Hechizo De Amor ✧ KookTae

27:0 || Explicaciones

TaeHyung terminó de sanar las heridas de JungKook, ambos estaban en completo silencio a la espera de que Alexandre, su hijo, despertara.

─Lamento que haya pasado esto. ─TaeHyung bajó la mirada.

─No TaeHyung, no es culpa de nadie. Solo, tenemos que explicarle todo para que entienda.

─No quiero que nos termine odiando.

JungKook paso saliva nervioso de tan solo imaginarlo.

─Alexandre jamás podría odiarte ─contestó al final.

─Todo es tan confuso para él.

JungKook miro a su hijo, quien se removía entre sueños con el ceño fruncido.

─Parece tener una pesadilla.

TaeHyung volteó para ver a Alexandre. En cuanto quiso acercarse su hijo abrió sus ojos. Alexandre se sentó en la cama, su respiración algo agitada.

El infante vió a ambos adultos, su pecho se calmó pero su expresión de incomodidad y susto no lo hizo.

─No fue un sueño, ¿verdad? ─Ambos adultos negaron, y Alexandre volvió a sentir aquel ardor en sus ojos.

─Dejanos contarte la verdad, y será toda la verdad ─murmuró JungKook, y el infante solo se quedó callado.

JungKook inhaló, y empezó a contar la historia.

Desde que escuchó los rumores de TaeHyung, hasta cuando se topó con el mismo y cuando ocurrió el encantamiento. Luego le contaron como ocurrió su pequeño lío.

TaeHyung siguió explicándole porqué había tomado la decisión de alejarse.

Alexandre hizo una mueca de espanto al escuchar como JungKook en un acto de ira lo había golpeado.

Al finalizar la explicación, Alexandre solo se quedó callado.

─Hijo, dinos algo. ─Insistió TaeHyung, posando su mano encima de la de su hijo.

─Mamá, esto es tan...

JungKook bajó la mirada, no esperaba tener que contarle a su hijo su error con TaeHyung al maltratarlo.

El silencio se hizo presente, y después abandonó la habitación cuando Alexandre habló.

─Desde siempre, he deseado inconscientemente un padre. Que tenerlo ahora, es raro. ─El corazón de JungKook dolió al escuchar aquello─, ahora entiendo nuestro parecido, entiendo porque me gustaba que sus aromas estuvieran combinados, todo cobra sentido.

TaeHyung y JungKook se miraron sorprendidos, Alexandre hablaba con demasiada madurez para tener cuatro años.

─No se miren así, es difícil digerir esto. Y son humanos, cometen errores, pero supongo que podemos empezar de nuevo. ─Alexandre gateo hasta sus progenitores, tomando la mano de cada uno─, no te voy a llamar papá por ahora JungKook, que eso quede claro.

Los ojos del rey enrojecieron, y pronto las lágrimas se hicieron presentes. JungKook asintió con una pequeña sonrisa.

─Sin problemas hijo.

TaeHyung beso la cabeza de su hijo, estaba orgulloso de él. Y lo había subestimado demasiado.

Su hijo era muy inteligente y maduro para su edad.

Pronto, los tres se fundieron en un abrazo familiar.

[ . . . ]

BoGum jugó otro rato con Alexandre, viendo de reojo a TaeHyung y JungKook, que estaban hablando tranquilamente.

─¿Tu también lo sabías verdad? ─BoGum asintió─ ¡Todos me lo ocultaron, no es justo!

BoGum rió ante el comentario de su sobrino.

─No es tan fácil decir la verdad, a veces duele.

─Un dolor necesario.

─En cierta parte, sí.

BoGum estrujó con cuidado la nariz de Alexandre, logrando sacarle unas cuantas risas al menor.

Mientras JungKook y TaeHyung seguían hablando.

─¿Cómo puedo ganarmelo?

─JungKook, no te hagas tanto drama. A Alexandre ya le caías bien desde antes, solo se tu mismo, son casi iguales.

JungKook asintió, mirando a TaeHyung casi hipnotizado. El Omega veía a Alexandre, sonriendo cuando el niño hacia algun hechizo.

─¿Y cómo puedo recuperarte?

Los hombros de TaeHyung se alzaron en tensión, y volteó lentamente su mirada para ver a los ojos a JungKook.

─¿Disculpa?

─TaeHyung, quiero enmendar mis errores. Pero si no sientes nada por mi, solo dímelo. ─TaeHyung desviaba su mirada con nerviosismo─, mirame a los ojos y dímelo TaeHyung.

El Omega se levantó, con sus mejillas sonrojadas.

─Ya veremos cómo enmiendas tus errores JungKook.

TaeHyung se dirigió con Alexandre, quien trataba de volar más alto de sus límites establecidos.

JungKook sonrió, tenía oportunidad de recuperar a su familia.