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•Conociendonos•

🩵

Kevin estaba aburrido en la habitación, cambiaba los canales ninguno le parecía entretenido, ya había visto su celular, no tenía ganas de ver alguna película solo quería salir de ahí.

Santiago salio del baño, ya era tarde pero ese día descansarian, se avento a la cama tomando su celular.

-Santiago, ya me aburrí - dijo aventandole la almohada pegandole en la cabeza.

-¿Quieres algo de comer? - pregunto volteando a verlo.

-Si, no hemos desayunado - dijo feliz pues quería salir de ahí.

-¿Que quieres que te traiga? - pregunto levantándose, Kevin frunció el ceño.

-No, yo quiero bajar, ya me aburrí aquí - dijo cruzándose de brazos.

-Pero no puedes...

No lo dejo hablar pues le había aventado otra almohada.

-Ya deja de aventarme las almohadas - se quejo regresandosela.

-Pero ¿si puedo bajar? - pregunto acomodando la almohada, Santiago negó.

-Andale, porfavor, ya no aguanto estar aquí - dijo desesperado jalando la playera del mayor, Santiago se hacia el fuerte realmente le costaba decir no.

-Porfavor - pidió jalando su brazo para que se acercara a el quedando... muy cerca.

-Ya te dije que no, te dijeron que tienes que descansar el pie - dijo tragando en seco por la cercanía entre ellos.

Kevin lo empujó, enojandose, Santiago se volvió acercar a él sentándose en el suelo.

-Ya no te enojes - dijo pero no recibió respuesta del menor, solo rodó los ojos.

-Bueno vamos - dijo levantándose del suelo.

-SI VAMOS - dijo emocionado.

Santiago le acerco las muletas, Kevin se acomodo levantándose de la cama, los dos caminaron hacia la puerta abriendo esta dejando pasar primero a Kevin cerrando la puerta tras de el.

Santiago lo seguía de serca por cualquier cosa el estaba ahí, ¿Por que le preocupaba de mas? Ni el sabía.

Llegaron al elevador Santiago oprimio el botón llamando al elevador pero este al parecer no funcionaba, volvió a oprimir mismo resultado.

-No sirve - dijo mirando a Kevin.

-No digas estupideces - dijo enfadado casi aventando las muletas.

Santiago camino hacia las escaleras, Kevin no podría bajar por ahí.

-¿Y ahora que hago? - pregunto Kevin haciendo puchero.

Santiago se quedó callado pensando un poco si sería buena idea, se acercó a Kevin quitando una de sus muletas sujetándolo.

-¿Que haces? - pregunto al ver que le quitaba las dos muletas.

-Vamos a bajar, no te vas a quedar aquí aburrido - dijo sin soltarlo.

Kevin se sorprendió viéndolo incrédulo, Santiago dejó las muletas en la pared para después posicionarse frente a Kevin.

-Ven te cargo de caballito - dijo dándole la espalda agachandose un poco, Kevin soltó una leve risa.

Kevin como pudo y con un poco de ayuda de Santiago dio un salto subiendo a la espalda de Santiago quien lo sostuvo de sus piernas, Kevin abrazo al mayor por el cuello para no resbalar.

-¿Así estas bien? - pregunto Santiago mirándolo de reojo.

-Si, esto es divertido - dijo moviendose un poco, Santiago río.