☆Hermanos Shiba☆ One-Shots

Hermano Mayor

Nota: AU donde Taiju tiene 12 años, Yuzuha 15 y Hakkai 18.

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- Quién es el niño más lindo del mundo?! – preguntó Hakkai tomando las mejillas de su hermano menor, apretujándolas como si fueran de gelatina

- Hermano, s-suéltame! Ya estoy grande!! – se quejó este, sonrojado; odiaba que el mayor lo tratara así

- Me da igual, para mí vas a seguir siendo un hermoso bebé – lo abrazó el más alto de forma efusiva

- Yuzuha!! Ayúdame!!

- Taiju, deja que Hakkai te abrace – dijo esta – Casi nunca está en casa, aprovecha que está aquí

- Pero es que no quiero! – en eso, su hermano mayor le dio un beso en la mejilla, dejando en esta una sensación pegajosa debido al brillo de labios que usaba – AAGH!! NO HAGAS ESO!!

- Ay, bueno, ya te dejo – suspiró dejándolo ir – Con lo mucho que te he extraño – sollozó haciendo puchero, pero al tener ya 18 años, su carita de cachorro regañado ya no era efectiva – En fin, tengo que prepararme para salir

- Eh? Saldrás? – preguntó la de cabellera castaña al teñido de rubio

- Sí. Hace tiempo que no veo a mis amigos y vamos a ir a jugar a las recreativas

- Oh... no beberán alcohol o algo así, no?

- No. Al menos yo no tengo planeado hacerlo, sabes que no me gusta

- En ese caso... Podrías llevar a Taiju contigo?

- EH?! Yo no quiero salir con el Señor Llamativo!! – se quejó el de ojos amarillos señalando la ropa de su hermano

- Taiju, esta semana tengo un torneo de arquería, tengo que entrenar

- Entonces déjame ir contigo!

- Sabes que ahí sólo dejan entrar mujeres

- Pero-!!

- Yo no tengo problema en llevarte, Taiju – dijo el mayor tocando su hombro, pero el mejor le hizo el quite – Tai...

- Iré a ponerme los zapatos – refunfuñó dirigiéndose a la salida; sus dos hermanos mayores suspiraron cansados... Era un poco difícil lidiar con él

El menor de los Shiba estuvo todo el tiempo callado, observó a su hermano charlar con varios chicos a los que sabía que conocía, pero no podía recordarlos... Uno de ellos, un rubio con una cicatriz que parecía muy serio, fue bastante amable con él y le dejó usar sus turnos de juego para que no se aburriera, pero aún así el peliazul tenía cara de querer irse a casa, o eso hasta que llegaron al área de máquinas de gancho... Apoyó sus manos en el cristal viendo con ilusión los peluches en formas de animales marinos, especialmente el adorable tiburón de color azul que sobresalía de entre todos, pero apenas notó que los mayores se habían dado cuenta de su reacción, se alejó de la máquina con evidente vergüenza

- Quieres intentarlo? – preguntó Hakkai, pero con la cara completamente roja, el menor le miró rechinando los dientes

- N-no!! Ya estoy grande para esas tonterías!

- Déjame intentar – dijo el de esponjosos rizos celestes metiendo una moneda a la máquina... Al primer intento logró atrapar el tiburón y apenas lo tuvo en sus manos, se lo extendió al de ojos amarillos con una sonrisa – Ten, un obsequio para ti – Taiju curvó sus labios en un gesto extraño y tomó el peluche, enterrando su cara en él para ocultar su sonrojo

- ...muchas g-gracias... Kawata-san?

- Puedes llamarme Souya – y con su diestra, acarició la cabeza del más joven allí, quien se negaba a apartar el juguete de felpa de su rostro

El resto de la tarde fue bastante divertido, Taiju se soltó mucho y convivió con los amigos de su hermano, llegando incluso a aprenderse los nombres de estos, pero con quien pasó más tiempo fue con el peliceleste, quien pese a tratarlo como un niño pequeño, no lo trataba como un idiota, ni mucho menos como a un bebé como hacía su hermano, cosa que apreció mucho... Volvían a casa tomados de la mano cuando Hakkai le preguntó algo que lo desencajó por completo

- Te gustó Souya? – la única respuesta que atinó a darle fue un puntapié en la canilla – AH-! N-no hagas eso!

- Y tú no digas tonterías!! – gritó con la cara tan roja que le dolía

- Tai, no hay de qué avergonzarse. Todos pasamos por algo así alguna vez en la vida...

- ...En serio no es raro?

- No, para nada – sonrió dándole una palmadita en el hombro – Tener un crush es lo más normal del mundo

- Si tú lo dices... – observó el peluche que sostenía con su brazo derecho y sonrió para luego tomar la diestra del mayor con su zurda – Eso sí! No se lo digas a Yuzuha!!

- Lo prometo, Tai – sonrió – Quieres que te lleve en brazos?

- No, ya estoy grande – respondió a la defensiva, pero en eso recordó lo que Yuzuha había dicho, tenía que aprovechar que Hakkai estaba ahí – ...Vale, puedes levantarme, pero sólo hasta el final de la cuadra!

- Hecho – y lo cargó en sus brazos, recién notando en ese momento lo mucho que su hermanito había crecido...