.
Era la más feliz de todas las personas, hasta que me di cuenta que todo era una maldita mentira.

¿Pero para que causarme más dolor recordando lo que yo no tendré?

Entonces me puse los tenis y salí de mi abitacion para ir directo a la cocina, dónde haría algo de comer antes de irme.
Encendí la estufa y después de unos minutos la cazuela en la llama alta.
Serví dos panes con jamón y queso amarillo para hacer una torta, la calidad del ambiente era lo que más me gusta de mi hogar.

Agarré un plato y serví el pan para después poner el jitomate y otras cosas más.
Por último agarré un cuchillo y lo parti en dos.

Cuando termine dejé el plato en la barra y tomé mi suéter por el frío y salí de casa sin hacer ni decir nada más.
Cerré la puerta con llave y caminé por la nieve que estaba ante mis pies, y la que caía tan despacio del cielo gris que me rodeaba como el ambiente que sostenía a mi alrededor, al igual que algunos animales pequeños ya muertos por el frío, algunos estaban completamente congelados, casi transparente por el hielo a su alrededor.
Parecían estatuas de hielo, pero creadas por la naturaleza.
La muerte abeces resulta ser la belleza que nos rodea a todos.
Cosa que no voy a negar que es tan hermoso, tanto que hasta mis ojos brillan ante esas cosas, abeces la muerte es algo que pensamos evitar, pero al final de cuentas vamos a morir.

Me quedé esperando en la parada durante unos minutos,
La nieve caía tan lento que hasta sentía estar rodeada de tantas cosas, el cielo gris y la luz del sol atravesado una pequeña nube, pareciendo que un ángel está apunto de caer como las estrellas en el cielo en la media noche brillando como la luna.
La belleza no siempre es hermosa por lo aterrador que puede ser.
Entonces miré la calle y a lo lejos veía el camión acercando más y más a dónde estaba.
Entonces me levanté y en cuanto llegó me subí y era hora de saber que estaba apunto de seguir mi camino.
Y después el camino de vuelta a casa.

FIVE NIGHTS AT FREDDY'S 1 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora