Lisa sorprendida por la llamada, ve la hora, y aún es temprano para marcharse y no puede dejar a su omega sola, sobre todo con Joy ahí, así que comienza a caminar como lobo enjaulado, dando círculos, y Rosé que se encuentra hablando con todos los que Francesca le presenta a su paso, Rosé siente una presión en el pecho, y sabe que es su alfa, la busca con la mirada hasta que la encuentra y ve como corta llamadas y vuelve a llamar, siente como su loba le pide ir con ella, discretamente toma un sorbo a la champagne que tenía en la mano y la regresa.
-Me disculpan un momento.-Dice la omega y todos sonríen amables asintiendo. Rosé va hacia su alfa y se para a su lado, mientras Lisa respira el aroma delicioso, ese aroma a avellana que tan fácil logra calmarla.
-Rosie.- Dice y se gira con unas lagrimas en los ojos, aunque Rosé no conocía nada de su pasado, sabia que no tenía familia, lo había visto en los periódicos, cuando resumían partes de su triste adolescencia y juventud hasta volverse adulta, y siente su loba preocuparse, ¿Y si las lágrimas son por Nayeon? Comienza a imaginar el peor escenario, donde Lisa llora por culpa de dejarla libre.
-¿Que pasa mi amor?- Dice temerosa la omega.
-Es Nayeon.- Dice y Rosé siente como comienza a escuchar a lo lejos la voz de Lisa, ¿sus peores miedos se vuelven reales? Se recarga en el barandal, y deja que su cuerpo expulse todo el alcohol que había ingerido en la noche, agradeció no fueron muchas, apenas logro beber dos copas.
-No es lo que piensas, pero tengo que irme.-Dice Lisa.
-No te puedo pedir que vengas conmigo- Lisa iba a continuar pero Rosé sin pensarlo habla.-Iré contigo.
-¿Estás segura?
-Si, vamos a despedirnos.- Dice Rosé, Lisa toma su mano, como pidiendo el apoyo de su omega, esa tranquilidad que todo alfa necesita de su omega y solo su omega puede dar, ambas emanan sus feromonas que las encierra en una burbuja, donde ambas se sienten protegidas y sienten que protegen, sus lobas conectándose.
-Francesca, el día de mañana nos veremos, no me siento bien.- Justifica la omega y la directora en su sabiduría sabe que algo pasa.
-Tranquila Rosie, nos vemos el día de mañana, espero puedan asistir.- Dice viéndolas a ambas como si imaginara que tendrían algún motivo para no presentarse.
-Aquí estaremos.- Habla Lisa, diciéndolo como una afirmación y la CEO asiente con una rostro comprensivo.
-Salgan por la puerta trasera es su primer evento como la modelo e imagen de YSL, no las dejarán avanzar sin que se vayan sobre ustedes.- Dice la CEO a las chicas y Rosé se toma del brazo de la alfa más fuerte, tratando de calmarla a ella y calmarse ella misma sin saber que es de lo que se va a enterar.
Salen del lugar como les indicaron, y suben a prisa a la limosina.-Nos llevas a Aux Deux Ecus.- Dice Lisa recargándose en el respaldo, y jala a la omega recargándola en su pecho mientras acaricia su espalda en círculos.
-¿Ahí te espera Nayeon?-Pregunta aunque tranquila pero nerviosa.
-No lo se amor, solo me citaron ahí, Sana, es su hermana menor.-Dice Lisa y a los minutos llegan al lugar, Lisa baja y ayuda a su omega a bajar.
-Lili, yo te espero en otra mesa, no quiero intervenir.- Dice Rosé aunque no quiere estar lejos de su alfa en ese momento quiere ser prudente.
-No Rosie, tu irás conmigo.-Dice Lisa segura, sin titubear y se adentran a la pequeña cafeteria en la hermosa Paris, sin siquiera notar como vestían, en lugar tan casual, toman asiento y piden una limonada, no sabían que les esperaba y preferían no alterarse.
A los minutos Lisa ve entrar a Sana, delgada, más de lo que la recordaba, se miraba la debilidad en su cuerpo, juro que entraba con otra chica, pensó las había visto hablar pero no era Nayeon.-Llegó.- Avisa Lisa y Rosé solo siente sus manos sudar.
-¿Ella es Nayeon?- Pregunta Rosé, sorprendida por el aspecto de la chica.
-No, ella es Sana.- Dice Lisa y se pone de pie para que Sana tome asiento.
-Buena noche Lisa.- Dice Sana como si estuviera cansada.
-Hola Sana, ¿dime que quieres?- Dice únicamente Lisa.
-Vaya, después de lo que le hiciste a mi hermana, ¿me hablas así?-Pregunta Sana molesta.
-Bueno, ¡no se que esperas de mi!
-Lisa, por favor déjame hablar, hasta que termine no me interrumpas, solo quiero decirte que tu provocaste la muerte de mi hermana, Nayeon estaba interesada en tu personalidad, en tu actitud a la vida, tu forma de ser, estaba embobada por Lalisa Manobal, hasta que conoció a Joy, ellas estaban, ellas estaban destinadas pero Nayeon te tenia tanto miedo,- Habla Sana haciendo cada vez más enojar a Lisa y la rubia toma su mano para
calmarla.
-Tenia miedo de tu reacción al saber su secreto, que la podías obligar a hacer, Joy trato de convencerla de irse juntas y de que ella se hacía cargo del,- Trata de continuar pero no encuentra las palabras para darle la siguiente información a la alfa y ve a la omega, que lleva la marca, claramente es de Lisa esa marca, ellas son pareja.
-¿Cual es tu nombre?- Pregunta Sana viendo a Rosé.-Roseanne Park, o Rosé.-Dice Rosé ofreciendo una tierna, amable y tímida sonrisa, sonrisa que incluso Sana se siente más tranquila de dejar a Luca por lo menos con ella.
-Mucho gusto, Sana.-Dice Sana devolviendo la sonrisa.
-Rosé, te quiero pedir un favor, yo, te lo pido de omega a omega.- Dice y Rosé asiente escuchando.
-Nayeon murió de pena, murió de tristeza al separarse de Joy, no llevaba su marca, pero ella de verdad la amaba, ellas se amaban, pero por favor Rosé, quiero, que aceptes lo que pedire.-Dice y Rosé asiente con las manos sudorosas.-Habla ya.- Dice Lisa en un tono seco y fastidiado, no queriendo escuchar más por la culpa que siente.
-Bien, tengo, estoy enferma de cancer.- Lisa se mueve incomoda, su boca pide decirle que eso no les incumbe, pero por algún motivo tiene que saber más.
-Me han dado menos de cuatro meses, mi hermana vivió todo lo que pudo hasta que tu cachorro nació, pero sin Joy, la depresión de que su cachorro naciera sin un alfa cercas, ella se dejó morir.-Sana, ¿De que hablas? ¿Que cachorro?- Pregunta Rosé.
-Del que tuvo Nayeon, Lisa es la madre.- Dice Sana y Lisa se levanta y Rosé al mismo tiempo.
-¿Tengo un cachorro? ¿Y porque no sabía?-casi grita la alfa y Rosé la toma para calmarla.
-¿Donde está el cachorro?- Pregunta Rosé con una voz calmada que tranquiliza a su alfa y hace sentir más segura a Sana.
-No lo quería hacer, que el cachorro viviera contigo Lisa, pero me enteré de que tenías una omega, ahora que la conozco se que mi sobrino, lo único que queda de mi hermana, de Nayeon es Luca, ella lo nombro, pero no lo pudo conocer la debilidad no lo permitió, y ahora yo tampoco tengo mucho tiempo de vida, Luca tiene dos años, vive conmigo y mi mejor amiga, por eso tengo la confianza de entregártelo a ti, Roseanne.- Cuando dice eso, ambas se quedan sorprendidas.
-Lisa, tienes una fama, que te has ganado bien, ustedes viven en otro país al otro lado del mundo, mi pequeño tiene que aprender a vivir contigo, porque yo ya no estaré para verlo crecer, ha crecido entre omegas por eso se que estará bien con Rosé.- Dice Sana y Rosé asiente entendiendo su punto y Lisa igual, entiende como se siente la joven omega.-Si, lo entiendo.- Dice Lisa
-¿Donde está el cachorro? ¿donde está Luca?- Pregunta Rosé preocupada al recordar que Sana entró sola y Sana se alegra de que se preocupe genuinamente por su sobrino, y Lisa de que se preocupe por su cachorro.
-Solo si ambas me juran, que se quedará Rosé con el, tu criaras a mi cachorrito, es solo un pequeño de dos años Rosé.- Dice casi rogando.
-Sana, de omega a omega, incluso si me separo de esta alfa, y sienta que muera por la separación, cuidare al cachorro como mío, y yo pelearé su custodia.- Dice Rosé, Sana asiente y ve a lisa esperando su promesa.
-Aunque es mi cachorro y no debería prometer nada, prometo que incluso si nos separamos, que tampoco puede pasar eso, Rosé cuidará al cachorro.- Dice Lisa y Sana más tranquila hace señas a la chica con la que entro después.
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La bella y la bestia (Chaelisa)
Fiksi PenggemarEsta no es la típica historia de una horrible bestia, que aprisiona a una bella joven porque su padre robó una rosa pensando en su bella hija, es la historia de una alfa que por el contrario es exquisita para la vista, y de una bella y dulce omega...