ONE

181 29 0
                                    

Había sido un día tan cansado pero imaginaba que su hermoso esposo estaba aún más cansado ya que estaba en casa con los niños.

Se apresuró en terminar de hacer sus reportes diarios, era contador en una empresa de entretenimiento que iba en ascenso así que el trabajo se acumulaba como espuma. No lo malinterpreten, amaba eso ya que significaba un mejor salario y por ende una mejor vida para su Omega y cachorros pero resultaba cansado también.

Dejo los reportes impresos y los archivo, también envío los correos con la información correspondiente al día a sus superiores con copia a su jefe. Con aquello listo hizo unas cosas más y luego se levantó de su asiento y estiró.

Vio en su escritorio la foto de su familia y eso le calentó el corazón, los amaba mucho.

Tomo su maletín y guardo sus cosas, cuando estuvo listo salió de la oficina y se despidió de algunos cuantos amigos y compañeros, le había prometido a su Jinnie que compraría helados para el fin de semana así que decidió que sería bueno pasar primero por el supermercado y de paso comprar fruta y otras cosa que sabía que faltaban en casa.

Bajo al estacionamiento para subir a su auto, dejo su maletín al lado, abrochó su cinturon y salió rumbo a su destino, hizo todo bastante rápido porque estaba ansioso por llegar a casa.

Cuando llegó a su departamento escucho música alegre. Vio a su esposo bailando con su cachorro, con su pequeño Yoongi quién se movía alegre y aplaudía. Mientras en su pecho estaba el pequeño Taehyung riendo, si no se equivocaba esa era la canción favorita de su Omega en el momento.

Cuando el Omega se dio cuenta que el los observaba sonrió. Se veía aún más hermoso, rizos castaños, mejillas ruborizadas al igual que aquellos labios rosados hinchados. Era precioso.

Desabrochó su saco y lo dejo en el perchero y soltó su corbata.

—Mira quién está allá, Yoonie— dijo el Omega a su cachorro de dos años y cuando se dio cuenta corrió emocionado hacia él y el lo tomó en brazos para alzarlo, darle una vuelta y como final besar sus mejillas regordetas.

—Papaaaaá— gritó emocionado su pequeño rayito de luz, Yoongi era un bebé lleno de energía, curioso, muy sonriente y bastante despierto, había obtenido la belleza de su padre Omega, era adorable como una masita.

—Hola, mi lindo gatito— dijo besando nuevamente las mejillas de su cachorro de dos añitos y se acercó a su Omega que cargaba al bebé de cuatro meses —Hola, mi amor— dijo y recibió un beso en los labios de su esposo.

Luego se agachó a besar a su bebé.

Amaba los días así en casa.

—Debes tener hambre, cocine hace un rato, ve a lavarte las manos y lava las de Yoonie, serviré la comida.

—Esta bien amor.

Con aquello dicho fue a su habitación con su hijo, lo dejo en la cama un momento y se quitó el saco y el cinturón, remango su camisa y abrió los primeros botones, se bañaría después de comer. Primero lavo sus manos y luego cargo a su hijo y lavo aquellas manitas regordetas. Seco las manitas del cachorro quien estaba muy alegre ese día, beso otra ves su mejillas.

Estaba tan agradecido con Jin por la familia tan hermosa que habían formado.

Aún recordaba el día en que le confeso sus sentimientos y como el omega avergonzado no supo que responder, tuvo que ver cómo Jin se iba antes a la universidad a estudiar  veterinaria y lo dejaba sin una respuesta. Lo vio meses después cuando llegó el chuseok y fue a ver a sus padres. Confesó que sentía lo mismo aunque no era tan apropiado que un Omega mayor este con un niño y es que el apenas tenía diecisiete así que le dijo que serían novios cuando el cumplirse dieciocho.

JUSTICE'S PATH • [KOOKJIN / KOOKNAM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora