Chapter Nine:
Uniones forzadas✦
Después del emocionante torneo y que los príncipes Aegon y Aemir fueran atendidos, el salón principal del castillo estaba lleno de alegría y celebración. Nobles de todos los rincones de Westeros brindaban y se felicitaban mutuamente por los logros alcanzados en el torneo. En una tranquila esquina, Aemir y Helaena se encontraban junto a Baela y Rhaena, compartiendo momentos de intimidad y felicidad entre las felicitaciones de los presentes.
En otra parte del salón, Alicent se acercó a Aegon con una expresión severa en el rostro. Aegon, que estaba de pie con una copa en la mano, apenas la miró cuando ella comenzó a hablar.
—Aegon, me desobedeciste. Eso fue imprudente. No vuelvas a actuar de esa manera impulsiva —reclamó la reina con tono autoritario.
Aegon apenas le prestó atención, pareciendo distraído por la algarabía a su alrededor.
—No importa, madre —respondió con indiferencia, sin apartar la mirada de la multitud.
Alicent frunció el ceño, decidida a captar su atención.
—¿Escuchaste lo que anunció Viserys? —preguntó, esperando despertar su interés.
Aegon negó con la cabeza, mostrando poco interés en la conversación.
—No, ¿qué anunció? —inquirió, curioso pero sin demasiado entusiasmo.
—Te casarás con Lady Cassandra Baratheon —comunicó Alicent, manteniendo su rostro serio y firme.
Aegon dejó bruscamente su copa sobre la mesa, su expresión se endureció con evidente molestia.
—¿Casarme con una Baratheon? ¡Eso es una locura! —exclamó, su disgusto claramente visible en sus ojos y gestos.
Alicent se mantuvo firme, enfrentando las quejas y reclamos de Aegon.
—No hay nada que puedas hacer al respecto, Aegon —dijo con firmeza—. Viserys ya ha tomado su decisión.
Aegon continuó protestando, expresando su descontento y frustración ante la situación impuesta.
—¡Pero madre, no puedo casarme con alguien a quien apenas conozco Ni siquiera hemos hablado! Esto es absurdo. ¿Acaso mi opinión no cuenta?
Alicent suspiró, ante las quejas de su hijo
—Debes recordar que en nuestro linaje los matrimonios políticos son comunes. Es el deber de un príncipe cumplir con las decisiones de la corona.
Aegon se retiró, visiblemente disgustado, pero sin más opciones que aceptar la decisión de su padre se sentía tan frustrado que comenzó a beber como si no hubiera un mañana. Para él, la idea de casarse era terrible. Había logrado evitar el matrimonio con Helaena, pero con Cassandra no tendría la misma suerte, a menos que Cassandra tuviera un enamorado y decidiera huir con él. Aegon se fue de la fiesta, tambaleándose por los pasillos oscuros del castillo.
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𝐃𝐫𝐚𝐠𝐨𝐧 𝐁𝐥𝐨𝐨𝐝 ✦ 𝐇𝐞𝐥𝐚𝐞𝐧𝐚 𝐓𝐚𝐫𝐠𝐚𝐫𝐲𝐞𝐧
FanfictionEl dragón con sed de venganza despertará. ¿Podrá Aemir controlar su ira o caerá preso de la oscuridad que amenaza con consumirlo? ¿Será el mundo reducido a cenizas por el fuego de su ira? Adéntrate en la historia de Aemir Targaryen, primogénito del...