20. Tarde juntos

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La mano de la azabache se levanto levemente para tocar la esfera de luz color purpura que estaba sobre ella, acompañada de muchas más esperas que se encendían y apagaban por serie cada cierta cantidad de segundos, estaba realmente fascinada, sus ojos no dejaban de observar y seguir las luces mientras observaba a su alrededor, deteniendo su mirada cuando sus ojos se encontraron con los brillantes ojos del mayor en medio de la casi oscura habitación, a pesar de la poca visibilidad podía ver la sonrisa que había en su rostro.

Hikari rápidamente se dió la vuelta para poder avanzar hasta la siquiente habitación, guiándose por las luces del suelo que simulaban pisadas hasta llegar el siguiente montaje, donde luego de pasar entre un par de cortinas finalmente llego hasta la habitación con una mayor iluminación, una gran tela se encontraba a la mitad, permitiéndole ver la silueta de las personas que estaban del otro lado, notando como algunos niños hacían siluetas con sus manos.

Una enorme sonrisa infantil se formó en sus labios mientras la azabache tomaba la mano del mayor, jalandolo hasta un lugar frente a la enorme tela mientras le entregaba su bolso, tomando por sorpresa a Fuma, quien la vio correr detrás de la tela para posteriormente encontrarse con su silueta.

Hikari alzo sus brazos por encima de su cabeza a la vez que se coloca sobre la punta de sus pies, comenzando a moverse con elegancia y delicadeza, permitiendole a Fuma observar su silueta moverse a lo largo de la tela mientras da a algunos saltos y giros, la sorpresa no tardo en apoderarse del mayor junto con una sonrisa mientras seguía los pasos de la joven hasta llegar al otro lado, viéndola alzar su pie casi por completo provocado que la fascinación al verla bailar fuese desbordante, Shigeta Hikari era realmente una caja de sorpresa.

El castaño dirigió su mirada hacia sus costados para ver a algunas personas observando la silueta de la joven del otro lado, tomando fotografías con sus celulares, mientras que los que podían verla no tardaron en notar a la pequeña niña que se acercaba a la joven imitando una vuelta, lo cual logro sacarle una pequeña risa cuando esta volvió a hacer el pequeño giro, extendiendo su mano hacia arriba, de manera que la pequeña volvio a imitarla tambaleándose un poco, pero logrando la posición final, Hikari paso junto a ella y dio algunos giros sobre la punta de sus pies alrededor de ella, haciendo que la pequeña sonriera ampliamente miéntras la seguía con su mirada, tratando de colocarse sobre la punta de sus pies para girar.

Ante los ojos de Fuma, Hikari lucía como una niña más mientras tomaba las manos de la pequeña para avanzar con ella a osar de que esta no logro ponerse de puntillas, la joven era encantadora, la pequeña niña lucía fascinada con cada paso que daba la azabache, y es que la elegancia con la que se movía era realmente hipnotizante, la castaña de repente se despidió de la niña, girando hacía el cuando finalmente lo encontro, tomando su mano para salir rápidamente de allí.

—No me digas que te dió verguenza luego de haber hecho casi toda una presentación —Dijo él sonriendo con diversión mientras la castaña avanzaba por el pasillo hasta la siguiente puerta.

—Fue divertido, hace mucho no bailaba, pero si te soy sincera si me dió vergüenza cuando vi a las personas de repente... —Murmuró ella sonriendo ampliamente mientras se pegaba a él con algo de nerviosismo, sintiendo al mayor envolverla con sus brazos.

La siguiente habitación les dió la bienvenida, dejándoles ver un alto cuarto de espejos y luces blancas por todos lados, Fuma abrió levemente sus ojos mientras giraba a su alrededor, observando su reflejo por la gran habitación, Hikari se acercó a uno de los espejos con cuidado, observando su reflejo con atención mientras mientras levantaba una de sus manos hasta la zona de su rostro.

No entendía como es que había pasado, pero Fuma de alguna manera la había hecho olvidarse por un momento de toda la frustración y dificultad de ser madre, la cercanía del mayor le provocaba una tranquilidad, calidez y confianza que hace mucho había dejado de sentir por personas ajenas a ella y su hijo.

Feel Like Shit •Murata Fuma• #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora