11. Confesiones.

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*Pov Natasha*

El día de ayer fue espectacular, pasé un hermoso día con mi brujita, mis niños hermosos y mis sobrinos.

Hoy, me desperté entre los brazos de Wanda y me tocó ser la cuchara pequeña durante la noche. Me agarro tan fuerte que pensé que era otra pesadilla pero esas ideas se fueron al instante cuando se puso a besar mi cuello de manera fogosa, luego iba tanteando mi cuerpo con sus manos. Primero tocó mis pecho y los apretó suavemente, luego fue bajando hasta tocar mi abdomen metiendo su mano debajo del pijama. Me desperté envuelta en un fuego incontrolable, me di la vuelta bruscamente y veo a mi hermosa brujita dormida, miro su rostro tan calmado y me doy la vuelta para quedar en la misma posición que antes. Ella instantáneamente me vuelve a abrazar acercándome lo más posible a ella.

Me tuve que levantar temprano, ya que mis brujitos tienen clases. En este momento están desayunando unos ricos wafles con chocolate caliente en la mesa de la cocina. Wanda todavía sigue dormida, no quería despertarla, por eso le voy a dejar el desayuno preparado antes de llevar a nuestros bebés al colegio. Me dedicó a preparar su desayuno con una sonrisa cuando Billy y Tommy hacen un sonido extraño para que les preste atención, me doy la vuelta y los miro para que prosigan.

- ¡Mami!- dice Billy con su carita de yo no rompo un plato- podemos llevar a mamá para que nos acompañe al colegio- termina con su carita triste, es un gran actor, lo hace para convencerme y lo peor es que siempre funciona.

- ¡Por favor!- expresa Tommy con la misma expresión. Son idénticos a Wanda en esas expresiones, siempre consiguen lo que quieren.

No puedo decirles que no, así que suspiró y me dirijo a ellos.

- Voy a subir a preguntarle- digo negando con una sonrisa- ustedes terminen su desayuno y luego preparen sus cosas- expresó con autoridad.

Ellos me hacen el saludo militar para luego centrarse en sus desayunos. Sonrio por sus ocurrencias y me acerco para darles un beso en la cabeza a cada uno. Que rápido crecen, es como si hace unos meses atrás fueran bebés de nuevo. Sonrió y me dirijo hacia la habitación. Abro la puerta lentamente y veo una Wanda totalmente dormida. Me acercó despacio y al estar cerca de ella le doy un beso en el cachete.

- Hola amor, hora de levantarse- expreso susurrando en su oído.

- Mmmmm- dice girandose.

- ¡Amor!- llamó su atención- los niños quieren que los llevemos al colegio- digo de forma suave- ¿Quieres ir así aprovechas para verlo? Capaz y puedas reconocer algo- pregunto.

- ¡Voy!- grita una Wanda exaltada.

Sale rápidamente de la cama y se dirige al baño todavía dormida. Sonrió ante eso, creo que no se dio cuenta de mi presencia. Me quedo sentada en la cama esperando hasta que sale del baño envuelta en una toalla.

- ¡Natasha!- exclama dando un saltito.

- Amor, quiero saber tu respuesta- digo tratando de parecer calmada.

Utilizó toda mi fuerza de voluntad para no recorrer su hermoso cuerpo con mi mirada. Mi tácticas no funcionan, mi rostro se calienta furiosamente ante una imagen de Wanda totalmente desnuda y veo en su rostro vergüenza. Me levanto apresuradamente para no incomodarla y me dirijo a la puerta.

- Sí- dice llamando mi atención- voy con ustedes- expresa con una sonrisa. Asiento a sus palabras y salgo de la habitación.

Bajo nuevamente a la cocina y los niños ya no están. Espero unos 15 minutos y mis brujitos bajan arreglados y con sus cosas para el colegio.

- ¿Y mamá?- Pregunta Tommy.

- ¡Si! ¿Dónde está mamá?- vuelve a preguntar Billy- ¿No va a llevarnos contigo?- expresa triste y la cara de su hermano se contrae.

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